Dependiendo De Ti

capitulo 17

¿Que será esto?..

- oye sakura!

Ino me saca de mis pensamientos haciendo que me fije completamente en ella.

- ¿que pasa?- pregunto

- acaso no estabas prestando atención?. - me mira esperando alguna respuesta positiva pero al ver mi silencio se dio cuenta que no le estaba prestando atención en lo más mínimo. - te decía que qué te parece el peinado.

- ah.. - toco la trenza con mis manos y luego lo miro una parte que pase por mi hombro- es hermosa. Gracias Ino

- no es nada, siempre que quieras que te ayude en esto no dude pedirme ayuda, nunca dudes de mi.

Nunca dudes de mi.

Que clase de amiga le esconde cosas a su mejor amiga?

Nunca dudaría de ti. Solo tengo miedo.

- deberíamos ir a descansar, mañana nos iremos apenas salga el sol - digo abrazando a Ino

- no creo poder dormir, la cascada hace mucho ruido, tengo frío y hay muchos mosquitos. - dice Ino dándome también un abrazo

- no te quejes, ¿cómo quieres ser una sacerdotisa como Tsunade si te la pasas quejándote de todo?- le reprocha Sasori

- por querer ser una sacerdotisa no quiere decir que voy a aceptar la poca caballería que me ofreces ni este tipo de tratos, ¿acaso creen q soy un animal?, merezco algo mejor!

Luego de una breve pelea entre Sasori e Ino, se durmieron uno cerca del otro.

De cierta forma Ino tenia razón, hacia mucho frío. Me acurruque cerca a Sasori y me quede dormida junto a ellos.

Ino la conocí hace 4 años cuando fui a un rescate a una Aldea junto a Minato.
La pobre estaba devastada tras la pérdida de su familia, pero con tiempo logró superarlo o eso era lo que demostraba, no me gustaba tocar ese tema con ella ya que sabía que a ella aún le dolía en su corazón.

Sasori lo conocí semanas después de haber llegado a la Aldea, el ya estaba ahí antes que yo y era como un sobrino para Tsunade, ella lo cuidaba y al le molestaba. Con el tiempo empezamos a tomar confianza y cariño, después de todo nos íbamos a querer si o si. El vivía con Chiyo, la otra sacerdotisa que vivia con Tsunade, y yo vivía con Tsunade, lo cual los cuatro estábamos bajo el mismo techo, retomabamos entrenamiento juntos, vivíamos juntos, hacíamos misiones juntos, dormíamos algunas veces juntos (no piensen mal.), salíamos a todo lado juntos y en nuestra frente estaba las palabras tatuadas Siempre Juntos.

●

Empezó el nuevo día, recién salía el sol y nosotros ya estábamos caminando, la única que se quejaba era Ino, sobre el frío que había esa mañana y que en algunas partes del bosque la luz solar no llegaba.

El hambre se hizo presente, con suerte estábamos en un bosque, debía haber cualquier tipo de árbol de fruta.

Y ahí estábamos nosotros, comiendo mango, cada uno comió hasta quedar satisfecho. Luego de otros pasos más encontramos banano, volvimos a comer sin dudar un segundo.

Recorrimos aquel lugar ya que si había comida podíamos encontrar sobrevivientes. Como lo predije se hizo.

Encontramos a un hombre con un hijo e hija, en es rostro del niño había preocupación, el hombre aceptó inmediatamente ir con nosotros luego de haberle demostrado que éramos humanos y la niña moría lentamente de hambre frente a nosotros.

Ya no ingirió nada aquella niña, decía que moría de hambre pero no resivia nada, no tenía la fuerza de masticar la comida..
Era triste ver como aquella niña moría lentamente frente a mi, ¿acaso no podía hacer nada?

Si podía.

Metí banano en mi boca y lo mastique haciendo lo posible de que no fuera necesario masticar.

Se lo di como pude, la niña solo tragaba, repetí ese procedimiento una y otra vez hasta que la niña me dijo que por primera vez sentía que iba a explotar, estaba satisfecha.

No tenía mejor tratamiento ahí pero podía salvarle la vida si la llevaba a la Aldea lo antes posible.

- Ino. - la llamé

- No. - dijo antes de mirarme.

- ¿que?- dije confundida.

- sé que me pediras que los lleve a la Aldea, no lo haré, que lo haga Sasori, yo... me quedaré a tu lado.

En realidad pensaba enviarla devuelta con Sasori, pero sabía que ninguno aceptaría, Ino quería irse de ahí pero desconfiaba de su regreso a casa, pero tampoco la quería que se quedara aquí ya que habían enemigos rondando por aquí..

- por que no dejas esto para mañana y primero nos vamos con estas personas, necesitan atención médica lo más pronto posible. - dijo Sasori.

Era cierto, aquellas personas sufrían. La niña estaba debilitada, el padre tenía una horrible cortada en la planta de su pie, estaba infectada y lo peor de todo es que parecía que se estaba pudriendo esa parte de su cuerpo, al niño no le veía nada, no tenía cortadas profundas, ningun esguince, ni lesiones.

No tenía otra opción que volver a la Aldea esta vez, no pude verlo pero volvería apenas tenga la oportunidad.

●

Habíamos logrado llegar a la Aldea, el camino fue complicado pero habíamos logrado llegar sin ninguna lesión.

- y bien?- me preguntó Tsunade

- no es la gran cosa... ya sabes... nos encontramos a dos pero no te preocupes no paso nada.. - dije rápidamente para tranquilizarla ya que apenas mencionar que nos encontramos a dos su cuerpo se tensó

- ya veo. Hiciste un buen trabajo pequeña. - hablo Tsunade

- gracias, mañana volveré, seguro hay más personas en el mismo caso que estas. ¿Como están?- pregunté

- mucho mejor. Pero ahora que mencionas de que mañana te irás nuevamente tengo algo que decirte.

- dime

- sabes que aquí en la Aldea ya no queda mucho espacio, tres a cuatro familias viven bajo el mismo techo. - hablo y yo solo la escuchaba atentamente. - necesito que mañana visites la Aldea de Minato y hables con el viejo para que unamos las aldeas, convencelo.

- ya veo... - de verdad me estaba pidiendo convencer a Jiraiya ?

- es para construir algunas cosas allí, el sector de el esta bien situado, el suelo es firme y no creo que haya problema.

- bien. Cuenta con ello. - aseguré

- descansa. - salio de la habitación dejándome sola.

Mañana me espera otro día, por ahora descansaré y me limitaré en no pensar en él.

Hola, nuevo capítulo! Espero que les guste y si les a gustado denme una estrella porfavor.