15: explicaciones o jugar.

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Damiano David o para muchas el sexy italiano:

Cuelgo la llamada y sinceramente me alegro de haber hablado con ella.
Pero me alegro por haber aclarado ciertos puntos. No quiero que una relación de tantos años termine con cada uno cogiendo su camino y odiándonos. Gio ha sido alguien muy importante y aunque sé que durante un tiempo cada uno se alejará, me gustaría no perderla de mi vida para siempre.

Me explico: ella era mi mejor amiga aparte de mi novia. Y, entendía cosas que mis amigos eran incapaces de entender o que ellos veían con otro punto que quizás no era el indicado. Además de que fue mi confidente durante años y bueno, si, mi primera novia seria.

Suspiro tras guardar el móvil en el bolsillo del pantalón y camino hacia el aula. La siguiente clase va a empezar en breves y no es plan de perderme esa también.
Al entrar veo a Gabbi y Helena hablando prácticamente en susurros para que nadie les escuche, pero bueno, soy bastante cotilla.

Me acerco y sé que solo lo ha notado Helena.
Me siento tentado en agarrarla por la cintura y besar su cabeza, pero se que si hago eso delante de todos Gabbi va a matarme aparte de morirse de vergüenza.
Además, también se que ha visto quien me ha hablado y quien me ha llamado, y obviamente sé que le debo una explicación.

Mis manos la agarran y le pegan a mi. "Quizás y si que lo he hecho". Gabbi se asusta robándome una risa que escapa de mis labios, y como los ojos de todos mis compañeros nos miran muy atentos termino por separarme.

Ella intenta ignorarme y lo sé porque prácticamente está mirando hacia la pared con cara de estar oliendo mierda.
Helena en cambio nos regala una mirada extraña, no sabría decir si es buena o mala.

- ¿Todo bien? - pregunto al notar el silencio que se ha formado y que ambas se miran, bueno, cuando Gabbi decide dejar de estudiar lo que sea que es tan interesante de la pared.

- Italiano de mierda - gruñe y se vuelve para aparte de huir, irse a su sitio.

¿Sinceramente? Aparte de gracioso se le ve tierna cuando está molesta. No os voy a mentir aunque quizás me estéis odiando un poco.

Bueno, igual y me estáis odiando muchísimo.

La detengo antes de que logre huir y me acerco a su oreja mientras que con mi mano acaricio sus hombros. Quiero relajarla aunque creo que estoy poniéndola más nerviosa.

- Antes de montar un drama por celos espera al menos a que te tenga informada, quizás así montes el drama pero con fundamentos - me burlo y como es de esperar golpea mi abdomen para separarme de ella, pero pese a que el golpe me ha dolido, me mantengo firme.

Gabbi:

"¿Pero de que va el italiano de mierda? Y lo peor es que está guapísimo"

- Pues sinceramente no voy de nada - se está riendo de mi y lo sé por ese brillo que tiene en los ojos, obviamente ignorando el tono de voz que está usando. - Y gracias, me he puesto guapo para ti.

- Que te vayas a la mierda - le golpeo una vez más y como la otra vez, finge que no le duele.

- Te debo un par de explicaciones pero tú no deberías de ser tan cotilla - sus dedos acarician inconscientemente mi nuca, y sinceramente me está relajando demasiado. Igual y lo está haciendo conscientemente.

- No me tienes que dar explicaciones - lo digo totalmente enserio, no es mi pareja, así que no tiene que hacer eso si no le da la ganada.

- No, pero quiero hacerlo - susurra solo para que yo le escuche.

- Pues no tienes por qué, además, quizás yo no quiera escucharlo - se que estoy actuando de la forma más inmadura posible, pero es que me ha molestado mucho.

Mamá, ¿te gustan los italianos? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora