PECADOS

A SANGRE Y FUEGO...

El sol ya estaba próximo a salir... la noche había transcurrido relativamente tranquila, casi monótona. Peter lo agradecía porque aún estaba inseguro de su capacidad de ahogar esos impulsos de dar rienda suelta a su fuerza arrolladora.

Hacía sólo un par de semanas atrás volvió a patrullar, pero le resultaba agotador reprimir esas ancias por propinarles un buen escarmiento a aquellos que quebrantaban la ley y la paz disfrutándolo descaradamente...

Se columpiaba a un ritmo estrepitoso perdido en sus pensamientos... es que parecía que no había ni un milímetro de la ciudad que no le trajera recuerdos...

Su vida se había detenido y aunque quería convencerse que poco a poco la estaba recuperando... algún vestigio del pasado lo asaltaba para derrumbarlo, era frustrante.

Todo había sido un desafío brutal desde el momento en que decidió decir la verdad hacía ya casi un año... volver a tener apetito... volver a ver a sus amigos que aunque estaban exigidos por sus respectivas carreras habían acudido a verlo cuando May los llamó...

Hasta volver a su cafetería preferida, no reparó en ello hasta encontrarse en el umbral y al ver al interior le pareció ver a James en una mesa al fondo...

Peter comprendió que conocería la verdadera soledad en el momento en el inexorablemente aceptó que Tony no volvería y James... ni siquiera sabía que pensar de él.

Pero de pronto, sus sentidos lo alertaron encendiendo sus alarmas e indicándole una dirección a la que se dirigió por reflejo.

Una presencia completamente inesperada lo aguardaba en lo alto de un edificio... muy pronto diviso incrédulo una armadura escarlata que relucia a la luz blanca de las estrellas.

Aterrizó allí movido por puro instinto pero sin deponer una postura defensiva... tranquilamente la imponente figura se acercó a paso firme mientras en un imperceptible movimiento despejaba su rostro de la máscara.

Entonces... al ser escaneado por esa mirada vehemente de nuevo, un yunque volvió a oprimirle el pecho impidiendo que ni un ápice de oxígeno ingresara a sus pulmones...

El pánico regreso feroz y en todo su esplendor...

Se mantuvo inmóvil debatiéndose entre la desesperación por aferrarse a ese hombre y la impia certeza de saberse rechazado.

Tony adivino que no se moveria, asique cuando estuvieron frente a frente comenzó a hablar, no iba a extender ese encuentro más que lo meramente necesario.

- Quiero que hablemos Peter. - dijo en un tono que evidenciaba fastidio... Siempre mirándolo a través de una desaprobación brutal que no trató de esconder, casi sin pestañar... el arácnido detestaba que hiciera eso.

- T...T...Tony... - balbuceó obligándose a erguirse ante el genio que seguía provocando en su cuerpo tanta necesidad... tanto hambre por volver a sus brazos...

- He dejado muy en claro en SHIELD que ya no soy tu mentor, los convencí de que estás preparado para desenvolverte en las misiones que te quieran asignar, eso en caso que continues deseando ser un vengador.

Peter lo escuchaba sin poder mover los labios para más que un ligero temblor y con lágrimas en los ojos, eso era algo que exasperaba al mayor que debía refrenar el impulso de descargar en el chico el deseo abrumador de castigarlo.