◇Capítulo 27◇

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La siguiente noche, después de haber pasado todo el día en casa, fuimos al consultorio y Ana Iris ya tenía el pisaron lleno de datos, fechas rayones.

—Estos demonios son invasores porque invaden el cuerpo de una persona, pero, a que se refieren con pasivos? —ella estaba tan concentrada hablando y mirando su obra de arte en el pizarrón que por momento juraba que se había olvidado que los demás estábamos allí— Quizás al hecho de que se puede negociar con ellos, y esto es una corazonada, y más adelante le diré por qué... ahora les quiero primero contar como llegamos a todo esto. Se que de seguro recordarán la historia de aquella bruja pero, hay mucha historia antes de llegar a eso. Verán, en varios artículos incluyendo al de Michael D. Bailey, podemos encontrar trozos de toda una historia, Bailey nos cuenta que en 1438, un joven, se dirigió a una iglesia a hacer una confesión, años atrás su propio padre le había obligado a unirse a un culto satánico de brujas. El joven fue tan gráfico que todos podían imaginar a la perfección todo lo que decía él, que las brujas habían volado de noche en un caballo negro para unirse a más personas reunidas en un prado. Que el mismo Satanás también estaba allí, en forma de gato negro, con ojos enormes y luminosos. Que todos se arrodillaban ante él, para adorarle.

Después de esto el padre confesó intentando tener un menor castigo, pero fue ejecutado, esto desató una cacería, una era donde la gente creía en todo, brujería, la magia, hasta en las hadas. Después de varios años la gente y sus descendientes seguían bajo aquella creencia, ya que los rumores eran cada vez peores, los religiosos hablaban de seres que se reunían a adorar a demonios, a realizar cultos, asesinatos, orgías... dominados por esta creencia, obviamente los ciudadanos juraban ver y escuchar cosas que contribuyeron a aquellos rumores y por esto fue una de las historias más difíciles de vencer. El pánico se había desatado en niveles muy altos, y por todos esos años de historia fue que se tomaron medidas tan extremas como la ejecución de un supuesto grupo de brujas en 1587, y esta no fue la única vez, se dice que las autoridades ejecutaron a muchas personas más acusadas de brujería. En esa misma época una de las "brujas" antes de ser ejecutada, dijo que iba a liberar unos demonios que cargaba consigo, que había fracturado su alma en 13 demonios que vivirían entre los humanos, que estos invadirán sus cuerpos y vivirán dentro de ellos haciéndoles vivir a su voluntad y como lo que en ese momento odiaban tanto. Esta es la bruja que en su propia historia estaba ya cansada de aquellas cacería y de las atrocidades que se estaban cometiendo, por lo que entregó su alma a Naama para que esta enviara demonios a la tierra.

Cuando esta bruja fue lanzada al fuego las llamas eran verdes, todo ardió como si hubieran tirado aceite al fuego, todos los que estaban allí juraron ver luces que salían de las llamas donde ardía aquella mujer y que luego subían y subían hasta que luego se dispersan entre sí y se alejaban.

De nuevo les digo que estoy 95% segura de que estamos tratando con uno de aquellos demonios. Tambien encontré otro libro que habla de estos demonios pero no de su origen, sin embargo eso ya no es necesario.

En 1605, empezó un nuevo rumor de que aquellos demonios eran reales y que estaban atormentando a un pueblo en Europa Central, todo esto solo fue un rumor hasta que la gente empezó a acusarse entre sí de ser demonios, un día un señor de muy bajos recursos se dirigió a un grupo de personas, confesó que había intentado suicidarse y que en medio de la desesperación del momento había cambiado de opinión, entonces pasó que algo vino a él y le dio una segunda oportunidad, que aquello era un demonio, uno de los demonios de aquella bruja de la historia y que era capaz de reconocer a los demás demonios. También dijo que sabía cómo detenerlos y encerrarlos para siempre. Este señor pidió tiempo para cumplir su cometido, la razón por la cual estaba aún con vida, y que después de cumplir con aquella misión, le ayudaría a atrapar a los demonios.

Aquel señor se llamó así mismo recipiente con la conciencia limpia y libre, que el tenía todo dominio de sí mismo, que aquel demonio solo vivía dentro de él por una decisión propia y que había llegado a un acuerdo con el demonio.

Recuerdo que vi algo parecido a esto, hablando de igual forma de "un recipiente con conciencia limpia" solo necesito encontrar ese libro. Porque creo que este es un hilo del cual se puede jalar. Lo último que recuerdo que leí fue acerca de que supuestamente aquel señor llamó a su acuerdo o relación con el demonio un acuerdo sin contrato. Lo que me llevó a pensar, que significa cuando tienes un servicio sin contrato? —De repente se escuchó un ruido y todos miraron hacia mí.

—Ay perdón, que tonta, lo lamento tanto— Dije al ver el desastre que había hecho, unos libros y hojas de papel habían caído al suelo, estaban en la orilla de la mesa cerca de donde estaba.

—Fue mi culpa, creo que ya estoy muy cansada, ustedes no?

—Pues con lo emocionada que estoy me olvidé del sueño.

—No te puedes dejar llevar de eso, tía tienes que descansar, ya mañana estarás más fresca, relajada y con la cabeza con más espacio para conocimiento —dije en plan de broma.

—Pues a mi si ya me pesan los ojos —dijo Kelvin estirándose en su silla.

—Pues no se diga más —dije entre un bostezo, vayamos a descansar y sigamos con las lecciones de historia mañana. Yo organizo esto aquí de un prontito —doblé mis rodillas para recoger la pila de libros y papeles tirados en el suelo.

—Necesitas ayuda? —Escuché a Kelvin acercarse.

—No, estoy bien.

Después de decir aquello, sentí que diría algo más pero, escuché el timbre de su celular. Sonó por unos segundos y el no quiso contestar. Me puse de pies con los libros en mano.

—No vas a contestar?

—Ya contesté unos mensajes pendientes, se que es eso —me contestó y lo vi escribiendo en su celular.

Yo organizaba los libros en el escritorio donde estaba sentada y me quedé con un libro en la mano. Sentí su mirada en mi hombro así que no me tuve que girar para saber que me veía.

—Que me ves?

—No te lo había mencionado antes pero, por que no has cambiado nada? digo, esperaba verte diferente físicamente.

—No sé, solo se que no he envejecido, digo, no es que a los 23 me vea como Ana Iris pero, se supone que no me vea como de 17.

—De hecho como de 14 —se burló— así te veáis a los 17 casi cumpliendo 18.

—Tienes razón. Por qué no vas dándole la vuelta al auto, ya salgo.

—Esta bien.

Yo me quedé un momento, puse el libro en algún lugar y cuando salí ya Kelvin estaba esperándome en la entrada, cerré el lugar y me subí al auto.

—Te gustaría ir a algún lugar ahora? —propuse, él me miró y ya sabía lo que iba a decir, lo vi en su cara— Olvídalo —me puse el cinturón de seguridad.

—Es que mañana tengo una reunión importante, ya es tarde, tengo que descargar y prepararme.

Yo solo veía al frente sin decir nada —Ya vámonos— le dije al ver que no avanzábamos.

Él ya no dijo nada y nos fuimos a casa, cuando llegamos salí del auto sin decir nada y entre a casa.

Iterum Resurrectum.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora