Capítulo 21: La Guadaña

146 22 3
                                    

Narrador Omnipresente:

El espíritu alado atravesó todo el recorrido hasta llegar a lo más profundo de la estructura rocosa y allí se posó en el suelo, rayos de luz accedían por reflejos y grietas iluminando los alrededores de nuestro personaje.

Narra Kuro:

No me importaba mucho si Jack o Sandy seguían intentando seguirme, dudaba bastante que se metieran en la cueva donde estaba yo, además había sido creada laberínticamente para que cualquier ser saliera a cualquier lugar de la montaña sin llegar nunca a lo que sería lo más profundo, que es donde yo estaba yendo.

Narra Jack:

Al traspasar esa entrada pude escuchar levemente a voz de Kuro, estaban en esa habitación oscura con algunos tonos de luz; dejamos a Sandy atrás de todo para que no se hiciera notar y nos fuimos acomodando entre las paredes más cercanas para no dejarnos ver.

Estando adelante con Bunny, Norte y Onoka, la bruja que vestía de blanco, pude ver a Kuro en el centro de una habitación iluminado levemente mientras hablaba con....

-¡No puede ser!-gritó una vos en mi cabeza mientras apretaba con ambas manos mi cayado.

Narra Kuro:

A mis espaldas sentí su presencia y me gire para verlo con un rostro algo confundido y casi decepcionado, como si no quisiera estar en la guarida por no decir lo que se tardó en aparecer.

Kuro- ¿Sucedió algo para que traigas esa cara? –pregunte cruzándome de brazos.

XXX- Te pregunto lo mismo, desde aca percibo que tu espiritualidad está debilitada. –dijo con un poco de sorna.

Mantuvo la mirada fija en la mía, cualquier rastro de emociones en él habían quedado en el olvido.

Kuro- Nada de vital importancia. Como es obvio, necesito descansar un poco además, los Guardianes sospechan más de ti de lo que yo me esperaba. –dije sentándome en el suelo mientras volvía a esconder mis esplendidas alas dentro de la forma de una espalada humana.

Al mirarlo vi que buscaba algo con la mirada alrededor. Después se detuvo en seco. Suspiro y me miro con una sonrisa sarcástica.

Kuro- ¿Sucede algo? –le pregunte sobándome la cabeza, un importante sueño me estaba invadiendo.

XXX- ¿Realmente no sientes nada o trajiste visita a propósito? –me dijo él mirándome fijamente- Pensé que me llamabas con urgencia por algo serio, no para traicionarme.

Eso fue el colmo. Me levanté lo más erguido que pude a pesar del cansancio. Sentí como la ira invadía mi cuerpo. Vi como él se tensaba y me miraba más serio. Estar agotado me ponía de muy mal humor.

Kuro- ¿De qué estás hablando? –dije con una voz muchísimo más gutural de lo que normalmente sería.

XXX- Genial, pierde el control y así me ahorrarás el trabajo de tener que luchar con nadie.

Sentía mis colmillos crecer, sentí mi respiración más alterada, era consciente de que perdía el control pero no podía hacer nada.

Kuro- ¿Luchar con quién? No entiendo de que...

Y sentí mi corazón latiendo con una fuerza brutal pareciendo que me rompía las costillas.

XXX- No me dejas de otra opción. –dijo él.

Cuando lo miré, de la palma de su mano salieron sombras oscuras y sin contextura física que vinieron directo a mi cabeza.

XXX- Tranquilo, esta vez me ocupo yo. –me dijo mientras perdía mi consciencia. Cuando caí al suelo y vi a los Guardianes entendí que él iba a morir, había gastado energía en mí. Con las sombras que había dirigido a mi cabeza me curaría más rápido, exactamente igual que la vez que lo conocí.

Escondida entre las Sombras.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora