Arlette Torricelli, una chica hermosa con una sonrisa angelical, con ese par de ojos peculiares grises y una carita inocente, ocultaria un secreto y un pasado que la atormenta desde que era una pequeña niña.
Frey Stein es un chico callado, reservad...
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-Ellos no saben quien eres ¿verdad?- pregunto Freya sentándose en un tronco que habia allí.
-Nah, no lo saben. Únicamente que mi apellido es Torricelli y probablemente que vengo de Londres.- le respondió sentandose a la par de la otra chica y Freya solto una risa
-¿Que es lo no que exactamente no saben de ti?
-Bueno...todo en realidad.- se encogió de hombros mientras reía.- No saben que soy una asesina, ni que un mafioso me sigue, ni de mi trastorno, ni mi verdadero apellido, bueno mi primer apellido, ni...
-Ok, ok ya me quedo claro que no saben nada.- la mira con diversión.
-Y ya que estamos solo tu y yo...- la mira cómplice.- Ya me diras el como se conocen ustedes.
-Asi que no los has investigado.- dice más como una afirmación.
-¿Debería?- Arlette paro en seco viéndola.
Freya sabia que no le podia ocultar nada a su mejor amiga, en solo dos años se conocian a la perfeccion cuando una mentía o decía la verdad.
-Con Mila estuvimos en el mismo psiquiátrico en Canadá, nos hicimos muy buenas amigas...
Le contó el como se conocieron, omitiendo el hecho que uno de los esposos de Mila era su hermano y sus verdaderos nombres, también omitió lo que la familia entera se dedicaba, no porque no le tenía confianza para decirle, pero era consciente que no le correspondía decirlo.
-Y asi es como nos conocimos.- finaliza suspirando con diversión.
-Que pequeño es el mundo.- dijo Arlette mirando el cielo, de reojo vio a la pelinegra que la miraba a su lado aguantando la risa.- Habla de una vez, antes que te ahoges por no sacar tus palabras.- Freya solto una carcajada.
-Así que Frey ¿eh?- la empuja levemente.- Es guapo. ¿Son algo ustedes dos?
-Solamente amigos.- responde Arlette con una pequeña sonrisa.
-Vamos Arly, ¿enserio? No parecían muy amigos hace unas horas.- la mira cómplice.
-No se que quieres que te diga...- se encoge de hombros y Freya la mira intensamente.- Esta bien, si me gusta y... no lo sé.- baja la mirada.
-Deberías dejar de culparte Arly.- hablo Freya serena entendiendo lo que le sucedía.
-No se de que hablas.- respondio haciendo la desentendida.
-Bien sabes a lo que refiero.- la miro divertida.
-Mmm la verdad no.- niega con la cabeza.
-Arlette...- la tomo por la muñeca.- La muerte de Federico no fue tu culpa, menos la muerte de Nicolás, tu no tenías idea que te estaban esperando.
-Ellos iban por mi, Freya.- dice sería.- Sabían que estaba en Italia, en aquel psiquiátrico precisamente...- suspira.- Sabían que estaba en Asfil, ellos no debían pagar por mis errores.