Arlette Torricelli, una chica hermosa con una sonrisa angelical, con ese par de ojos peculiares grises y una carita inocente, ocultaria un secreto y un pasado que la atormenta desde que era una pequeña niña.
Frey Stein es un chico callado, reservad...
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-¿Qué está pasando aquí?- pregunta Arlette al ver la cocina.
Luego de estar un rato en la casa de los Stein, llegaron Mila junto a Valter y luego de otro tiempo Freya y Kaia con demasiadas bolsas. Nadie se dio cuenta que había bajado al sótano, aprovechando que Frey seguía dormido regreso a su casa y se encuentra con dos idiotas llenos de harina.
La cocina era un total desastre.
-Hasta que te dignas a venir.- reclama Damián.
-No cambies de tema jovencito.- lo señaló con el dedo- ¿Por qué están llenos de harina?
-Queríamos algo de comer- alza los hombros Verne sin importancia.
-¿Y por qué no pidieron algo? En vez de destruir la cocina.
-Porque quería algo casero y no algo de un restaurante. No tenemos sirvienta quien nos cocine los deliciosos manjares...
-El punto es que la cosa llegó a otra y Poe empezó a tirar la harina, porque según él así se cocinaba.- negó con la cabeza divertida.- Y Padme se fue con Tatiana al Spa.
-Voy a contratar a alguien que les cocine y no destruya la cocina.- dice Arlette para agarrar un vaso de agua.- Pero más les vale que no le llegue a pasar algo, como las otras diez.
-No prometemos nada.- responde Poe con una sonrisa inocente mientras Arlette rueda los ojos.- Por cierto, supimos que hablabas con los Stein, ¿ya volvió el amor?- se burló el rubio.
-Ya conocí a la dichosa psicópata.- comenta Arlette con una sonrisa inocente y ambos la voltean a ver.- Hayden Stein.
-¿Cómo...?
-¿Es más hermosa en persona?- inquiere Poe interrumpiendo a Damián.
-Bueno, pueda que vi la puerta del sótano abierta y la vi allí abajo. Y si Poe, es linda...
-¿Te hizo algo?- cuestiona el pelinegro.
-No...- negó con la cabeza- Pero si esta algo jodida, sin tener que pedírselo me narró todo lo que ya sabía, solo que estaba vez con lujos de detalles. Me cayó bien.
-Deberías presentar a ese manjar.- dice con una sonrisa divertida Poe.
-"Quedamos" que la vería de nuevo, pero no lo sé, verla sería como traicionar la confianza de F... los Stein.
-De Frey.- dice Damián con tono burlón.- Arlette te conocemos como para saber que estas enamorada de él, si es que no es una obsesión. Me sorprendí que hayas durado en que volvieras con el Stein, ya que desde que lo viste me di cuenta que te había atrapado y tu a él.
