Una corte de luz y oscuridad

Parte 5

Azriel

No acababa de entender que había pasado. ¿Por qué se había puesto así conmigo? Cada vez estaba más convencido de que ella no quería nada y que había confundido las señales.
Era verla con el pelirrojo y solo me apetecía coger la misión más lejana y duradera que el alto Lord me pudiera dar...
Comimos todos juntos. Toda la mesa estaba enfrascada en una conversación y yo solo me limitaba a escuchar y comer.
Nesta y Cassian debatian quién de los dos era mejor bebiendo, levanté una ceja, iban a acabar mal... Y en el otro lado de la mesa, Elain y Lucien... Ella con una copa de vino y él con otra... Ella bebía sorbitos pequeños y le miraba con ilusión mientras él le contaba una de sus historias con Vassa y Jurian.
Suspiré, acabé y me levanté sin decir nada.
-¿Todo bien hermano? - soltó Cassian sonriente.
-Tengo que ir a un sitio-mentí descaradamente y sin esperar respuesta salí de allí.
Me puse a volar, a intentar despejar las ideas. El sol de mediodía calentaba demasiado a esas alturas del año... Y con la armadura... Estaba cansado... Bajé hacia una área de árboles y me tumbé en una rama. Me quedé frito con la brisa... Hasta que un chillido me despertó de golpe.
-Vamos señorita... Sólo queremos que nos acompañe... - miré hacia el suelo y vi a una chica con capucha que le tapaba el rostro y a la cuál tenían dos criaturas cogida una de cada brazo. Reconocí enseguida a esos seres... Pertenecían a la corte de las pesadillas... Des de que nos ayudaron en la guerra, Rhys había permitido que algunas criaturas vinieran siempre y cuándo se comportaran...lo que me hacía pensar que se cubrían entre ellos... Y que no sería la primera vez que pasaba algo así...
Me disponía a bajar para ayudar cuándo la propia chica le propinó una patada a uno de los seres y al soltarla un puñetazo al otro. Sonreí, vaya carácter. Sin esperarlo desembainó la espada que llevaba escondida, haciendo que la capucha cediera y dejando ver su cabellera rojiza. Reconocí a la chica al momento. Blandía la espada apuntando hacia los dos seres que se apresuraron a rodearla. Ya había tenido suficiente. Aterricé entre la chica y ellos con los sifones azules centelleando y mis sombras asomando peligrosamente. Me daban un aura tenebrosa.
-O... Señor Azriel... - dijo uno de ellos a media voz. Giré dos segundos a mirar a Gwyn, le guiñé un ojo y se puso del color de su pelo.
-¿Alguno de los dos me puede explicar qué queríais hacer con la joven? - tragon duro los dos-o mejor aún... ¿Y si os llevo ante Rhysand y se lo explicáis a él? - vi terror en su mirada.
-Lo sentimos... No avise al alto Lord... - empezó uno de ellos.
-No seas arrastrado... Es un farol, no molestaría al alto Lord por una niñata... - eso me enfureció. Avancé tan rápido que no le dio tiempo a reaccionar. Tenía cogido del cuello a la alimañana que ahora suplicaba cómo podía con mi agarre.
-Por favor...
-Esa niñata es valiosa-los dos la miraron con recelo-para la Corte Noche, para Rhys, Nesta y por supuesto para mi-una vez lo dije me quedé quieto. Ni yo mismo sabía porqué había dicho eso.
-Lo sentimos... De verdad... Déjenos ir... Volveremos a casa...
-La próxima vez-solté al fae contra el otro haciendo que se fueran directos al suelo-que se os ocurra hacer algo así... Con cualquiera de ésta Corte... No abran preguntas... Sólo muerte-dije en un susurro y los dos salieron por patas con un asentimiento de cabeza. Dejé ir el aire y me giré a ver a la chica.
-Lo tenía todo controlado-dijo apoyando la espada en el suelo y volviendo a ponerse la capucha.
-Ya lo he visto-dije divertido - ¿es la primera vez? -me puse serio.
-Sí...-dijo apartando la mirada. Me acerqué y la cogí de la barbilla para que me mirara.
-Pequeño desastre... Confiesa... - rodó los ojos y dejó ir un suspiro.
-Llevo des de que me entrenas yendo detrás de todos los de la corte de pesadillas que se cuelan...-abrí mucho los ojos. No sabía si estaba loca... O si era la mujer más valiente que había conocido jamás. Después de todo lo que le pasó en el pasado.
-¿Qué problema tienes Gwyneth? - dije enfadado.
-Escucha... No les hago nada si ellos no intentan nada... Solo quiero... Quiero...
-¿Mostrar que puedes con ellos? - dije levantando una ceja.
-No... Sólo quiero que no le pase a ninguna chica más lo que me pasó a mi... - tragué duro-Velaris des de que llegué había sido mi refugio... Mi lugar en el que nada me podía pasar... estando Rhys... Y bueno... - nos miramos a los ojos - tu...
-¿Yo? - dije un poco cohibido. Notaba que mis sombras salían de mi y se movían frenéticas. Me estaba poniendo nervioso.
-Tu me salvaste...
-No llegué lo suficientemente... - empecé recordando la fatídica noche...
-Para mí... Me salvaste la vida... - me cogió de la mano - y des de entonces... - le costaba seguir y notaba como temblaba.
-¿Estás bien? - me vi diciendo.
-No lo entiendes... Es que tu... Tu me... - levanté una ceja.-me gustas. - me puse rojo. ¿Yo rojo? Pues sí.
-Yo... Gwyn... Yo... - no sabía como decirle.
-Lo sé, lo sé-se dejó ir de mis manos-no te gusto-me dio la espalda y sin callarse ni un momento, dejó ir tantas sandeces que no sabía como pararla. - si soy fea, inocente, poco graciosa, con tantos problemas del pasado y - la giré y la acerqué mucho haciendo que la chica se callara.
-Me gustas-dije ante su sorpresa-me da miedo el no saber actuar y asustarte pero deja de decir esas cosas de ti... Eres guapa-apartó la mirada-me haces reír... Me encanta la valentía que has demostrado y que ya sabía que tenías... Y sobretodo... - le acaricié el rostro para que me mirara y bajé a darle un beso corto, para decirle a la cara-te gusto por lo que soy...
-Eres lo más bonito que había visto nunca... - susurró ella a 1 centímetro de mi cara y mirándonos a los ojos. Sonreímos cómo dos tontos... Estuvimos toda la tarde volando... Bueno yo la llevaba y paseando por Velaris. Un poco incómodo, la gente nos miraba y la verdad a esas alturas del año la armadura no ayudaba.
Nos encontramos a Rhys y Feyre en un puesto de helado con Nyx en brazos de ella.
-¿Éste es Nyx? - dijo pizpireta Gwyn mientras le hacia carantoñas al niño. El pequeño de un año se reía ante las atenciones de la pelirroja.
Estaba hablando con Rhys cuándo escuche a mi alta Lady.
-¿Eres una de las amigas de mi hermana Nesta verdad? - con su dulzura habitual.
-Sí-dijo roja la chica.
-¿Estáis saliendo Az? - abrí la boca pero no me salían las palabras.
-Eso sí es una buena noticia - dijo Rhys a la vez que me daba una palmada en el hombro que casi me tira al suelo. Lo miré mal. Seguía empeñado en que abandonara la idea de estar con Elain. No quería más dolores de cabeza. Miré hacia Gwyn que estaba roja y no sabía ni dónde meterse y la cogí de los hombros.
-Nada me haría más feliz... - ella me miró y sin esperarlo delante de ellos me dio un beso. La cogí de la cintura para que llegara mejor y entonces...
-Hombre Lucien - bajé a Gwyn de golpe y miré hacia dónde miraba Rhys.
Venían Lucien y Elain paseando. ¿Nos abrían visto? Elain parecía normal... O le importaba más bien nada... O no habían alcanzado a vernos...
-¿Reunión familiar? - dijo el chico.
-Más bien nos acaban de dar una alegría - empezó Rhys poniéndose entre medio de Gwyn y yo.Nos cogió por los hombros y con una sonrisa soltó. - están saliendo.
La cara de Elain... Me miró disimulada y yo aparté la mirada. Al volver a poner los ojos en ella ya estaba con su sobrino en brazos y le decía a mi chica que se alegraba por nosotros. Rhys me apartó un momento.
-Necesito... - pero no le dejé continuar.
-¿Estás contento no?
-No entiendo a qué te refieres.
-Me has empujado a una relación... Hoy es el primer día que la he besado...
-Tonterías hermano. Os he visto tontear una y otra vez en los entrenos.-dijo sin más y después se puso tenso.
-¿En los entrenos? - levanté una ceja-llevas sin venir semanas... Dejaste a Elain y ni nos saludaste...
-Me lo imagino.
-Rhys... - lo miré mal.
-Está bien-levantó las manos-he estado haciendo visitas... Quería ver como os iba con las sacerdotisas sin que ellas...
-Querías ver si no me acercaba a Elain...
-Quería que me respetaras, sí... -gruñí-pero sobretodo... Quería ver sin que nadie se sintiera incómodo... De verdad me preocupa la salud de ellas... Lo sabes...
-¿Qué quieres Rhys?... - mi amigo se puso a mirar hacia su mujer y su hijo y los demás.
-Necesito que aceptes una misión lejos... - lo miré de soslayo-espera - dijo deprisa-es solo un mes. Será en Corte Invierno.
-Bueno al menos llevaré la armadura sin morir en el intento.-lo miré. El tío iba con una camisa fina de botones y unos pantalones de lino fino.
-Deberías provar a descansar un poco... Cuándo no estamos en misión.-dijo divertido.
-Olvídame... - moví las alas incómodo-¿qué tengo que hacer allí?
-Relajarte - levantó y bajó las cejas-no enserio creo que Kallias oculta algo...
-¿Algo? - dije incrédulo - en la última cumbre os vi bastante amistosos.
-Quizás no me sirvas en ésta misión después de todo-dijo con sorna, provocando que le diera con el puño en el hombro-era broma, era broma. Hermano estas tenso. En fin quiero que Gwyn vaya.
-¿Has montado todo esto.. - nos señalé-para que tenga un tiempo a solas con ella sin Elain? - dije un poco enfadado.
-! ¿Te das cuenta que a cada frase que hablamos la nombras?! - dijo chillando. Nos quedamos los dos un poco quietos recordando que no estábamos solos.
-¿Todo bien cariño? - gritó Feyre des de su silla. Miramos los dos y Rhys me pasó el brazo por los hombros y gritó.
-Genial Feyre cariño, solo le voy a echar de menos - volvió a mirarme y hablar bajito.-en tres años es la primera vez que la veo hablando, andando, disfrutando de su pareja... No lo estropees... - dijo refiriéndose a Elain.
-Rhys... Yo...
-Necesito que vayáis, de hecho voy a enviar a Emire para que Gwyn esté más a gusto.
-¿Y Nesta? - dije con una ceja levantada.
-Como envíe a Nesta sin Cassian... Nuestro hermano se volverá loco... O peor... Ella se volverá loca allí y la verdad... No quiero que estalle otra guerra-empezamos a reirnos.-Por otra parte necesito que Cassian y Nesta se queden para seguir enseñando a las sacerdotisas...
-No creas que no veo lo que intentas...
-Mor también irá.-sentenció.
-¿Tan mal te caigo? - dije alejándome de él.
-Hermano, nunca te supuso un impedimento que ella estuviera cerca... - suspiré.
-Va a ser incómodo...
-Ella se alegrará por ti...
-¿Cuánto tiempo? - dije sin mirarle apoyado en el muro del río y mirando hacia su final.
-Un mes, solo te pido eso. Te enviaré todas las cosas que quiero que hagáis cada uno y sobretodo quiero que seas mis ojos allí y mis oídos... Todo...
-Está bien... - me rendí.
-Vamos empiezan a pensar que algo pasa - dijo yendo hacia los demás. Gwyn estaba cogiendo a Nyx que al verme estiró sus manitas para que le cogiera.
-No puede resistirse a su tito. - dijo Feyre. Sonreí y le cogí, se acomodó entre mis brazos, sonreí sería todo un guerrero en unos años. Levanté la vista y ya no estaban ni Lucien ni Elain. Algo dentro de mi sabía que la había perdido y se resistía a dejarla ir...
Escuché en silencio con el niño entre mis brazos cómo Rhys le daba la noticia a Gwyn que se lo tomó mucho mejor que yo.
-No son unas vacaciones - le dije cuándo la dejé en las puertas de la biblioteca. Habíamos subido volando y ella iba aferrada a mi cuello. Olía demasiado bien... Hacía tanto que no estaba con nadie... Pero la idea de tener a Mor y Gwyn en la misma misión... Y dejar aquí a Elain con Lucien... Maldito Rhys...
-Para mi lo serán y si encima estás tú...-dijo acercándose tímida, sonreí y bajé a darle un beso un poco más subidito que los de esa tarde. Al separarnos susurró.-estoy deseando que nos vayamos...
-Buenas noches desastrecillo-dije sin poder dejar de mirarla.
-Descansa y mañana nos vemos y preparamos todo para irnos.-asentí y vi como se iba hacia adentro. Salí disparado hasta mi ventana unos pisos más arriba, entré y me quité la armadura. Entré en la bañera y me dejé caer... En un baño que duró quizás más de lo normal. Alguien picó a la puerta.
-¿Quién? - grité des de dentro y no contestaban. Seguía picando, me cansé y salí con una toalla enrollada en las caderas y el pelo muy mojado. Al abrir vi esos ojos marrones que tanto me atormentaban en sueños...
-¿Todo bien? - dije dándome cuenta que me miraba los abdominales, los cuales apreté, sonreí al ver que apartaba la mirada.
-¿Puedes vestirte? - dijo de espaldas.
-Estaba en la bañera.Pasa-le dije yendo hacia el baño y poniéndome un pijama oscuro. Salí y estaba apoyada en mi escritorio mirando hacia la ventana.
-¿A qué debo tu visita Elain? - sonreía sin mirarme.
-¿Estáis saliendo? - dijo a media voz.
-Sí-ahora era yo el que miraba hacia la ventana al notar que ella me miraba.
-Perfecto... - la miré-¿os vais?
-Sí-dije sin apartar la mirada.
-¿Es lo que quieres?
-Es lo correcto...
-¿Ella es lo correcto?
-Sí-dije sentándome en la cama.
-¿Para quién? - dijo acercándose despacio, tragué duro cuándo se paró justo delante mío y bajó a la altura de mi cara.
-Para todo el mundo... - susurré cuándo estaba tan cerca que podía oler su agradable perfume difuminado con el olor de su piel...
-Cobarde... - soltó, encendiéndome... La cogí y la tiré en la cama y me coloqué encima.
-Repítelo-la reté.
Continuará
Qué tensión señores... 🙄😈😏
Espero que os esté gustando 💙🦇🌹