Capítulo 12

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A paso apresurado recorrí las calles un poco transitadas, el cielo se estaba tornando más anaranjado y sabía que pronto iba a llegar la noche, pero era lo que menos me importaba ahora. Necesitaba decirle a Manjiro que por fin pude librarme de Yamato.

Luego de casi correr, llegue a la zona del parque, pero como este lugar es muy amplio y aun debia caminar un poco más, ademas la entrada principal estaba casi del otro lado por donde llegye, asi que esta vez era más fácil tomar el camino de los árboles de cerezo, ya que este tenía una entrada al final, una que casi nadie usa. Llegaría más rápido si iba por ahí, asi que entre con el mismo paso que mantenía y recorrí el camino en línea recta, por lo que, de inmediato llegue y pude visualizar a alguien de pie justo aún lado de la banca en la que suelo pasar mi tiempo. Era Mikey.

No pude evitar embozar una sonrisa de inmediato.

Como iba apresurada él se dio cuenta al escuchar mis pasos, además éramos los únicos aquí. Volteó de inmediato en cuanto se dio cuenta de mi presencia, estaba demasiado contenta, asi que sin pensarlo, una vez estuve lo suficientemente cerca, lo abracé.

- ¿Sayuri?- expresó sorprendido, cuando alcé mi rostro noté que si lo estaba- pensé que te había pasado algo, ¿Estás bien?- aún que había tardado colocó una de sus manos en mi espalda.

- si- sonreí- es solo que quería verte y decirte algo importante, no podia esperar..- me separé y lo solté, aún que no tome mucha distancia entre nosotros- pude librarme de Yamato y las peleas, tenías razón, pude dejar de una vez eso que me mantenía estancada, admito que me dio miedo pero cuando lo hice me sentí realmente bien.

- ¿Enserio?- preguntó él, yo asentí con la cabeza- me alegra mucho saberlo. Te dije que eras una chica fuerte- colocó su mano en mi cabeza alborotando unos cuantos mechones de mis cabellos.

Senti como mis mejillas se ruborizaron un poco.

- gracias Mikey- hable ya un poco más calmada- me alegra haberte conocido aquí mismo- lo mire fijamente, ambos hicimos contacto visual.

- también me alegra mucho haberte conocido aquí.. y bueno, olvidemos que la razón de nuestro encuentro que fue porque tú querías darme una paliza- río un poco por el comentario.

- es cierto, tu ese día también me golpeaste en el abdomen- detuvo su risa de inmediato al escuchar aquello- me golpeaste muy fuerte, tanto que me dolía al dormir y así me mantuve por unos dias- me crucé de brazos y lo mire con una sonrisa mientras alzaba una ceja.

- es porque no sabía que eras una chica- hizo un puchero mientras llevaba su mano hasta su nuca y la rascaba- de haberlo sabido no te habría golpeado así.

Esta vez yo reí, el se veía tierno haciendo ese tipo de gestos.

Es verdad que Mikey fue muy fundamental para que diera este paso importante, aúnque también Kazumi, Kai y Reiko lo habían sido ya que no me dejaron sola en ningún momento y aún que fui muy terca, al final pude entender y apreciarlo.

De pronto, las luces del parque comenzaron a ser encendidas, señal de que estaba a nada de oscurecer. Tenía que volver a casa y Mikey se había ofrecido a llevarme, al menos así estaría a tiempo o eso creía.

En el camino ambos guardamos silencio, un silencio nada incómodo pues ya habíamos hablado lo suficiente antes. Pero ese silencio me hizo recordar el otro tema importante que había olvidado por completo. Aún quedaba la mudanza.

- oye Mikey- hablé de repente llamando su atención pero sin que ninguno de los dos dejara de avanzar hacia la salida donde debía estar su motocicleta- hay algo que aún debo arreglar.

- ¿Qué es?- sentí su mirada de reojo, yo baje la mía.

- si hay algo que no deseo hacer pero la persona que quiere que lo haga es alguien a quien no quiero decepcionar, ¿Como debo actuar?, Me da miedo decir lo que siento y decepcionar lo más, se que no debe hacerlo con mala intención y todo lo hace es porque me quiere pero..

Aquel día de primavera ~Manjiro X OcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora