El volley... ya no es lo único.(Kageyama X ___) FINALIZADA

FUTURO/ CAPITULO FINAL

Abrí los ojos, estaba tumbada en la cama a mi lado se encontraba Kageyama, él todavía dormía y era algo normal ya que eran las tres de la mañana, pero lo que a mí me había despertado era un pequeño de seis años, Nori.

-¿Qué pasa Nori?

-Hoshi a tenido una pesadilla.

-Venga vamos.

Tome a Nori de la mano y me fui a la habitación que compartían él y su hermana.

-¿Qué pasa Hoshi?

La pequeña de cinco años estaba sentada en su cama agarrando su sábana.

-Mama- se abalanzo sobre mi- he tenido una pesadilla.

Estuve consolándola un rato hasta que se volvió a dormir, la deje encima de su cama y volví a acostar a Nori, el cual seguía despierto.

Cuando volví a mi habitación me tumbé en la cama y unos brazos me agarraron por la cadera.

-¿Otra pesadilla?

-Sí, la próxima te toca a ti.

Gruño bajo y se volvió a acomodar para dormirse, mañana había entrenamiento.

Mientras Kageyama ayudaba a los niños a vestirse yo les preparaba el almuerzo para ir al colegio y el desayuno para que luego no se mueran de hambre.

-Listos, ahora te toca cuidarlos a ti, tengo que prepararme.

Se fue muy rápido...

-Mama, los zapatos no son cómodos.

Miré hacia abajo y pude ver que tenía los zapatos al revés.

-Yo te los pongo para que sean cómodos Hoshi.

Kageyama iba conduciendo, ya habíamos dejado a los niños en el colegio y ahora nos tocaba ir a nosotros al trabajo.

-Hoy es el cumpleaños de Aki ¿verdad?

-Sí, Yuki y yo le hemos preparado un regalo, dudo que hoy entrenemos mucho, recuerda que mañana vienen a comer.

-Intentaré acordarme, y tu recuerda que el viernes vienes a mi gimnasio para ayudarnos con el entrenamiento físico, que el entrenador no puede venir.

-No te preocupes, yo me acuerdo, te recuerdo que voy a veros sufrir, no va a ser fácil.

-En la preparatoria tampoco lo era.

-Oye, conseguimos salvar ambos clubs, cumplimos el objetivo.

Me bajé del coche, yo ya había llegado a las pistas donde entrenaba.
Después de la lesión en mi primer año las cosas habían mejorado, después de la operación mi rodilla pudo recuperarse y volví al máximo consiguiendo romper varios récords.

-___-chan, ¿lista para la sorpresa?

-Lista.

Nuestra pequeña fiesta sorpresa empezó en cuanto Aki llegó, estuvimos varias horas riéndonos, comiendo o haciendo el tonto, poco a poco las otras personas de los entrenamientos fueron llegando y se iban uniendo a la fiesta.

-Lo habéis organizado bien.

-Gracias Dai.

Dai y yo nos veíamos en todas las competiciones y campamentos durante la preparatoria, y cuando me hice profesional él también lo era, estábamos en el mismo equipo he íbamos juntos a representar a Japón. Con el tiempo pudimos arreglar las cosas, no somos los mejores amigos, pero nos soportamos, que ya es más que antes.