Una corte de luz y oscuridad

Parte 9

Azriel

Estábamos ya en corte invierno. En el despacho de Viviane los tres.
-¿Pero puedo saber para quién es esto? - dijo ella curiosa observandome con una sonrisa.
-Es que es secreto de mi corte... - dije disimulando y Kallias riéndose dijo.
-No le tortures más mujer.
-Está bien-dijo levantando las manos en son de paz-sin preguntas Azriel. - asentí-aunque se que es para ti.
Me quedé blanco mientras su marido se partía de risa.
-Empecemos. Se conoce muy pocos casos de alguien que hiciera tal cosa. Se conocen casos de gente que ha conseguido romper el vínculo... Tener más de una pareja - pensé en Gwyn... Quizás si rompía el vínculo con Elain ella sería mi pareja... - pero lo de dormilo...
-Creía que sería lo más sensato, pero si no sabes como hacerlo... Romperlo será la otra opción. - dije serio y los dos me miraron con pena-no me miréis así.
-Az cariño... - miré a Viviane - ¿ella lo sabe? - negué mirando al suelo-eso no está bien... Sea quién sea... No está bien... - respiré con dificultad-¿tan mal a elegido el destino? - asentí.
-Mira... Yo soy una enamorada del amor-dijo levantándose y cogiendo la mano de su marido-haré lo que haga falta por dormilo...
La verdad que me quitó un peso de encima.
-Tenemos dos semanas-dije pensando en el regreso.
-Dame dos días - dijo decidida.
-Esa es mi mujer - dijo el alto Lord a la vez que le daba un beso.
Me fui del despacho un poco mareado... ¿Enserio había pensado en romperlo?... Francamente me sentía muy mal conmigo mismo... Iba a llegar a mi habitación cuándo Gwyn me interceptó metiéndome en la suya.
-Te he echado de menos - dijo dándome un beso efusivo, el cuál recibí con ganas.
-Desastrecillo deberíamos ir a correr... - dije soltándola, estaba muy excitado... Y se me notaba con esos pantalones... Hasta que no tuviese dormido el vínculo no quería hacer nada...
-¿No quieres estar conmigo a solas? - se puso triste y miró hacia abajo y cuándo vio lo que había en mi pantalón se puso cómo un tomate.
-Perdón enserio.-miré al frente-como puedes ver tengo más que ganas... Pero... -
Volví a notar esa sensación, joder con Elain y su oportinismo...-dame unos días... No quiero hacerte daño... Tengo que mentalizarme en hacerlo suave... - me acerqué a ella susurrando-lento... - vi como cerraba los ojos y sus labios carnosos se separaban, sonreí y le cogí del rostro-estás tan hermosa... Que podría descontrolarme... - le di un beso en la frente - me voy a mi cuarto necesito descansar después de todo el día fuera.
-¿Habéis ido a primavera verdad? - dijo ella.
-¿Cómo sabes tu eso? - levanté una ceja.
-Emire se lo sonsacó a Mor. - dijo sin más. Fui hacia la puerta.
-Menos mal que yo no soy un chivato... - le guiñé un ojo-voy a descansar.
-Az-dijo antes de que yo desapareciera - en unos días... Quiero hacerlo... Necesito...
-Yo también te necesito... Desastrecillo... - desaparecí y me fui a la cama.
Con el pijama, duchado y ya con unas ganas de cerrar los ojos... Y entonces la sensación... Pero esta vez era agradable... Demasiado agradable... Estaba en el pasillo... Decidido a no ir a intentar despertarme pero esa sensación... Mierda... ¿Estaría follando?... Respiré con dificultad hasta llegar a esa maldita puerta... Puse la mano y entonces un quejido... Arrugué la frente. Puse la oreja en la puerta.
-Nuala me dijo que si pensaba en él mientras intentaba llegar... Pero esto es un desastre... Es que ni lejos puedes dejarme tranquila Azriel.
Sonreí.
-Ni tu a mi... - dije en voz alta. La puerta vibró un poco al escucharme, mierda. ¿Y si mis visitas propiciaban que se despertara el vínculo?...
Iba a separarme cuándo un gemido me alertó. Empecé a respirar muy acelerado mientras la escuchaba... Yo mismo sin darme cuenta tenía la mano en mi pantalón que ya estaba que iba a reventar... Me rocé por fuera escuchando sus gemidos tímidos... ¿Así que así se escuchaba su voz cuando...? No, no Azriel... Ya es la segunda vez que violas su intimidad... No está bien joder... Dejé de tocarme y me iba a alejar de la puerta cuándo soltó.
-Desisto... No voy a llegar a ninguna parte pensando en Azriel... - miré al techo. Si estuviese ahí le haría llegar tantas veces que no podría dejar de chillar mi nombre. Avancé por el pasillo hasta mi zona y sin saber como ya estaba en la cama otra vez.
-A la mierda todo... - dije a la vez que me bebía un brebaje para dormir y quedaba ko hasta el día siguiente.
Al levantarme temprano desayuné algo de proteína y me fui directo a entrenar. A las dos horas aparecieron las chicas.
-¿Qué llevas toda la noche entrenando? - chilló Mor.
-Algunos nos tomamos los entrenos enserio-espeté mientras le daba al saco de boxeo.
-Alguien está de mal humor - oí que decía a las chicas, rodé los ojos.
-¿Te vienes a dar un paseo? - dijo Gwyn señalando a las dos chicas.
-Prefiero seguir si no os molesta-vi decepción en su rostro. Pero yo nunca había sido apegado a la gente, me gustaba la soledad y no iba a cambiar eso.
-Sí, está bien, nos vemos en la comida-dijo y se despidió con la mano de lejos.
Seguí un buen rato más hasta que estaba tan cansado que solo podía moverme hasta el castillo a rastras.
-Buen entreno-dijo el alto Lord apostado en la entrada.
-¿No entrenas?
-Mis entrenos son en la nieve... Suelo hacer por la tarde. Por la mañana me tengo que ocupar de un reino cantor. - sonreí - Por cierto Viviane te busca-abrí mucho los ojos.
-¿Ya? - me salió una voz un poco estridente.
-Vaya sí que estas nervioso - se empezó a reír.
-¿Dónde?-intenté aparentar estar serio y tranquilo.
-Está en el despacho del otro día. - salí por patas.
-Gracias - chillé de lejos.
Estaba muy nervioso. ¿Funcionaría? Tenía que hacerlo pues me iba a volver loco...llegué rápido al despacho y piqué insistente.
-Adelante-se escuchó la voz dulce de la chica.
-Buenos días, Kallias dice que me buscabas.
-Así es-estaba sentada en su silla mientras con una mano sostenía un botecito.-esto amigo mío va a ser un éxito.
-¿Qué es? - dije curioso sentándome.
-Es una mezcla única, creada especialmente para ti. Lleva los mismos ingredientes para romper el vínculo, a excepción de dos. Eso es lo que leí en los archivos de la biblioteca de mi marido. - arrugué la frente en silencio mientras observaba ese minúsculo bote salvavidas-Verás Az... No es immediato. Tienes que tomarte la mitad del frasco hoy y la otra mitad mañana.
-Entiendo - dije decidido.
-La suerte que tenemos es que como ella lo tiene de por sí dormido te dejará hacer la transición sin problemas.
-Eso espero... - susurré antes de levantarme.
-Espera-la miré-me da pena que habiendo encontrado el amor no se te despertara con Gwyn.
-Conocí antes a la otra persona y quién sabe... Quizás si lo duermo se me despierta con ella.
-Az cariño... Eso no va así es más si hubieses querido de verdad eso lo hubieses roto.
-Por favor Viviane... Esto no puede salir de aquí...
-Ya lo sé... Tu tómatelo y me vas diciendo que sientes-me sonreía mientras yo asentía y salía con un gracias escueto. Esa misma noche lo haría.
-Es una de las últimas noches¿por qué tienes que ser tan muermo? - empezó Mor des de el alfeizer de mi ventana.
-Quítate de ahí que te vas a caer - dije des de mi cama.
-Es que no me entra en la cabeza-dijo levantándose y acercándose.-Emire quiere, Gwyn quiere y por supuesto yo quiero.
-Eso ya me lo has dejado claro. No pienso ser un calzonazos. Si digo que no me apetece no me apetece.
-Es mi oportunidad para tirar ficha - dijo poniendo ojitos de cordero degollado.
-No seas chantajista Mor...
-Por faaaaaaavor - rodé los ojos.
-¿Dónde vamos? - no podía resistirme.
-Al club más candente de estas frías tierras. Glacies ignis.
-¿Y ese nombre de mierda? Fuego de hielo - levanté una ceja-vas hacer que me quede aquí.
-Vamos va vístete. - fue hacia mi armario pero picaron a la puerta. Fui abrir y era Gwyn.
-Chicos perdonad - dijo cuándo vio a Mor dentro de mi cuarto y cotilleando en mi armario.-es que Emire no se encuentra nada bien.
-¿Qué le pasa? - salió corriendo Mor a la altura de la chica.
-Está vomitando y tiene fiebre... Tendremos que dejar lo de salir para otra noche...
-Deberíais cuidarla-dije yo disimulando y deseando quedarme solo para tomarme el mejunje.
-¿No te enfadas no? - preguntó Gwyn y Mor me puso cara de asesina.
-No, claro que no-dije éste segundo no hacia mi amiga.
-Eso espero, vamos guapa-dijo Mor a la vez que cogía a mi chica del brazo y ni despedirnos nos dejó. Cerré la puerta y nervioso fui hacia la cama. Me senté y saqué el frasco. Tenía una mezcla de colores inusual. Verde, amarillo, negro y azul... No se mezclaban entre ellos y daban vueltas sin cesar dentro de esa botella. Tenía muy mala pinta pero si con eso conseguía que todo estuviera bien...
Lo abrí. Si la pinta era mala... No queráis saber el olor... Miré al techo.
-Tu puedes-me dije a mi mismo a la vez que cogía aire y me empezaba a beber ese brebaje.
Una náusea me atacó mientras daba el segundo sorbo... Joder que líquido más desagradable. Miré hacia la botella. Quedaba la mitad, lo había conseguido. Sonreí y la cerré para no seguir oliendo ese olor desagradable.
La dejé en el cabecero, entre dos libros. Parecía decoración, así si alguien entraba no sospecharian.
De repente me vino un dolor en el estómago muy fuerte. Tan fuerte que me tiré en la cama y me puse en posición fetal. Las alas me molestaban no sabía ni dónde meterme. Sudores fríos... Retortijones... Notaba que me subía la fiebre... ¿Dónde me había metido? Cerré los ojos y aparecí en la casa del viento. Todo me daba vueltas, era de noche y me costaba avanzar por el pasillo silencioso...
¿Me abría transportado? Fui hacia mi cuarto pero una luz en el de Lucien me alertó... Con sigilo me acerqué. Mis sombras estaban en su salsa... Se difuminaban con la oscuridad de las paredes y me ofrecían un buen camuflaje. Llegué a la altura de la puerta y sin pensarlo miré hacia el interior.
-No se que quieres que te diga. - decía el pelirrojo hacia alguien que estaba sentada en su cama. Con el cuerpo de él no podía saber con quién hablaba.
-¿Estás celosa? - se escuchó la risa de la chica... Esa risa que tanto conocía yo... Tragué duro cuándo se movió un poco y pude ver a Elain... Con un camisón largo y un poco transparente, apreté la mandíbula. Ella se levantaba y sonriente decía.

-Siempre me has ido detrás. Y ahora que no está Azriel, puedo al fin decirte la verdad.-¿Perdona?
-¿Y que verdad es esa Elain? - dijo Lucien acercándose más a ella y poniendo tensa a la chica.
-Que des de hace un tiempo... No quiero que te vayas... - susurró.-des de hace un tiempo solo puedo pensar en ti.
¿Estaba soñando? - me gustaría que nuestro vínculo...
No la dejó terminar, la cogió de la cara y la besó con ganas. Las pupilas se me dilataban y los latidos de mi corazón se disparaban. Yo intentando dormir el vínculo de pareja y ella ya había pasado página... Lucien cerró la puerta con la pierna y se escuchó un gemido fuerte... Tenía el corazón en un puño mientras avanzaba por el pasillo otra vez y en la oscuridad de la noche aparecí en nuestro pasillo... Mi zona estaba igual... Pero su zona... Las flores estaban marchitas... La puerta estaba como... Me acerqué y la toqué, helada... Dormida... Suspiré. Hubiese dado igual romperlo... Ella ya había elegido. Estaba seguro que lo que había tenido era una visión del presente gracias al vínculo y la poción... Fui hacia mi lado del túnel y acabé en mi cama inconsciente hasta el día siguiente.
Pasé la mañana del día siguiente entrenando con Kallias.
-¿Y hoy que notas?
-Noto que estoy libre al fin.
-Recuerda que aún tienes que tomar la otra mitad.
-Eso haré hoy.-dije serio a la vez que con la espada que me había dejado le atacaba.
-Fiera con tanta fuerza no-gruñó el alto Lord.-he pensado que como son vuestros últimos días aquí voy a celebrar un banquete en vuestro honor.
-Gracias, no es necesario, no queremos molestar.
-No me molestais cantor. - sonreí a la vez que le atestaba con más ganas.
-Los Ilyrios sois unas criaturas de lo más tercas. - nos echamos a reír los dos.
El día pasó rápido y en un abrir y cerrar de ojos estaba otra vez con mi chica en mi cama... Dándonos besos que cada vez iban a más.
-¿Te duele algo? - dijo ella.
-Hoy estoy bien Gwyn... Solo quiero... - le empecé a desabrochar la blusa - que te sientas a gusto con esto... Segura...
-Nunca había estado más segura de nada... - sonreí a la vez que me quitaba el pijama y me quedaba en ropa interior.
-No quiero que me tengas miedo... - susurré y ella misma se acabó desabrochando para dar paso a un cuerpo escandalosamente apuesto... Blanca a más no poder... Con algunas pequitas por allí y por acá... Sus senos bien formados y esa lencería...
-Mor me ayudó a comprarla - me puse un poco rojo-¿me he pasado verdad? Lo sabía... - dijo tapándose.
-No-la paré-no voy a poder parar hoy... - asintió despacio a la vez que se quitaba las manos del cuerpo y se dejaba llevar por las mías...
Continuará
Dormimos el vínculo... ¿No? 😒👊 Espero que os esté gustando 🦇💙🌹💋❤️