28

1.9K 307 134
                                    

Hongjoong.

No sé cuántas horas habían pasado, no tenia noción del tiempo. Pero me sentía cansado, incluso había dormido, como unos veinte minutos, y en el otro que estuve despierto, aún me sentía como si no hubiera dormido nada.

Durante ese transcurso, mis padres habían ido a buscar mis cosas, ropa mía, de Daehyun, pañales y todo eso del cual estaba feliz de no preocuparme. También, lo chicos me enviaron un mensaje diciendo que no podían entrar a verme porque tenían clases, y que San me dijo que no pudo ir porque tenia una prueba, y que llegaría en un rato más.

Me sentía bien, después de todo, Daehyun ya había nacido, y no pasó nada complicado, nada que haya puesto en riesgo su vida o la mía, aunque igual recordaba las palabras que me dijo Seonghwa cuando le comenté mis temores sobre eso. No sabría que seria de mi vida si no viera a mi hijo finalmente, no seria lo mismo.

En ello, Seonghwa, Yunho y mis padres llegaron. Ellos sonrieron al verme con Daehyun en brazos, pero solo me percaté de eso, porque no podía quitar mis ojos del rostro de mi hijo.

—No puedo creerlo —dijo mi padre, acercándose a mí. Mi hijo bostezó y siguió durmiendo—. Qué pequeño se ve, quiero saber bien cuanto midió, este chico dijo que 49 centímetros y no se ve para nada así —dijo apuntando a Seonghwa.

—¡¿49?! —fruncí el ceño—. ¿Medio metro, Seonghwa?

—¡Eso escuché! Aunque no sé si eran segundos, de peso o de largo. No recuerdo bien —hizo una mueca—. ¡Estaba nervioso!

—¿Y no habrá una ficha clínica? —preguntó Yunho, mirando unos papeles que estaba a un costado de la cama, en una carpeta—. Sí, aquí, es como información para las "madres" —rodee los ojos.

—Ay, Dios —comenzó a reír Yunho—. Si te equivocaste.

—Disculpen —apareció una enferma—. Vengo a revisar unas cosas. ¿Está todo bien?

—¿Esta información está bien? —preguntó Yunho, mostrándole la hoja.

Daehyun se removió entre mis brazos y mi madre se acercó para verlo también, se lo entregué y ella lo tomó, mi padre lo miró desde ahí y sonrió al ver a su nieto.

—Sí, aunque hay veces que no son totalmente exactas.

—¿Qué puede variar? —preguntó Seonghwa.

—Todo —dijo ella tocando la bolsa de suero—. El peso, la hora, el tamaño.

Yo miré a Seonghwa. Ella tomó la hoja y la miró.

—Dígame, ¿el bebé se ve de 49 centímetros? —volvió a preguntar mi mejor amiga. Yo me apoyé en la almohada que estaba detrás de mi espalda y me crucé de brazos.

—Bueno, puede ser en bebés recién nacidos de cuarenta semanas —dijo ella—. Pero su bebé nació un poco más de la mitad de los ochos meses. Según esto nació a las 14:49, pesó 3,2 kilos, midió 46 centímetros, su ritmo cardiaco fue de 83 latidos por minuto y su respuesta a los estímulos parecen normales. ¿Está bien?

—¡Confundiste la hora y el tamaño! —dijo Yunho, riendo.

—Soy un terrible padre —dijo Seonghwa, haciendo una mueca mientras me miraba.

—No se preocupe, es normal que pase, sobre todo si el padre estuvo durante el parto —dijo la enfermera—. ¿Cómo ha estado? ¿Le duele algo?

—Estoy bien, muchas gracias. Solo que es un poco incomodo el parche —le dije, frunciendo los labios.

—Muy bien, en unas horas podrá tener su primer bebestible —acomodó mi almohada y ajustó la frecuencia de goteo de la sonda—. Recuerde que no puede comer ni beber nada después de 8 a 12 horas de la cesaría.

midnight mess | seongjoongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora