𝐀𝐂𝐀𝐃𝐄𝐌𝐈𝐀 𝐋𝐀𝐍𝐂𝐀𝐒𝐓𝐄𝐑 ✔️

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MÚSICA
Into The Past (Reboot) - NERO

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Capítulo 56
Ralph tenía razón

—¿Dónde?

Fue lo primero que dijo Margo cuando Milo los condujo a ella y a Ralph a la oficina del director.

Al abrir las puertas se encontraron con el resto de sus compañeros. Andrew, Martha, Cassia, Raquel y Xenia se encontraban en el living de la exagerada oficina del director.

Milo, Ralph y ella bajaron las escaleras, Margo casi corrió hacia el resto en búsqueda de respuestas. Xenia vio la desesperación en sus ojos.

—¿Dónde está? —volvió a preguntar.

Andrew sentado en uno de los sillones junto a Margo, tomó su mano y la acarició tratando de que esta se calmara por lo menos un poco antes de explotar.

—El director detectó uno de sus portales a unos treinta minutos de aquí —le dijo este con calma.

—¿Un portal? —Margo confundida volteó a verlo.

En aquel momento, todos los presentes escucharon los pasos de unos zapatos de vestir descender de las escaleras que llevaban al balcón del segundo piso de aquella oficina.

—Deylen logro abrir un portal, llevo un registro de cada salto que comete, y esta vez hubo indicios de uno hace unos minutos en un centro abandonado —explicó el director dirigiéndose a sus alumnos.

—¿Cómo sabemos si no es una trampa? —preguntó Cassia un tanto preocupada.

El director apoyó su bastón sobre el suelo y se sostuvo de este. Miró a todos con detenimiento y entonces se encontró con la impaciencia de Margo en ellos.

—Trampa o no, tenemos que ir a buscarlo —interrumpió ella con desespero.

—No es ninguna trampa —la corrigió el director—. Si secuestraron a Deylen es porque lo más probable es que quisieran sonsacarle información o... usarse con su poder. A penas lleva un día desaparecido, es muy poco tiempo para que hayan logrado algo siquiera, lo más previsible es que se les haya escapado de las manos a fin de cuentas... el problema ahora es, si ellos saben lo que significa el hecho de abrir un portal...

—Se refiere a... —Xenia tragó nerviosa—... ¿a que si ellos saben que usted puede detectarlos?

—Exactamente Xenia —asintió el director—. Es por eso que no podemos perder ni un segundo, como ya es costumbre, el tiempo no esta de nuestro lado. Así que vayan por el equipo, saldremos en cuanto estén listos, por favor no pierdan ni un segundo.

—¿Salimos? Director... —Ralph lo observó como si estuviese mal—... ¿usted también vendrá?

Xenia miró a Ralph, pero este miraba al hombre mayor como si de verdad estuviese errado por primera vez.

—Si Ralph, yo también iré —asintió.

—Pero... ¿y la academia? —negó con la cabeza—. ¿Quién va a protegerla si alguno de ellos vuelve a entrar? Quizá todo esto es una distracción para alejarlo de aquí...

—Yo no soy el único responsable de esta institución muchacho —sonrió el director—. Sus profesores están más que capacitados para defender este lugar y los estudiantes dentro con sus vidas.

—Pe...

—Confía en tus mayores, Ralph —intervino el director antes de que siguiera—. Ellos saben lo que hacen.