Solo Él

Capítulo 28

Los miro como si en verdad tuviera paciencia. Me cruzo de piernas y mi espalda descansa sobre el respaldo del sofá. Ellos están frente a mí y cada uno ha adoptado una expresión neutral.

—No creo que mi tiempo sea más valioso que el suyo —muerdo mi labio.

—Si no fuera por los ojos, diría que eres una copia idéntica de tu madre —creo que me he acostumbrado a los comentarios de Nick, aunque Katy nunca parece cómoda.

—Suerte que no lo soy —le respondo algo lejos de estar ofendida o furiosa— .Hablen, por favor.

»En esos tiempos no había rivalidad entre los Brown's y los Smith 's, después de todo y como te dijimos hace horas, Michael y Fiona eran mejores amigos —comienza Katy ganándose mi completa atención— .La familia de Nick hacían negocios con la nuestra, y él se volvió cercano a tu madre —se encoge de hombros y le da una breve mirada a su esposo antes de volver a mí.

»Nuestros padres acordaron un matrimonio por conveniencia, unir alianzas. Nadie se opuso, tu madre estaba de acuerdo, estaba acostumbrada a las reglas de la familia.

»Todo iba bien —sigue Nick— .Hasta que apareció Thomas. Se enamoró de él, yo no me enteré hasta que apareció en la casa exigiendo verla —todo me suena vagamente familiar, y recuerdo que la historia que Harrison me contó, la deprimente— .Ella ya había huido.

Repaso mentalmente cada una de sus palabras y asiento lentamente —¿Y por qué huyó?

—Eso es algo que solo mi hermana sabe, o tal vez Michael.

—Y, ¿qué hay de Ryan? ¿Cuánto sabe de esto?

—A Ryan lo superó la envidia, la codicia y el poder. Siempre ha odiado a Fiona, a su propia hermana —suena ofendida e incrédula— .Y sólo porque ella recibiría primero el dinero y empresas de la familia.

—Conoces bien su historia, ¿verdad?

Hace mueva y baja la cabeza —Sí...

—Cuéntamelo.

—Pero...

—Katy, tienes que contármelo. Si tu no me cuentas, yo buscaré la manera de saberlo igualmente.

Se queda pensando y levanta la cabeza y mira a Nicholas, que la mira igual que yo, interesando. Me mira y el vómito verbal comienza.

»Fiona me dijo de su embarazo, yo estaba enterada de ti y Ryan igual —sus ojos se llenan de lágrimas y Nick tensa la mandíbula— .Los tres éramos muy unidos, mucho antes de que Ryan cambiara. Nadie más que nosotros y Michael sabía del embarazo.

»Los primeros meses de embarazo fueron bien, claro que nuestros padres no se enteraron, nunca nos dieron mucha atención. Sin embargo, en ese momento Ryan comenzó a cambiar. Era cruel con tu madre, supongo que se puso a pensar y se dio cuenta que la fortuna tardaría un poco más de lo esperado en llegar a él.

—¿Y qué hizo? Porque algo debió hacer para que mi mamá se vaya.

—No lo sé —se encoge bajo las miradas de Nick y mías— .Tu madre guarda muchos secretos.

Pero todos salen a la luz en algún momento.

—¿Qué hay de Oliver? ¿Él también está involucrado?

—No —niega seriamente— .Mis padres tampoco lo están.

—¿Cómo lo sabes?

—Hubieran tomado las medidas necesarias —me responde Nick como si recién se estuviera enterando de esto.

El timbre suena, inmediatamente los tres miramos hacía la puerta. Y tal vez sea lo aterrador del momento, y no puedo evitar preguntar lo siguiente con la voz llena de terror: —¿Esperan a alguien?