midnight mess | seongjoong

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Seonghwa.

Mi celular comenzó a sonar en medio de la clase. Por suerte tenia el volumen bajo, aún así, Yunho y Mingi, quienes estaban a mi lado, se dieron cuenta. Ni siquiera me fijé en ver quién era y rechacé la llamada, pero segundos después, volvió a sonar. Así que vi la pantalla y el nombre de mi mejor amigo allí aparecía, por lo que salí de la clase para responder.

—¿Hola? Hongjoong, estoy ocupado y...

—Seonghwa, soy la madre de Hongjoong —me interrumpió y yo fruncí el ceño.

—¿Pasa algo?

—Estamos en el hospital —dijo y mi corazón comenzó a latir más rápido, temí lo peor—. Daehyun ya va a nacer.

Me quedé callado por unos segundos, el día había llegado y mis manos comenzaron a temblar. Estaba nervioso, pero también asustado.

—Iré. Iré ahora —y corté la llamada.

Apresuradamente, volví a entrar por mis cosas y los chicos me miraron sin entender nada.

—Daehyun va a nacer —dije y ellos comenzaron a guardar sus cosas también.

Cuando llegamos a la parada y nos subimos al bus, iba a tan nervioso que ni siquiera se me había ocurrido avisarle a los demás. Por lo que Yunho se dio cuenta y lo envió, él me miró y me tocó el hombro, exhalé mientras apretaba mis manos sobre mis pantalones.

Nuestra universidad estaba a 20 minutos del hospital, por lo que llegamos rápido. El área de maternidad estaba bastante concurrida, por embarazadas y embarazados dando un paseo por el recinto, mientras sus parejas lo apoyaban, otros esperaban su turno en la consulta mientras que yo corría junto a mis amigos para llegar al área del pabellón.

—Hola —dije, tratando de regular mi respiración. Los padres de Hongjoong me miraron y se acercaron a mi—. ¿Qué pasó? ¿Por qué tan pronto?

—Tuvo dolores en la mañana —dijo su padre—, que se intensificaron y lo trajimos, tal parece que mi nieto solo quería llegar antes de la fecha programada.

—¿Y cómo está Hongjoong? ¿Él está bien?

—Sí, lo revisaron —dijo su madre de inmediato—. Él está bien.

—Oh, qué bien —dijo Yunho—. Seonghwa no nos dijo mucho, estábamos en clase cuando llamaron.

—Mi hijo estará feliz de verlos cuando despierte.

—¡¿Está dormido?! —escuché una voz detrás de mí, era Wooyoung junto a Yeosang y Jongho—. ¿Por qué? ¿Qué le pasó? ¿Qué le hicieron? Los chicos aquí son abogados, ¡que demanden este hospital por negligencia!

—Cálmate chico, no pasó nada —dijo el padre de mi amigo—. Lo anestesiaron un poco por los dolores, no está completamente dormido.

—Ah, qué bien —sonrió Wooyoung.

—¿Cómo llegaron tan rápido? —preguntó Mingi.

—Es que los días martes a esta hora tenemos libre, y Jongho también, por lo que la pasamos juntos —le respondió Yeosang.

En eso, vimos como Hongjoong pasó en la camilla, arrugaba su frente y tenía los ojos abiertos, pero de vez en cuando los cerraba por la luz. Los chicos no se acercaron a él porque no lo querían abrumar.

—¿Quién es el padre? —preguntó una enfermera.

—Yo —respondí de inmediato.

Todo pasó muy rápido. Me dijo que podía ver el nacimiento de mi hijo, estar allí para apoyar a Hongjoong, y acepté, claro que acepté. Me dieron una bata larga de un azul transparente, una mascarilla, guantes y un gorro de plástico para cubrir mi cabeza. Cuando me los puse, con ayuda de un enfermero, me acerqué a Hongjoong, me dieron una silla y me senté al nivel de su cara para poder verlo.