「╎Capítulo 01╎」

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Felix detuvo abruptamente sus pasos tan pronto se encontró con una pequeña bolita de pelos que se encontraba plácidamente dormida sobre una de las avenidas más transitadas de la ciudad.

¿Cómo es posible que, a ese gatito no le interese ni en lo más mínimo el hecho de que está obligando a los peatones a caminar por la calle puesto que no está dispuesto a quitarse de en medio de la acera?

No cabe duda que los gatos se creen los dueños de todo lo que se encuentra en su entorno y se encargan de dejarlo muy en claro.

—Será mejor que no... — Hyunjin se quedó en silencio tan pronto tomé a la pequeña bolita de pelos color blanco en mis brazos. —Felix, sabes perfectamente que tu madre no te permite tener mascotas— me recordó.

—Eso lo sé perfectamente— le dije sin darle demasiada importancia. Miré hacia el pequeño gatito que abrió sus ojitos y maulló de una manera tan linda que me hizo sonreír abiertamente y no pude evitar abrazarlo con fuerza, sin embargo, el gatito me arañó mientras intentaba escapar de mis brazos. —Oye, no te haré daño, solo te ayudaré— le aseguré.

La bolita de pelos se dejó de mover y se acomodó entre mis brazos, después cerró sus ojos y continuó durmiendo plácidamente.

—Yo siempre he dicho que los gatos son engendros directos del mismísimo satanás— dijo Hyunjin con tono serio.

—No digas tonterías— murmuré mientras comenzaba a caminar, sin embargo, Hyunjin detuvo mis pasos tras tomarme del brazo.

—¿En serio lo llevarás a tu casa?

—Mi madre no me permite tener mascotas. Me lo acabas de decir. ¿Ya lo olvidaste?

—No...

—Se quedará en tu departamento— sentencié y continué con mi camino mientras aprovechaba que Hyunjin se quedó paralizado ante la noticia.



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Tan pronto entramos al departamento de Hyunjin, el gato saltó de mis brazos y comenzó a pasearse por los alrededores.

—Seguramente está buscando que maldad hacer— murmuró Hyunjin mientras evitaba perder de vista a la bola de pelos.

—No seas tan aburrido. Es solo un gatito, ¿qué daño podría hacer a tu propiedad? — justo acabé de hacer la pregunta cuando de pronto se escuchó como un jarrón caía al suelo y se quebraba en mil pedacitos.

Hyunjin dirigió su mirada hacia mí y me preguntó—: ¿Qué decías?

—Todos los animalitos hacen travesuras, pero es porque no saben que están haciendo algo malo...

—Sí, claro.

—Limpia eso antes de que se lastime mi gatito— le ordené mientras tomaba nuevamente en mis brazos a la linda y esponjosa bola de pelos. —Debo pensar un nombre lindo para ti...

¡𝙼𝚒 𝚐𝚊𝚝𝚘 𝚎𝚜 𝚞𝚗 𝚑𝚞𝚖𝚊𝚗𝚘! 🦋 𝚌𝚑𝚊𝚗𝚑𝚘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora