"𝐏𝐫𝐞𝐟𝐞𝐫𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚𝐬...

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° • ______ 𝐌𝐨𝐨𝐫𝐞 🌼

—Abigail, ¿quieres dejar mi ropa en paz?

Desde hace media hora que Abigail piensa que mi guardaropa es un probador de alguna tienda, no dejaba de sacar alguna prenda y probarsela.

— ¡No me juzgues! —chilló. —Tú tienes ropa que yo no, me da curiosidad.

Crucé mis brazos sobre mi pecho, divertida, en busca de una explicación. 

—Por ejemplo —buscó alguna prenda y terminó por sacar un abrigo. —Este abrigo no lo tengo yo, papá no me dio a tiempo su tarjeta y estos fueron exclusivos, no llegué a tiempo.

Negué divertida. Vi para mi escritorio y Emma estaba muy entretenida en mi computadora, parecía que mis amigas tenían una afición por agarrar mis cosas como si fueran suyas. No me molesta, yo era igual.

Volví a mi teléfono y seguí la conversación con mi novio. 

Qué bien suena eso.

Desde hace cuatro días que éramos novios oficiales y no habíamos dejado de hablar en ese corto lapso, bueno, no era como si antes no habláramos pero solamente se intensificó. Obvio era lo máximo que podíamos, estaba mi universidad y su trabajo, pero lo manejábamos bien. Soy conciente de la sonrisa que se curvó en mis labios por el simple hecho de hablar con Peter.

—Ugh, no sé quién está peor, si tú o Abigail —se quejó. — ¿Sus novios no tienen algún amigo que me presenten? 

—Lo dudo. Y no tengo novio —aclaró. —Digamos que no estoy soltera pero tampoco tengo novio.

Se quedó callada por unos segundos perdida en la nada.

—Yo no puedo decir lo mismo —murmuré, expectante a la reacción de mis amigas.

No tuve una respuesta en ese momento pero cuando alcé la mirada, se vieron entre ellas y regresaron conmigo.

— ¡¿Qué?! —gritaron.

— ¡Ay, ¿qué les pasa?!

Las dos se lanzaron a mi lado, Abigail dejó botada mi ropa y Emma se tropezó al ir de mi escritorio a mi cama.

— ¿Qué? ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Dónde? —fue Emma la primera en bombardearme de preguntas.

— ¡¿Y por qué no nos dijiste, traidora?! —mi otra amiga empujó mi hombro con indignación.

—Bueno, ustedes están con sus estudios, yo con los míos —expliqué. —Pero sí, me lo pidió desde hace unos días.

Las dos soltaron un chillido que tal vez escuchó hasta mi abuela, mientras me zangoloteaban entre las dos. Me empecé a reír en lo que mis amigas tenían un ataque de euforia, cuando se les pasó me miraron expentantes, esperando algo que ni yo sabía.

— ¿Qué? 

—Cuentanos más —dijo Abigail, entusiasmada.

—Pues, fuimos a una feria y me lo pidió —me dejé caer de espaldas a la cama, solo de recordar sus palabras las mariposas volvían a revolotear. —Juro que fue lo más romántico que me dijeron en la vida.

—Sí, lo veo —afirmó Emma, ni siquiera me di cuenta cuándo agarró mi celular, revisando mis conversaciones. — ¡Dios, qué cursis!

Me levanté para quitarle el aparato pero ella fue más rápida en apartarlo de mí. La perseguí por toda mi habitación mientras ella seguía mirando mis conversaciónes.

— ¡Emma, dámelo!

— ¡_____ siendo una cursi! —siguió molestando.

— ¡Ayúdame! —le pedí a mi otra amiga pero estaba muy ocupada riéndose de nosotras. — ¡Abigail! 

A Un Beso || Peter Parker Y Tú ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora