25

1.8K 277 118
                                    

Hongjoong.

Yo sabia que eso pasaba. No me cabía la menor duda. Seonghwa era una persona adulta con una vida sexualmente activa. ¿Y como no? Si tenia una novia. Y yo solo era un tonto que quería pretender que nada de eso pasaba, pero era todo diferente a mis fantasías.

Y mi tiempo se había convertido en ver series, películas, leer, dibujar y comer cada cosa que se me ocurría, que en realidad Daehyun me pedía. También dormía mucho y en ocasiones tenia nauseas, lo cual no me era muy extraño, este proceso era estar constantemente enfermo, de alguna forma. Si embargo, no me molestaba, quería mucho a mi bebé y lo podía soportar, quedaba poco para conocerlo finalmente, poder cuidar de él y tener la certeza, realmente, que soy papá.

Sabía que se venían muchas cosas, y trataba de todo tomármelo con calma, pero se me hacía imposible cuando mis hormonas de embarazado se mezclaban con mis sentimientos hacia Seonghwa, era como una bomba.

Él no se daba cuenta, él no sabia nada y para mi era perfecto que fuera así. ¿Qué pasaría si se llegara a enterar? No sabría como yo podría reaccionar si llegara el momento que en que me rechazara, que me dijera que solo soy su mejor amigo y el padre de su hijo.

Y constantemente era así, y lo peor es que yo no les podía decir nada. No les podía decir que dejaran de abrazarse, tocarse o besarse. Que dejaran de ser cariñosos entre ellos. Decirle a Seonghwa que dejara de mirarla con aquellos ojos de enamorado que siempre le daba, porque me lastimaba, me dolía en cada parte de mi cuerpo.

¿Por qué él no se fijaba en mí?

Quería ser egoísta. Quería todas sus miradas, sus palabras bonitas, sus besos. Quería que todo fuera para mí. Realmente quería ser egoísta.

Pero no podía.

Aquel día, era sábado, tenían más ligero el panorama académico. No había visto a ninguno de los chicos por una semana, ya que estaban recargados de cosas, pero a poco se fueron librando de ellas. Por ello, Wooyoung había dicho que tenia que pasar más tiempo con ellos, porque así Daehyun los podía reconocer después, las voces o algo así dijo.

Pero no le discutí nada porque los quería ver, y tomarlo como una excusa para poder ver a Seonghwa también.

Era una bendición y una tortura verlo.

—Creo que ya debes de tener 34 semanas —me dijo Seonghwa, mientras los demás discutían de cuanto tiempo debía de llevar el biscocho en el horno.

—¿Llevas la cuenta? —lo miré a los ojos, pero él no me notó.

—Claro. Es algo importante.

Sonreí como un bobo, pero tampoco lo notó.

—¡Ya no quedan cervezas, Mingi! —gritó Wooyoung.

—Ya basta de alcohol —les dijo Seonghwa—. ¿No se supone que íbamos a estudiar?

—Ay, Seonghwa, por favor. Es sábado —les respondió Wooyoung, mirando el horno.

—¿Y?

—El estudio es para lo días de semana.

Los dejé que discutieran sus cosas, porque realmente no me importaba mucho, ya que yo no estaba estudiando. Y eso era otro aspecto que me preocupaba, me atrasaría un año. Y, a decir verdad, me sentía mucho mejor desde entonces, digo, estudiar odontología no era lo que realmente había querido.

Yo tenia en mente otras cosas.

—¿Dónde está el azúcar? —preguntó Yunho mirando por todos los cajones.

midnight mess | seongjoongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora