Cap. 10

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      Un ruido fuerte hace que la pelirroja se levanté de golpe de su habitación; al momento gruñe por el dolor de cabeza le llegó al levantarse de esa manera; solo mira su habitación en completo desastre tiene que limpiar hoy o sino tendrá un montón de basura debajo de sus pies, pero el sonido vuelve a oírse, por lo que se pone de pie bostezando a la vez, vio por reflejo de la cortina de su ventana que era de día,abrió la puerta quitando el seguro y se aproximó al ruido, era extraño recibir visitas, sabiendo que su Padre estaba en su cuarto seguramente dormido de tanto licor, que bebió anoche o eso pudo ver antes de irse a dormir siendo las tres de la mañana, Izan no quería dejarla ir, pero le tuvo que decir que no podía dejar a su Padre solo y no tuvo más remedio, que brindarle el apoyo de mandar a uno de sus guardias a traerla de regreso, a dos cuadras más atrás de dónde vivía realmente, haciéndoles creer que vive en otro apartamento.


Era vital hacerlo, para no levantar sospechas de su paradero, era importante no dar su dirección exacta, porque dentro de un mes dará el golpe junto con Hugo. Sin embargo; cuando fue a la puerta y la abrió revelando una cara, que jamás imagino ver nuevamente en su vida, su cuerpo entero entro en tensión como su rostro;se molestó de tenerlo ahí en su puerta, usando ropa casual de pantalón jeans oscuros, guarda camisa blanca con su chaqueta de cuero algo desgastada, pero que siempre ha sido su favorita.


Mientras que ella vestía un conjunto de shorts, con camisa de dormir en color negro, lo único que podía apreciar de su cuerpo; eran sus piernas largas y senos que son naturales; sin nada de cirugía una de las tantas cosas que amaba de su cuerpo. Por lo que; la sonrisa de suficiencia que tenía la hizo molestar más, miro detrás del hombro Vega, cerciorándose que su Padre no viniera, no quería problemas tenía suficientes con los de él para añadir más, decidió hablar al fijar nuevamente su vista al intruso que vino a invadir su Paz.



— ¿Que haces aquí? — exigió saber, pero el hombre solo colocó sus manos en los bolsillos de sus jeans, burlándose de su molestia.


La aludida frunció el ceño más, pero se mantuvo dura ante su enemigo.



— Oh querida "pecosa"; así es como tratas a los grandes amigos. — hablo con sorna, dejando que ella bufé por su idiotez.



— Sabes de antemano, que no somos grandes amigos George; así que ve al grano y dime ¿Que haces aquí? — volvió a preguntar, mientras el hombre se aproximó a ella con rapidez, haciendo que de pasos hacia atrás.



— ¡Vete George! No te quiero en mi casa; además vuelve a tu mundo ese que siempre, te ha gustado estar. — hizo una mueca de solo recordar a los antros que iba, descubriendo como trafica drogas y hace que los adictos se peleen por ella.



Siguió avanzando, hasta lograr entrar y sentarse en el mueble que conoce de hace tiempo, por casi tres años la conoció.; fue novio de ella por un año; hasta que se aburrió y la dejó para seguir estando con más mujeres, solo que su mente le está fallando; después de separarse de Vega no deja de imaginarla desnuda o rendida ante él, como en los viejos tiempos, su sonrisa se ensancho; dónde ella lo notó apretando sus manos a sus costados, deseando que se vaya lo antes posible.

Magnate X Magnate 💼Donde viven las historias. Descúbrelo ahora