Aspen termina de curarme los golpes del rostro y me pongo de pie para verme en el espejo del baño.
Muerdo mi labio inferior y la acción duele pero no dejo de morderlo. Tengo un pómulo morado y parte de la barbilla del mismo color, y una bendita cubre parte de mi ceja. Estúpida, Scarlett.
—¿Me dirás a dónde vamos? —ha estado preguntando eso diez minutos seguidos.
—No —termino de verme en el espejo y voy a la que ahora es también mi habitación, siento a Aspen seguirme como un perro.
Voy al armario y saco unos leggins grises. Con la mirada le pide que voltee y rueda los ojos, cayendo boca abajo en la cama. Suelto una risita y me cambio rápidamente.
—Puedes voltear —le digo y lo hace enseguida.
—No voy a llevarte a ningún lado hasta que me digas a dónde quieres ir.
Ruedo los ojos y hago camino hacía la puerta —Pues le diré a Jake.
—Eh, eh —se levanta en un movimiento de flash y se interpone entre la puerta y yo— .Qué va, yo te puedo llevar.
Sonrío de oreja a oreja a pesar del dolor y asiento —¡Te encantará!
Me pongo unos tenis y salimos de la habitación.
—Oh, Kayla, ¿Cómo estás? —aparece Jake de la nada, ocasionando que salte del susto.
—¿Por qué todos me asustan así? —me hago una coleta y le doy una pequeña sonrisa— .Estoy bien.
—¿Segura? —entrecierra los ojos en mi dirección.
—Sí, tranquilo.
—Si te reconforta, le diste una buena paliza a Scarlett.
Suelto una carcajada. Antes de irme a la habitación, le había echado un vistazo. Se sostenía el estómago, o la costilla, con una mano. Su ceja y labios sangraban y se le notaba que los golpes se pondrían morados.
—Lo sé —miro a ambos hombres y me detengo en Jake, le doy un beso en la mejilla— .Bien, nos vemos.
—¿A dónde vas?
—Saldré con Aspen, seguramente no lleguemos a cenar.
Jake mira a Aspen con recelo y me causa gracia la situación, ya que Aspen lo mira con neutralidad.
—Sólo saldremos, nada más —dice Aspen levantando las manos en señal de rendición.
—Bien —lo señala con su dedo índice— .Quiero que la cuides más que a ti mismo, ¿Oíste?
—No me hables de esa manera —le da un manotazo al dedo de Jake— .Y obviamente la cuidaré, lo hago desde que llegó.
Me mira y volteo el rostro para que no vea mi sonrojo. Me siento como una colegiala.
—Agh, váyanse antes de que me arrepienta —suelto una carcajada y me besa la frente— .Ten cuidado, ¿si?
—Sí —no puedo resistirme y me lanzo a sus brazos, lo abrazo por la cintura y él no tarda en en rodearme con sus brazos y apretujarme contra él—.Te quiero.
Me separo y me sonríe —Y yo a ti, Kay —me vuelve a dar un beso en la frente y me despido de él.
No veo a Isaac cuando llegamos a la sala y salimos del piso. No hay tantos reporteros como en la mañana o en la tarde, pero sigue habiendo varios.
—No queda de otra —apreto su mano con fuerza ante sus palabras y lo miro con pánico.
—C'est trop tôt pour moi d'être devant les caméras —digo mirando a los reporteros con sus cámaras por la puerta transparente.

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Solo Él
Novela JuvenilKayla debe sobrevivir a Londres, donde los secretos comienzan a salir a luz luego de su llegada. Secretos no es lo único que ella descubre, también descubre el significado del amor, la amistad y la traición. ¿Ella está preparada para todo lo que s...