Dependiendo De Ti

capítulo 34. - Recuerdos del pasado.

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— Te amo, pero no puedo quedarme estancada aquí. — dijo sakura recogiendo sus maletas.

Era una oscura noche, aquella casa solo estaba siendo ocupada por dos personas, quienes ahora discutían.

— si en realidad me amaras me entenderías. — habló sasuke cabizbajo.

— ¿entenderte?, dime sasuke, ¿tú me entiendes a mi?

Sasuke no pronunció ninguna palabra. Era totalmente evidente de que él no la entendía.

— No te entiendo. — decidió hablar con la verdad, pues aún tenía esperanzas de que ella se quedara con él.

— Sasuke... — sakura lo miraba con dolor reflejada en su mirada — mi corta vida te pertenece, pero si solo me quieres para estar a tu lado y no avanzar juntos, lo siento... pero no puedo quedarme así.

— ¿por qué quieres ser como yo?

— porque si me convierto en alguien como tú, podría estar contigo toda la eternidad y así olvidarás a mi otra yo!

— son la misma persona, ¿por qué quieres que olvide esa parte de ti?

— porque odio que sepas todo de mi y yo no sepa nada de ti!, nos conocemos hace cinco años y no compartes nada conmigo, nisiquiera me tocas!

— solo me dejarás porque no te digo nada de mi y no me acuesto contigo?

Sasuke se acercó impulsivamente hacia ella, puso sus manos alrededor de la cintura de sakura y unió sus labios con los de ella, pero ella lo detuvo y lo alejó de ella.

— ya es demasiado tarde sasuke y he tomado una decisión. Me iré.

— sakura, detente, mañana lo hablaremos, mañana que estemos más tranquilos encontraremos una solución juntos...

— No! — se negó — ya basta..., basta Sasuke.. — lo miró — iré a nueva York, a continuar con mis proyectos — le dio una sonrisa — tengo una vida muy corta como para quedarme solo sentada a tu lado envejeciendo..

— Sakura.... jamás podría transformarte en el monstruo que soy...., sabes todo lo que hago con este poder.

— no estarías solo.. yo estaría ahí...

— jamás podría convertir a un Ángel en demonio, nunca me lo perdonaría..

— no soy un Ángel....

Tomó sus maletas y salió de la habitación, pasó por un lado de sasuke y solo dejó caer sus lágrimas. Sasuke no la siguió.

Antes de salir completamente de casa recordó todo lo que había vivido en ella, sabía que era egoísta, pero sabía que tenía una vida muy corta.

Se subió al taxi y miró hacia la casa a través de el cristal, no había ni una sola bombilla prendida.

— si algún día vuelvo a ti, espero que estés listo.

El auto empezó a moverse y empezó a sentir frío,  empezaba a nevar...

No sentía frio por el clima, al contrario, estaba muy bien abrigada y su cuerpo tenía un calor desesperante en su pecho.

No lo volvería a ver en esa vida, de eso estaba segura.