42: Nuevo Comienzo.

286 27 6
                                    

Muy buenos días, hoy empiezan las prácticas y literalmente tengo al señor Damiano siendo arrastrado por mi de camino al hospital. ¿Qué por qué lo arrastro? Uno, porque está dormido, y dos, porque es el último capítulo.

La puerta del metro se cierra en nuestra cara y veo como despacio comienza a avanzar el tren. En cuanto sale de la estación y tras mi gritito me vuelvo al italiano. Quien una vez más vuelve a bostezar. Que mal lleva este chico lo de madrugar.
Eso y que anoche terminamos de ver la serie de seis temporadas que estábamos viendo. Y creo que en esta semana de vacaciones es lo más productivo que hemos hecho.
Eso y que Damiano me tuvo en desconexión total de mi móvil. No me quería ver triste en mis vacaciones y bueno, lo ha conseguido.

Pero ahora estoy enfadada. Es lunes, no me he dado mi sesión diaria de cafeína y he perdido el metro por culpa de un italiano.

- ¿Nos sentamos? - pregunta mientras intenta deshacerse de mi agarre.

No respondo.

- Gabbi, deja de estar enfadada conmigo ¿no?

Sigo sin responder.

- Vamos bien de tiempo, además, no me he quedado dormido. Estaba asimilando el día en modo lento - bufa y de nuevo intenta deshacerse de mi agarre.

- Tienes suerte de que el hospital estaba en dirección tú piso y que habíamos quedado en tu parada.  Y que yo iba con más de una hora de adelanto y que... - velozmente me baja la mascarilla y me corta dándome un beso. El cual me pilla de improvisto y por el cual me he quedado en silencio.

- En dos minutos hay otro - sube mi mascarilla y después hace lo mismo con la suya. - Y vamos a llegar con más de media hora de adelanto. ¿Qué vamos a hacer con tanto tiempo?

- Presentarnos. ¿Tú no sabes que por educación el primer día hay que llegar antes? - digo cruzándome de brazos y Damiano baja los ojos a la sudadera que llevo. Es suya, pero es que pegaba con el outfit.

- ¿Piensas algún día dejar de robarme ropa? Anoche estuve buscándola por todos lados, es mi favorita - imita mi gesto y me desafía con la mirada.

- Pues cuando vivamos juntos va a ser peor - le miro burlona. Deja caer los brazos y se pega mucho a mi, de hecho no corre el aire. Va a decir alguna cochinada.

- Cuando vivamos juntos vas a tener prohibido llevar ropa.

Mamá, ¿te gustan los italianos? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora