A Un Beso || Peter Parker Y Tú ||

"𝐇𝐨𝐲 𝐯𝐞 𝐞𝐥 𝐬𝐨𝐥 𝐛𝐫𝐢𝐥𝐥𝐚𝐫...

° • _____ 𝐌𝐨𝐨𝐫𝐞 🌼

Me quedé sin moverme al ver cómo Peter salió corriendo por una razón que realmente no entendía.

¿Tan mal nos besamos?

Pero solo de recordar la sensación de sus labios en sincronía con los míos era magnífico que juraría que las palabras ni siquiera saldrían bien. De verdad que mi cerebro no procesa el hecho de que hace unos segundos me estaba besando con él, era tan irreal que parecía un sueño.

Por favor no me despierten.

Una ráfaga de viento me invadió y mi vestido no ayuda al frío que comenzaba a hacer. Caminé al interior de mi casa y claro que sentí la diferencia de temperatura.

Y ahora me sentía algo incómoda, no tenía a nadie con quién hablar. Todos eran amigos y socios de mis padres que claro que no me pondría a hablar con ellos, qué incómodo. Tampoco había alguien de mi edad con el que pudiera hablar.

Hasta que la última persona que quería ver y hablar se me acercó.

— ¿Nuevo amiguito? —en su mano sostenía una copa de champagne.

—No te interesa.

—Claro que me interesa, tu novio no esta feliz de que estuvieras pegada a ese tipo —dio un trago.

—Tú y yo no somos novios hace meses —mascullé. —Puedo hacer lo que se me plazca.

—Mis padres quieren hablar contigo.

—Yo no tengo nada de qué hablar con ellos.

Justamente a las personas que no quería ver aparecieron frente a mí. Su madre me dio un abrazo bastante incómodo y podría jurar que su padre vio mi cara.

—Hace mucho no hablamos, cariño —nunca entendí como él era la peor persona del mundo pero su madre era la persona más dulce. — ¿La universidad es muy pesada? Supongo, eso fue lo que nos dijo Damian ahora que ya no se ven tan seguido.

¿Qué carajos?

Claro, mi carrera no era fácil, pero podía manejarlo muy bien al punto que en estos últimos cinco meses salía seguido con Peter o un café o a cualquier cosa que se nos ocurriera. Tenía el tiempo suficiente para que me gustara una persona.

—Pero ya tendrán tiempo para volver a tener sus salidas de novios, cariño. No te apures —ese maldito hijo de...

—Él y yo de terminamos hace más de cinco meses —solté sin titubear.

Él ambiente entre nosotros se puso tenso. Noté la mirada de Damian fulminante por haberlo dejado como un mentiroso frente a su familia. Su madre estaba con la boca abierta.

—Disculpen —tomé mi camino hacia mi habitación, realmente necesitaba un  respiro.

Me senté en mi escritorio en un momento viendo colgar mis pies ligeramente. Pensé en todas las emociones que tuve en una sola noche, pánico: al saber que Damian había asistido, orgullo: por mi madre y su nueva editorial, amor, entusiasmo, magia: por Peter, enojo: al saber que el imbécil que tengo por ex novio seguía diciendo que éramos novios.