「╎Capítulo 39╎」

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Tan pronto llegué al departamento, abrí la puerta y esperé a que Minho apareciera, sin embargo, no hubo señales de él, así que, caminé hacia la cocina y no pude evitar sorprenderme al percatarme de que no ha comido, por lo que fui directamente a la habitación y me pareció extraño el hecho de que se encuentre dormido pues él suele estar viendo su serie favorita a esta hora.

—Minho— lo llamé mientras movía suavemente su brazo. Al no recibir respuesta, decidí usar un poco más de fuerza en mi movimiento y fue cuando abrió los ojos y me miró.

—¿Sucede algo? — preguntó somnoliento y no pude evitar sentir mi corazón saltar a causa de la magnífica escena que estoy presenciando puesto que, Minho se ve realmente lindo en estos momentos.

—¿Por qué no comiste?

—No tengo apetito.

—Te revisaré...

—No, estoy bien— aseguró.

—Minho...

—¿Qué te parece si me dejas dormir un poco más?

—¿Desde cuando estás dormido? — no pude evitar preguntar.

—Desde que te fuiste a trabajar...

—¿Estuviste durmiendo durante doce horas seguidas? — él asintió con la cabeza a modo de respuesta, por lo que no pude evitar decir—: Necesito revisar que te encuentres bien de salud.

—No es necesario. Estoy bien, es solo que tengo mucho sueño porque anoche no dormí muy bien.

—¿Estás seguro?

—¡Por supuesto!

—Te dejaré dormir, pero primero quiero que comas un poco. ¿Qué dices?

Minho hizo un tierno puchero y después dijo—: Está bien. 

Fuimos directamente a la cocina y decidí prepararle su platillo favorito. Después de una hora, terminó su comida y se fue al sanitario a cepillar los dientes, así que, aproveché para lavar los utensilios y sartenes utilizados durante la elaboración de la cena y fui al sanitario para cepillarme los dientes y después fui a mi habitación.

Estábamos a punto de dormir cuando de pronto mi celular emitió un sonido, así que, salí de mi habitación y de mala gana respondí la llamada que me hizo sentir un dolor en el corazón. Al finalizar la llamada, regresé a la habitación y miré a Minho.

—Necesitamos hablar...

—¿Qué sucede? — preguntó con curiosidad.

—Un hombre me ha llamado para decirme que es tu dueño.

Minho simplemente asintió con la cabeza y sonrió, sin embargo, la sonrisa no iluminó sus ojitos como de costumbre y me sentí tan triste puesto que está a punto de regresar a su verdadero hogar.

—¿Cuándo volveré?

—Él insistió en venir por ti esta noche.

—Entiendo— susurró.

Se levantó de la cama y caminó hacia la puerta.

—Minho, ¿no te llevarás tu ropa?

—No es necesario— respondió antes de cerrar la puerta de la habitación.

Tengo el inmenso deseo de evitar que Minho vuelva con su dueño porque no me parece lo correcto, sin embargo, yo le aseguré que lo ayudaría a volver a su casa para que pueda continuar con su vida sin importar que mi deseo sea lo contrario a eso. Minho no merece estar en medio de todos los problemas que estoy teniendo mientras hago lo posible para poder traerlo a mi lado para siempre.

"Estoy haciendo lo mejor para él", me intenté convencer.

¡𝙼𝚒 𝚐𝚊𝚝𝚘 𝚎𝚜 𝚞𝚗 𝚑𝚞𝚖𝚊𝚗𝚘! 🦋 𝚌𝚑𝚊𝚗𝚑𝚘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora