DEJAME SER TU SECRETO...

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Habían llegado a un acuerdo...Peter se tomaría un año antes de comenzar el MIT, realmente necesitaba poner en orden algunas cosas y entre ellas por supuesto estaba su pareja que se encontraba al borde del abismo.
May lo apoyó porque en serio creía que a Peter le hacía mucha falta detenerse del ritmo frenético que venía viviendo...y más tratándose de Stark. En secreto temía que volviera a caer en la depresión que lo había empujado a herirse asique trataba de acompañarlo sin invadir el tiempo que a veces pasaba casi sin salir de su habitación.

Pero Peter se había propuesto firmemente volver a tener una relación que hiciera feliz a Tony, a los dos... cuando lo escuchó hablar de terminar recordó muy vívidamente lo amargo que fue estar a su lado y soñar con uno sólo de sus besos... fue consciente de cuánto lo aterraba quedar sin su amparo.

Lo necesitaba, lo quería...cada minuto lejos era un error. Todas las ansias por un abrazo suyo, por su atención recobraron fuerzas. Sabía que Tony lo amaba, lo sintió especialmente cuando lo acunó esa noche en su pecho, cuando se besaron y ambos se negaron a ceder al fracaso...pero también estaba seguro de que lo dejaría si se convencía de era lo mejor.

En cuanto a James, el pequeño móvil que le regaló había quedado olvidado en un cajón del atiborrado escritorio en su cuarto...con todo lo que había ocurrido con Tony esos días no lo había vuelto a revisar... después de todo seguramente estaría ocupado con la boda de la cual estaba al pendiente todo el mundo ligado a los Vengadores. Tenía que terminar aquello, todos sus sentidos le decían fuerte y claro que no acabaría bien.
Esa noche se acostó fastidiado porque Tony no le había llamado desde Moscú, a dónde viajó en una misión de la que apenas le habló y a la que no le permitió acompañarlo... sólo sabía que se trataba de recuperar tecnología de bases abandonadas de Hydra.

Se esforzó por dormir pero aunque estaba exhausto después de un largo día realmente le era difícil, tomó un par de calmantes y cuando al fin había conciliado el sueño, de las sombras emergió una figura imponente que lo admiró un momento antes de abalanzarse y hacerlo presa de unos brazos que lo aferraron sin darle tiempo a nada.

Sus alarmas no fueron lo suficiente rápidas debido al sedante y Bucky calló el gemido de sorpresa del arácnido entre sus labios sin ocultarle cuánto lo estaba deseando.
- James qué haces aquí? - le preguntó entre sus besos sin poder evitar una tonta sonrisa.
- No me respondes los mensajes... quería saber cómo estabas.
- James...no puedo...- dijo cerrando muy fuerte los ojos y las manos que ya estaban acariciándole sus firmes nalgas se detuvieron casi al instante.
El soldado lo miró extrañado... algo en el tono de su voz le decía que no sería como otras veces y en ese instante se preguntó como renunciaría a esa piel que adoraba recorrer.
- Qué pasa? - le preguntó temiendo lo que él diría.
- T Tengo que hablar contigo... - tartamudeo mientras Bucky le mordía suavemente la mandíbula esperando equivocarse.
- Dime.
- James...no puedo seguir con esto.- las lágrimas de Peter le quitaron el aliento al mayor...lo abrazó y esperó a que se calmara.
- Tranquilo ... pasó algo?
- Tony... terminará descubriéndonos...
- Por qué dices eso?
- Las cosas entre nosotros no están nada bien...- hubiera dicho "lo siento", pero sería muy hipócrita. James temblaba de celos al pensar que su dulce Peter era de otro.

Se mantuvo en silencio y le secó con mucho cuidado las lágrimas al adolescente.
- Stark no es tonto... y Steve tampoco. Tal vez tengas razón, pero si tengo que alejarme de ti déjame tenerte una vez más.
Cómo podría negarse teniéndolo tan cerca? respirando de su aliento y el peso de su cuerpo soberbio encima... sólo levantó las sábanas y con un imposible veloz movimiento selló la cerradura con su tela para que la puerta del cuarto se mantuviera cerrada.

James rió y volvió a adueñarse de la boca de Peter mientras sus manos buscaban casi desesperadamente la mejor manera de desnudarlo con la torpeza de su hambre...
Y él se negaba a pensar...a cualquier otra cosa que no fuera facilitarle a James el acceso a su cuerpo.
Cómo pudo, Bucky también se desprendió de sus ropas oscuras y se tomó un minuto para abrazarlo ebrio de la gloria que era sentir sus cuerpos ardiendo así...
Bucky era capaz de morir por sentir las fuertes y suaves piernas de ese chico que se cerraban en torno a su cintura apegándolos aún más...pero de alguna manera se sentía diferente... era como si no pudiera dejar de besarle mirándolo a los ojos que eran tan brillantes y oscuros que jamás podría olvidarlos.
Peter se prendió al cuello de James respondiendo como podía a las ansias con las que el mayor demandaba sus besos... ya podía sentir su enorme y rígido miembro buscar invadirlo...

PECADOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora