Sirviente (Yaoi/BL)

Cap. 24

Mi tío fue una de las últimas víctimas de la guerra, se trató de ayudarlo en un hospital, pero claramente fue imposible. Aun así nos quedamos a cuidarlo con la esperanza prácticamente de un milagro.

La última noche yo estaba con él junto a mi prima, era muy pequeño y mi madre se había ido a casa a comer, ducharse y descansar un poco, pero me acuerdo que jugaba a las cartas con él... Prácticamente solo le quedaba la mitad del cuerpo, mi prima debía ayudarle... le gustaba mucho jugar a las cartas.

Llevaba días parpadeando diferentes partes de su cuerpo sin que nadie pudiera hacer nada, ni mi madre.

–Me duele un poco... déjame descansar... después seguimos –Murmuró con las pocas fuerzas que le quedaban brillando un par de sus dedos dejando las cartas boca abajo.

Era solo un niño pequeño... No entendí ni que ocurrió cuando al cabo de unos minutos desde que se quedó dormido su cuerpo se consumió en luz dejando solo vendas, gasas, el pijama, las vías... todo quedó ahí menos su cuerpo.

Tuve pesadillas por años creyendo que cuando me durmiera me pasaría lo mismo.

Había pasado mucho tiempo desde aquello.

–Jamás esperé escuchar que un hospital no pudiera ayudar a todo el mundo –Suspiró Shura con impotencia al escuchar mi relato.

–Hay muchas especies en la misma situación que la mía, pero es lo que hay, no se puede hacer nada –Respondí con resignación estirando las piernas–. No vas a seguir entrenando?

Había parado por completo solo por escuchar mi relato.

–Si, em... flexiones –Trató de volver de sus pensamientos para continuar con sus cosas.

Y puso el cronometro para que yo solo tuviera que darle al botón y decirle cuando parar.

–Zaid esta súper convencido de que volverás con una medalla –Comenté intentando hablar de un tema más animado–. Estoy deseando ver con que regresas, aunque me da miedo que por lo ocurrido conmigo sea un bronce.

–Vendrás a verme... –Respondió entre flexiones sin parar– Podrás ver... La entrega de premios...

–No creo que la señora Yudina necesite que vaya para nada –Negué sin poder evitar fijarme lo bien que se veía tan concentrado en sus ejercicios.

Shura podría ser casi un modelo cuando se concentraba parecía que nada podía opacarlo.

–Vendrás –Concluyó sin necesidad ni de pensarlo.

Y a los pocos segundos le dije que parara.

–A parte de mi también viene Sacha, y siempre llevamos a un sirviente que nos ayude a parte de Eve, normalmente es Arán, pero este año tu eres nuestro sirviente privado, vendrás tu –Explicó antes de darle un trago al agua.

–No se... yo no sé en que podría ayudaros o serviros en esa clase de concurso –Murmuré con dudas.

–Animarme, no necesito nada más.

De alguna forma sus palabras me hicieron sentir algo de calor en mis mejillas acelerando un poco mi corazón mientras Shura secaba el sudor de su cara con la toalla.

–No se si voy a ser un gran animador –Susurré apartando la mirada aunque estuviera emocionado por sus palabras.

Que me pasaba?

–Hagamos una cosa –Habló sentándose frente a mi apoyando una mano un poco más atrás para poder reclinarse dejando el peso de su cuerpo sobre esa mano–, para animarme a conseguir de mínimo alguna medalla me darás algún premio si ganó.