Capitulo 35

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-¿A qué te refieres con eso?

-Sí estarán tomados de la mano, dándose besos y todo eso.

Buena pregunta.

-No lo sé, habrá que ver.

Ella asintió.

-Bien, es hora de irse a la cama.

Con cuidado alcé a Max y la llevé de vuelta a su habitación, se puso su pijama y se acostó a dormir.

Luego de comer algo y ponerme cómodo para dormir, también me fui a la cama. Ahora se sentía mi cama vacía sin Rose a mi lado. Había dormido con ella las últimas noches, tanto que me llegué a acostumbrar.

Tuve la misma rutina de cada mañana, en cuanto llegué a la universidad, vi a Rose llegar en su auto. Estacionó frente a mí y bajó del auto. Bajé unos segundos después, así que solo me acerqué a ella por detrás.

-Buenos días linda-Le susurré al oído. Dio un salto y un grito ahogado.

Se llevó una mano al corazón.

-Oh dios...-Suspiró-Buenos días...novio-Sonrió ampliamente en cuanto se dio la vuelta para verme.

Me sentí nervioso en cuanto dijo aquello, pero a ella parecía no importarle.

-¿Cómo estás?-Preguntó antes de colgarse de mi cuello.

-¿Segura que quieres dar este show?

-No me importa-Se encogió de hombros-Tengo un novio ¿Por qué ocultarlo?

Genial.

-En ese caso...-La tomé por la cintura y la acerqué a mí-Estoy de maravilla ¿Y tú?

-También-Murmuró antes de besarme.

Escuché los susurros alrededor de nosotros, no me importó en lo más mínimo. Nada podría arruinarme aquello.

Rose se separó lentamente de mí y me miró sonriente.

-¿Sabes qué clases tenemos?

-Aritmética.

-Así es-Afirmó-¿Y quién es tu compañera de clase?

-Mi hermosa e inteligente novia-Subí las cejas, ella rió y me besó de nuevo.

-Así es-Repitió-¿Vamos?

-Vamos-Antes de comenzar a caminar ella tomó mi mano y ambos entramos caminando así a las instalaciones de la universidad. Cada persona que nos veía, desde los de primer año hasta los del último, nos miraba con ojos como platos y sus mandíbulas casi tocaban el suelo.

Pronto, llegando al edificio de las clases de último año, vimos aproximarse a Harrington y sus súbditos. Miraron a Rose, a mi y nuestras manos unidas, hubiera dado cualquier cosa por poder tomar una foto a sus caras en ese momento. Harrington abrió los ojos como un par de platos y frenó en seco. Byers casi rompe las baldosas del suelo con su mandíbula y Carver...Quise reír en su cara, primero se tornó tan blanco como las paredes y luego cambió a un tono rojo intenso, mientras sus puños se cerraban y cada músculo de su cuerpo se tensionaba. Rose sacudió su mano hacia ellos sonriente y pasamos junto al trío de idiotas. Los tres se giraron a vernos y yo les regalé una sonrisa triunfante.

Entramos al salón, detrás entró el profesor y podía escuchar como todos hablaban de nosotros y las miradas que atraíamos. Hasta el profesor se sorprendió al vernos entrar juntos...tomados de la mano. Atraíamos las miradas de los presentes, murmuraban. Pero no me importaba.

Compartía casi todas las clases con Rose. Eso era genial, lo malo; también lo hacía con el rebaño de Harrington.

Después del almuerzo y varias horas de clases que ya habíamos acabado, debíamos ir a la clase de educación física, en la universidad las chicas tenían una clase y los chicos otros, totalmente apartados solo para ''evitar''.

당신을 사랑하자 (Billy Hargrove)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora