Volverte a ver...

Regresando a casa...

Al siguiente día después de lo ocurrido.

POV VALENTINA.

Hoy he despertado con un dolor de cabeza terrible; menuda resaca tengo esta mañana o, mejor dicho, esta tarde. De anoche solo recuerdo que me fui de fiesta con Anita y Antonio, ellos no son precisamente amigos míos, pero sí los que están ahí para cuando de fiesta se trata.

Anita estaba con su nueva conquista, y pues yo estaba muy animada bebiendo con Antonio; este chaval sueña con que me meta a la cama con él... ¡Pobrecito! El hecho de que me encuentre en la lista de las chicas solteras de Madrid no significa que me voy a liar con cualquier persona, y hablando de camas, ¿cómo coños llegué yo hasta acá? Mmm pues ya lo averiguaré luego, lo importante es que estoy sana y salva y que esta vez no me quedé dormida en el elevador. Por lo pronto, necesito tomar una ducha y tomar algo que me ayude con este dolor de cabeza, pero primero llamaré a mi queridísima amiga Monse, debe de estar furiosa porque por más que me pidió que no saliera a beber, yo terminé ignorándola.

- ¿Cómo está la mejor amiga del mundo? - le pregunto - Dime que no estás cabreada conmigo y que me amas mucho.

- ¡Ah que sí eres una gilipollas, Valentina! - está muy cabreada - ¿Qué son estás horas de dar señales de vida? Es que claro, tú como siempre me ignoras y terminas haciendo todo lo contrario a lo que te digo, no sé ni para qué pierdo mi tiempo dándote consejos si al final te pasas mis palabras por el coño.

- ¡Monse, tranquilízate please! - le digo bajito - No es necesario que grites, te escucho perfectamente, además, solo quería decirte que a pesar de todo estoy bien...

- ¿Ah sí? Y cuéntame ahora, ¿cómo le hiciste para llegar hasta tu departamento? - sigue molesta- ¿ahora quién te encontró dormida en el elevador?

- Nunca vas a superar ese episodio vergonzoso en mi vida, ¿cierto? Pero respondiendo a tus preguntas, no recuerdo como llegué hasta aquí, lo último que tengo en mi memoria es que estaba con Antonio y Anita, luego ella se fue a bailar con un chabón bien feo que se supone es su nueva conquista. Aaaah y no, nadie me encontró en ningún elevador, amanecí sana y salva en mi camita. - le aclaro.

- ¡Valentina! - me vuelve a gritar - Dime que no terminaste metida en la cama con el imbécil de Antonio... Te juro que de ser así, viajo ya mismo hasta Madrid y te traigo de las orejas. - sí que es capaz de hacerlo.

- ¡Nooo! Estoy segura de que nada pasó entre él y yo... De ser así, aquí estaría o al menos yo hubiera despertado desnuda, además, no me duele nada de nada, mi zona sur está en calma, así que acción aquí no hubo. Ahorita lo importante es que estoy bien, ya luego le preguntaré, si lo hago ahora, va a pensar que solo quiero hablar con él por otros motivos. - suspiro - ¡No me sermonees más, please!

- Valen, no es sermón... - la escucho más tranquila - Sabes bien que para mí es muy difícil estar lejos de ti, no poder estar a tu lado en tiempos difíciles, por más que sean unas cuantas horas las que hay de distancia entre nosotras. Mira que te la pasas viajando todo el tiempo y ahora que has decidido mantenerte en Madrid, no le paras a la fiesta, y lo peor es que te juntas con personas que no aportan nada bueno. ¿De verdad piensas en dejar el modelaje?

- Para mí tampoco es cosa fácil, Mons ... De verdad que te necesito mucho, necesito de tus apapachos y hasta de tus consejos, aunque te encante regañarme. Todo lo he estado haciendo mal y ahora más que nunca siento que necesito un break, necesito desconectarme de muchas cosas, de Madrid y hasta del modelaje, aunque sea por un tiempo.

- ¿Por qué no te vienes un tiempo para acá? Mira, sé que Galicia no se compara en nada con Madrid, pero es un lugar hermoso y lo más importante, es un lugar en el que te puedes desconectar y estar más tranquila. - la verdad es que es una buena propuesta.