Escondida entre las Sombras.

Capítulo 8: Esto es Halloween.

Narra Norte:

Salimos de noche con Jack en mi trineo, la verdad que no sabía por donde empezar a buscar, había tantos espíritus y no todos eran muy amigables, además hacía mucho tiempo que no hablaba con algunos de ellos...esto de ser Guardián ocupaba mucho tiempo.

Jack- ¿A donde vamos?

Norte: Supongo que no nos queda otra que empezar por los más conocidos ¿Alguna vez viste brujas?

Jack- ¿Existen?

Me reí, saque una bola de nieve de mi bolsillo y susurre:

- A la cueva- lance la bola y se abrió un portal, antes de entrar con el trineo vi como me miraba Jack extrañado a lo que contesté riéndome.

A los segundos nos encontrábamos sobrevolando un lúgubre bosque, Jack me miro desorientado.

Jack- ¿Donde estamos?

Norte- Bienvenido al hogar de la Brujas de Halloween, Jack. Creadas para recordar a los humanos que todos tenemos una máscara y debajo de ellas podemos ser o no monstruos, algo así como que todos somos niños por dentro, además de para gastar bromas y dar una excusa para comer cosas dulces hasta reventar.

Jack- Pensaba que las brujas eran malas.

Norte- Una vez lo fueron, hasta que la luna las convirtió en espíritus, pero no dejan de ser... -No termine de hablar cuando una bomba de humo nubló mi visión- ...realmente pesadas con sus bromas.

Se escuchó en el cielo un conjunto de risas malvadas.

De golpe una bruja apareció frente del humo y nos miro a Jack y a mí. Tenía el cabello corto y anaranjado, sus vestimentas eran negras y volaba sin escoba ni sombrero.

XXX- ¿No saben que para pasar por aca se paga peaje? -pregunto riéndose- Más si se trata de un trineo.

Jack- ¿Nos odian por algún motivo en particular o solo porque tenemos un trineo?

Norte- No lo se, tal vez solo quieren divertirse un rato. -le dije tratando de aterrizar un trineo en una zona despejada cercana a la cueva-casa de las brujas con un montón de renos desbocados.- ¡Agarrate! -grite para que Jack se sujetara, sino salía volando seguro.

Una vez se detuvo el trineo me gira a verlo, estaba con la piernas dobladas y cabeza abajo.

Norte- Te dije que te sujetaras -mientras lo ayudaba a levantarse.

Jack- Si, la próxima te hago caso. -dijo limpiándose el pecho.

La bruja que nos sorprendió entre el humo descendió hacia nosotros y nos miró con los brazos cruzados. Chasqueó los dedos y otras dos personas aparecieron a su lado, una de ellas vestida de blanco, con los cabellos largos, oscuros y atados en una cola alta y otra más joven, vestida de rosado con los cabellos rubios, brillantes, largos hasta sus pies y recogido en dos coletas. (como en la imagen de la portada).

Norte- La verdad que la ultima vez que vine ustedes no vivían aquí -seguramente as brujas anteriores que yo conocí cedieron su cargo o fueron reemplazadas, a veces las brujas se cansaban de estar al mando y por eso aparecían otra.

XXX- Pues hace como 300 años que estamos en este lugar -dijo la de cabello corto.

Norte- Si, supongo que hace tiempo que no vengo. -no sabía como empezar con esto- ¿Saben quién soy? -pregunte por las dudas.

XXX- Supongo que eres Santa -dije la que estaba vestida de rosado.

Norte- Bueno, sí, me alegro que lo sepan. ¿Saben que son los Guardianes? -Jack me miraba totalmente incrédulo y con los ojos abiertos como platos.