CAPITULO XXXIII: WHAT IF...?

667 92 67
                                    

UN MES DESPUES:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

UN MES DESPUES:

Esa noche Roseanne se fue y no volvió.

Y después de todos esos días, Lisa sentía que el mundo se derrumbaba encima de ella. Lo único que deseaba era volver a Paris y drenar todo el dolor como lo hizo hace seis años, aunque no sentía que esta vez lo iba a lograr.

Había estado hiriendo a Rosé por semanas, y ahora simplemente la había decepcionado.

Cuando cruzaban miradas en Chanel, la rubia solo se giraba, ignorándola por completo. Pero al menos no había furia ni molestia en sus ojos. Era terror y tristeza.

Lisa lo sobrellevó, intento hacerlo, en realidad. Llegaba a casa y dormía o trabajaba hasta que sus ojos no podían permanecer abiertos. Y lo mismo en Chanel, no salía de su oficina a menos que fuera estrictamente necesario.

Pero había un problema

Jisoo.

Por alguna razón, no paraba de recordarle a Lisa todo lo que hizo en el pasado, recalcando que ambas estaban en ese pozo sin fin por culpa de Lisa.

Pero Lisa lo mantenía a flote.

Hace cuatro días fue el lanzamiento de la colección de Lisa, era una sensación diferente, porque estaba sola y Rosé claramente solo estaba en el lugar por obligación, eso lo pudo ver por la incomodidad en su rostro cada que Lisa se le acercaba.

Y Jisoo... ella había tomado una actitud diferente cuando están en público, todo era sonrisas y gestos de amabilidad, y siempre dejaba en claro su inminente interés en cierta tailandesa. Era Un claro cortejo, así como lo habían llamado los medios.

Ninguno sabe lo que hay detrás de ello. Un amor incondicional que fue fragmentado por inseguridades y celos.

—Me gusta el estilo que le diste al blazer azul en tu colección, ¿crees que podamos hacer algo parecido? Pero me gustaría agregar un corte por aquí... —Jisoo señaló en el esquema del diseño sobre el ordenador —Y otro aquí para... —dejó de hablar, al ver que Lisa no ponía atención. —¿Estas escuchando lo que digo?

—¿Qué? Si... es que, uh... no soy muy buena con esos cortes. —Rascó un poco su nuca, confundida. Porque no esta segura si eso fue lo único que Jisoo dijo.

—Pero yo sí, tengo una habilidad perfecta para esos cortes. Deberías practicarlo, una diseñadora incompleta es como... unas papas fritas sin kétchup. —Hizo una mueca extraña, y Lisa no resistió.

Ella sonrió, para después dejar salir una risa que duro más tiempo de lo que alguna de sus risas haya durado en semanas.

—Eso fue una muy mala comparación viniendo de ti. ¿No se supone que odias el kétchup? —Lisa preguntó con las cejas arqueadas.

Pero Jisoo quitó su pequeña sonrisa, no se suponga que Lisa la conozca tan bien, aunque si lo piensa un poco... es ilógico, estuvieron juntas por mucho.

AFTER THE GOLD RUSH | CHAELISADonde viven las historias. Descúbrelo ahora