A Un Beso || Peter Parker Y Tú ||

"𝐌𝐢𝐜𝐡𝐞𝐥𝐥𝐞 𝐝𝐞 𝐫𝐞𝐠𝐫𝐞𝐬𝐨...

° • 𝐏𝐞𝐭𝐞𝐫 𝐏𝐚𝐫𝐤𝐞𝐫 🕷

—Es tan pequeño que creo que puede romperse fácilmente.

Hoy Jayden había llegado al departamento después de acompañar a su hermana en el nacimiento de su hijo. Si les soy sincero, cuando me dijo que su hermana estaba embarazada pensé que era una broma del momento pero en cuanto salió corriendo de la cafetería me di cuenta que no lo era.

— ¿Y tu hermana, cómo está?

—Parecía drogada por la anestesia y lo cansada que estaba —comentó divertido. —No le digas que dije eso.

Reí.

—Ni siquiera la conozco, así qué...

—Igual, pero el niño apesar de estar pequeño tiene toda la belleza de la familia Brown —hablo presumido. —Hubieras visto a su esposo, estaba histérico.

—Habla él que estaba que en la mañana estaba diciendo que le pasara sus "pastillas"

—Cuando tú estés nervios por algo, yo me reiré de ti.

Era casi las dos de la tarde por lo que por el momento no había tanta gente, una que otra persona entrando por un café diario, así que Jayden y yo estábamos recargando la espalda baja en la barra.

También ya casi terminaba el horario escolar de _____ —por si necesitaban el dato— yo estaba super ansioso por hablar con ella aunque sea solo unos minutos, aunque siempre podría visitarla por su ventana.

— ¿Qué hiciste en mi ausencia?

—Estuve un rato con _____ y fui al bar a trabajar.

— ¿Estuviste con tu novia? ¿De verdad? Qué novedad.

—No es mi novia —¿quisiera que lo fuera? Claro, pero quería pedírselo de una forma especial. Así que de momento no lo era.

—En algún punto lo será —afirmó entonces Jayden. —A menos que se separen dramáticamente y puedan sacar libros o canciones en base a eso.

—Te a acabas de montar una historia que no va a pasar.

—Bueno, solo era una posibilidad —negué con la cabeza. Al segundo sonó la campana de la cafetería que anunciaba una llegada de cliente. —Ve tú, a mí me da flojera.

—Para eso trabajas —mascullé.

—Sí, pero eso no quita mi pereza.

¿Cómo lo habían contratado?

Me acerqué hacía el nuevo cliente sumergido en mis pensamientos; las calles que vigilaría hoy, dividir mis dos sueldos en cosas de la casa y en mis propias cosas. Cuando salí de mis pensamientos me congelé a ver a Michelle en frente de mí.

¿Qué hacía aquí? ¿No estaba en Boston?

No era novedoso para mí que Michelle no me causara absolutamente nada como lo hacía ______. Pero la sorpresa de verla aquí en Nueva York no podía ocultarla.

—Bienvenida, ¿qué gusta pedir?

—Uhm, un café del día, por favor.

—En seguida.

En todo el tiempo que me tomé para preparar el café, no despegó su mirada de mí, incluso Jayden me lo hizo saber. Como si me reconociera o tuviera una vaga idea de quién era. No dudaba de que su cerebro estuviera trabajando para recordarme pero prefería que se mantuviera así, si se diera el caso de que recordara por completo, tocaría explicarle que a día de hoy ella ya no ocupaba mi mente ni mi corazón, aunque que dudo que yo también tuviera un efecto en ella.