Harry Grindelwald

Capítulo 41

Se actualizó el 23/03/2022 a las 21:35 Hora Paraguaya 

El Lago Negro es un lago que se encuentra en los terrenos de Hogwarts. Queda al sur del castillo, cerca de los Invernaderos y Jardines. Los alumnos de primero llegan al castillo en su primer día en Hogwarts cruzando este lago en pequeños botes, experiencia que, aunque normalmente resulta una muy buena manera de brindarles a los alumnos de primero un primer contacto con el castillo, ocasionalmente termina resultando desagradable.

En los casos en que, por ejemplo, algún alumno cae al lago desde los botes o en los casos en que, por mera casualidad, el primero de septiembre de ciertos años resulta ser un día lluvioso, lo que provoca que, en estos casos, los alumnos de primer año lleguen completamente empapados al Gran Salón para su Ceremonia de Selección.

El lago no tiene ninguna conexión directa con otros lagos, ríos o mares. Sin embargo, si se viaja mediante un artilugio mágico, existe un atajo hacia otras zonas navegables. Pero eso no era lo importante en estos momentos.

La segunda prueba del torneo de los tres magos se realizará en estos momentos, y Harry estaba mirando el lago con un tinte no muy agradable. Los jueces de este estúpido torneo en el cual estaba involucrado, no tuvieron la mejor idea de hacer esta prueba cuando el lago estaba prácticamente congelado.

Pero algo que sin duda le molesto, es que usaran a la hija de unos de sus aliados para esta estúpida prueba. La familia Delacour es una familia sumamente relevante en Francia, y uno de sus principales seguidores. Sabía que sus hijas son mitad vela, o un cuarto vela, la verdad mucho no le importaba.

Si una de sus hijas eran heridas, por los habitantes marinos iba a traer malas repercusiones. Los habitantes de este lago eran fieles aliados de Dumbledore, mientras que la Vela de su persona. El fuego contra el agua nuevamente se encontraban, y era algo que en estos momentos a Harry no le convenía.

Miro a Fleur Delacour, una maga sumamente bella que hacía que todo el mundo babee por la chica, algo que no le importaba en lo absoluto. Él no deseaba una compañera que solamente resalte por su belleza, tal vez tenía potencial, pero no el mismo que poseía Hermione. Él no sentía amor por ella, sino por su poder, por su hambre de conocimiento y por ser la única persona que sabía que podía derrotarlo.

Tal vez por eso él no la asesino, pudo hacerlo. Pudo hacerlo en múltiples ocasiones, pero no lo hizo, en cambio, eligió otro camino, manipularla para que se enamore de él, y sin duda que funcionó, incluso mejor de lo que ella pensaba. Hermione estaba dispuesta a matar a sus padres por él.

Eso le quito una sonrisa, tal vez luego de este estúpido juego, iba a tomarle la palabra a su querida novia.

Harry, estás nervioso – La voz de Dumbledore hizo que dejara de ver el lago para mirar al anciano, tarde o temprano ellos iban a luchar y él iba a arrebatarle la varita de saúco, y convertirse en el amo de la muerte – Una prueba bastante complicada, no te parece.

Director– Harry sabía que el anciano creía que Hermione era la llave de su triunfo, él iba a darle razones para que siga creyendo eso, que siga creyendo que Hermione es la única persona que hace que no vaya por el camino equivocado - Usted cometió un terrible error.

Que error Harry – Dumbledore deseaba ver por lo menos un signo de preocupación en su rostro, cosa que no hubo, Harry solamente tenía esa mirada fría y analítica, mientras miraba de reojo – Yo recuerdo, haber tomado todas las medidas de precaución.

Puso en peligro a la persona que amo – Harry dijo eso fue a donde estaban los campeones restantes de este estúpido torneo, dejando a Dumbledore, quieto en su lugar, pero antes de irse Harry se detuvo – Será mejor que sus amigos marítimos, no la hayan hecho nada, no le gustara verme enojado.