Minho había tomado una decisión gracias a mucho pensar y los consejos de su primo. Después de comer, había llamado a Jisung, pidiéndole dar un paseo ambos solos, y para su suerte, no se había negado.El paseo comenzó en un silencio cómodo, y hablaban de algunas cosas no muy concretas, pero era un poco extraño.
Finalmente, Minho se detuvo, dejando de caminar. Jisung le imito.
- ¿Pasa algo?- pregunto curioso.
- La verdad es que me pasan muchas cosas y todas tienen que ver contigo.- murmuró, girándose a ver al castaño.
Jisung se encogió en su lugar, pensando que iba a ser regañado por Minho al no llevar cuidado al volver a casa por un barrio peligroso, pero vaya que se llevó una sorpresa cuando Minho tomo ambos lados de su rostro y lo miró de forma penetrante a los ojos.
- Jisung, yo..- dudo, nervioso.- Sé que no tenemos la mejor relación después de todo lo que te hice, pero gracias a mis errores pude darme cuánta de lo que de verdad siento por ti.- admitió.- Puede que no me correspondas y eso está bien, soy un idiota.
- Un gilipollas.- lo corrigió Jisung, con su ceño fruncido y un mohín.
- Un gilipollas.- asintió Minho.- Pero este gilipollas, está bastante enamorado de ti. Y me ha costado mucho tiempo darme cuenta por culpa del miedo.- explico Minho.- Tenía miedo de qué...la sociedad rechace mis gustos y también tenía miedo por si nuestra relación se arruinaba por culpa de mis sentimientos. Lo siento de veras.- terminó.
Jisung lo miró durante unos instantes, tratando de pensar. Pero finalmente, le dio una fuerte bofetada al peli negro, haciendo que este abriera su boca con asombro. Minho se giró a ver a Jisung con cara de indignación.
Jisung tenía una expresión satisfactoria, mientras negaba con la cabeza. - Sé que has sido un idiota, lo sigues siendo, pero no has sido el único que ha cometido errores y yo... también quería disculparme.- respondió.- Y aún me sorprende que no supieras lo colado que estaba por ti.
- Está bien, el pasado está perdonado.- Minho soltó una risa leve, negando.- Pero deberías medir tu fuerza, eso ha dolido.
- A la próxima, te daré más fuerte.- amenazó.- Estuve mucho tiempo aguantándome, sienta bien.- sonrió.
Minho negó, separándose unos cuantos pasos, pero le pilló desprevenido el que Jisung se acercara, los pasos que él había retrocedido, quedando a escasos centímetros de su rostro, más sin hacer nada.
- Sé que te has estado aguantando tus sentimientos por el mero echo de que la sociedad te vea como gay...- empezó a hablar Jisung.- Podré lidiar con tus miedo un tiempo, pero también debes poner de tu parte, porque estoy dispuesto a poner normas.- amenazó.
Minho elevó una ceja.- ¿Qué normas?- pregunto.
- La primera, no me ignores. Eso incluye llamadas o mensajes. La segunda, quiero que me des atención y mimos cuando te los pidas.- empezó a enumerar.- Y la tercera y última, por el momento, no evites mis muestras de afecto en público.- terminó.- ¿Queda claro?
Minho asintió un poco, y Jisung sonrió.- Mentiría si dijera que no me esperaba algo así..
- Muy bien, ahora cállate.- interrumpió, y seguido de eso junto sus labios con los de Minho, quien no supo reaccionar a primer instante, pero después le correspondió tímido.
El menor poso sus manos en las mejillas de Minho y este puso sus manos de forma superficial en la cintura de Jisung. Minho tenía miedo de ser irrespetuoso, pero eso podría arreglarlo más adelante.
Cuando se separaron, Minho se relamió los labios con nervios mientras Jisung dejaba salir una carcajada.
- ¿Esto significa que estamos saliendo?- se atrevió a preguntar el mayor.
Jisung lo miró con ternura.- ¿Quieres salir conmigo?- pregunto con un poco de sorpresa.- Está bien, pero diremos que me lo pediste tú.
Minho rio un poco, negando. Después atrajo a Jisung a su cuerpo y ambos se abrazaron.
/////
El grupo se hizo el sorprendido cuando Jisung y Minho confirmaron su relación. Y después de estar un rato más en el parque Yeouido, decidieron recoger sus cosas y poner rumbo a sus casas.
Se había levantado un viento repentino y el cielo se había oscurecido, por lo que la mejor opción era volver ya.
Felix disfrutó de su día, Hyunjin había estado casi todo el tiempo con él por culpa de Minho, pero no fue tan malo como pensó.
Cuando bajaron de la furgoneta de Chan, quien había ido hasta su casa, todos se dirigieron hacia sus casas. O eso era lo que había pensado Felix.
- Lix.- lo llamó su primo, después de que se sostuviera con las muletas.- Iré con Jisung un rato, no me esperes despierto.
Y antes de que Felix pudiera siquiera procesar la información, Minho salió corriendo de la mano del que ahora era su novio. Felix maldijo sus propios consejos, Minho lo había dejado a su suerte.
- ¡Lee Minho, cabrón!- gritó con enojo, pero ya no se podían ver las siluetas de la pareja.
Hyunjin se posicionó a su lado.- Tienes un gran familiar.- comentó.
Felix bufo.- Lo sé.- murmuró.- ¿En qué dirección queda mi casa?- se preguntó a sí mismo.
Hyunjin estaba por responder, pero una gota de lluvia le cayó en la mejilla, seguida de otra y otra más, y cuando se quiso dar cuanta, estaba lloviendo a cántaros.
- Mierda.- posiciono sus manos en su frente para que el agua no cayera en sus ojos.- Ven, vamos al bar.
Hyunjin agradeció que vivía frente a la casa de Chan, por lo que se adentró en el bar de su padre cruzando la calle. Cerró la puerta después de que entrara el rubio.
Por suerte no se habían mojado apenas, pero con la que estaba cayendo, sería difícil que Felix volviera a casa en su estado, y solo. Por lo que Hyunjin insistió en que se quedara allí.
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Rainfall // Hyunlix
FanfictionFelix es un bailarín de ballet que sueña con irse a Suiza, pero su sueño se hace añicos cuando sufre una lesión en el tobillo y le dicen que no podrá volver a tenerse en pie. Su primo Minho, con el que se queda mientras se recupera, lo obliga y conv...