Her Books His Billions [+18] 📚💎 1° Libro Biología Billions

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Savannah

Había pasado una semana desde que me dieron de alta del hospital, Alek no se separaba de mi en ningún momento, cuando me trajo al departamento, se había encargado que no hiciera demasiados esfuerzos, insistió en que me mudara a su habitación con la excusa de que no debía moverme mucho, sabía que el lo hacía para que estuviera con el, mi ojo se pudo abrir por fin, desde que regresamos del hospital, mi esposo se ha convertido en mi enfermero personal.

Estaba saliendo de mi habitación rumbo a la terraza para tomar un poco de aire evitando que me viera Alek, sin embargo, mis pasos se vieron detenidos por unos brazos que tomaron mis pies para luego cargarme al estilo princesa, Aleksander tenía su ceño fruncido, al sentir que lo miraba volteo a verme pero yo aparte mi cara como niña regañada.

— Nana— Aleksander levantando la voz llamando a Estela quien salio corriendo de la cocina para después verlo molesta— le dije que no se moviera de su cuarto.

— Les llevaré la comida al comedor— Estela con una sonrisa.

— No— Alek mirándola serio— vamos a comer en la terraza, a partir de mañana toma dos semanas libres.

— ¿Y quién la va a cuidar?.

— Yo la seguiré cuidando, soy su esposo.

Estela no dijo nada y se retiro agradeciendo a Aleksander, quien aun me estaba cargando.

— Bájame Aleksander Müller Lennox— Tratando de sonar molesta.

— No vas a lograr que te deje caminar sola diciendo mi nombre.

Una vez en la terraza se sentó en su silla para después ponerme a mi arriba de una de sus piernas, trajeron la comida, la cual consistía en un caldo de verduras, pollo a la plancha con arroz y brócoli, Estela al ver mi posición nos regalo una sonrisa para después servir un infusión de limón.

— Aquí tienen— Mirándonos con una sonrisa— buen provecho.

— Gracias.

— Me retiro, ya compre despensa para las semanas que no estaré y puse comida que preparé en el congelador.

— Gracias Estela.

Asintió con la cabeza para irse, no sin antes decirnos que nos cuidaramos, una vez solos, claro con Taylor quien se mantenía en una esquina con su mirada seria, me iba a levantar para tomar mi asiento pero la ágil mano de Alek me volvió a colocar en mi anterior posición, esta vez sujetando mis caderas mientras pasaba sus dedos por esta de manera pausada.

—Abre— Tomando un tenedor con pechuga y arroz.

—Puedo comer sola— Mirándolo molesta— no estoy invalida.

—No te pregunte si podías comer sola o no— En tono serio—te dije que abrieras la boca.

— ¿Y si no quiero?— En tono desafiante— ¿Qué me va a hacer señor Müller?