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Cuando llegamos a Seúl ya era tarde. Hyungsik me dejó en Cheong Wa Dae antes de irse a su casa. Mi padre no estaba y me dijeron que desde que me fui había pasado las noches en el hospital con mi madre. Intenté irme a dormir porque me sentía cansada pero el sueño no llegaba. Sabía que mi padre me diría que desconectaramos a mi madre. Por eso estuvo todos estos días con ella. Se estaba despidiendo de ella y lo mismo tendría que hacer yo. Cuando por fin pude dormir ya era casi de día y me desperté poco después cuando mi padre entró a la habitación.

—Hola Sun Ji —me saludó.

—Hola papá —le dije.

—¿Te fue bien en tu luna de miel?

—Muy bien. Por eso nos quedamos más tiempo. ¿Cómo te ha ido a ti? Ya son tus últimos dias en la presidencia.

Se sentó en la cama junto a mí y suspiró.

—He estado en el hospital con tu madre —me respondió— la van a desconectar esta noche.

Al escuchar eso los ojos se me llenaron de lágrimas.

—Tengo que ir a despedirme —dije y me quité las cobijas.

—Tienes todo el día para eso —me dijo— será en la tarde.

—¿Estás seguro de que no es mejor esperar más tiempo?

—¿Cuanto más? ¿Hasta que pasen años y sigamos viéndola en esa cama igual todos los días? Es improbable que despierte y yo ya no lo espero.

Se levantó y salió de la habitación. Me levanté yo también y lo primero que pensé fue en Hyungsik así que busqué mi celular para llamarlo. Me habia mandado un mensaje de buenos días.

Hola Sun Ji. Espero que hayas descansado y que estés bien. Que tengas lindo día.

Lo llamé y me respondió bastante rápido.

—Hola Sun Ji —saludó y se escuchaba feliz. Me hizo sonreír.

—Hola Hyungsik —saludé.

—¿Cómo estás?

—No sé qué decirte... mi padre acaba de venir a decirme que esta tarde desconectan a mi madre.

—Lo siento mucho. Si quisieras yo podría acompañarte. Digo, si no te molesta.

De inmediato pensé que no me molestaba para nada eso. Iba a necesitar de los abrazos que daba, eso era seguro.

—Sí —le dije— si no voy a interferir con tu agenda entonces sí.

—No te preocupes —me dijo— puedes contar con mi presencia esta tarde.

—Gracias Hyungsik. De verdad.

—No tienes nada que agradecer. Nos veremos pronto.

Le colgué y fui a bañarme y alistarme para irme. Quería pasar el mayor tiempo posible en el hospital despidiendome de mi madre. Después de desayunar algo me fui para allá. Todavía tenía la esperanza de que hubiera ocurrido un milagro y la encontrara despierta. Pero cuando abrí la puerta de la habitación me di cuenta de que no era así. Seguía igual que la última vez que la habia visto. Me senté al lado de la cama y la tomé de la mano.

—Hola mamá —dije— ya regresé de la luna de miel. Al final nos quedamos más tiempo. Me gustaría poder hablarte de todo esto tan raro que me está pasando. Me preocupa como estoy viendo a Hyungsik. Tú sabes que yo pensaba estar demasiado enamorada de Taehyung. Si las cosas no cambian voy a tener que decirle lo que me está pasando y no creo que lo entienda. No es justo después de todo lo que hemos pasado ir y decirle que me enamoré de alguien más. Pero tampoco sería justo quedarme callada y que siga pensando en que tenemos una relación cuando lo engaño con Hyungsik. Cuando estoy cerca de él solo puedo pensar en que quiero besarlo y no se puede seguir así. Alguien va a salir lastimado y será solo culpa mía.

Primera dama - PHSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora