CAPÍTULO 7: refresco de ponche

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Hyeji

Lo último que me faltaba.


–¡¿Qué?!


–¡Lo que escuchaste!


–Repítelo de nuevo.


–¡Eres una maldita -


Procedo a cachetearlo. Nadie tiene el derecho de hablarme así, y mucho menos él.


Nunca jamás en tu vida vuelvas a dirigirme la palabra, rubio. Deberías estar agradecido por lo que ocurrió anoche.


Las personas a nuestro alrededor comienzan a murmurar.


Es una zorra.


–Probablemente se metió con él.


–¡Qué afortunada!


Yo solamente giro los ojos, fastidiada.


No tenías derecho de contarle a Jungeui sobre.. Sobre 'ella'.


–¿Qué?


–No te hagas la tonta, sabes muy bien de lo que estoy hablando.


En ese momento el director aparece como por arte de magia. Ojalá así apareciera cuando es realmente requerido.


Ustedes dos a la dirección. Ahora.


Salvado por la campana, Choi.


El rubio y yo comenzamos a caminar hacia la oficina del director en donde nos da una larga charla de media hora, después nos manda a una de las aulas vacías del último piso "para recapacitar".


Al entrar, cada quien se sienta de un extremo a otro del salón para no tener que dirigirnos la palabra. Sin embargo, el primero en fallar es él.


–No tenías que hacerlo. – mencionó mientras miraba a través de la ventana. – Jungeui no tenía que saber sobre Hyori.


–¿Hyori? Ah.. – recordé. – Anoche decías ese nombre en tu ebriedad pero nada más. Jungeui me tenía tirada en el suelo así que solamente le dije ese nombre para que dejara de molestarme. – admití. – Sin embargo, no tenías el derecho de hablarme así.


Se queda en silencio.


Tú tampoco tenías el derecho de contarle a otros sobre Hyori. – recargó su espalda en la pared y se cruzó de brazos.


Ahora fui yo quien se quedó en silencio.


Este ser humano no sabe disculparse.


–Entonces, tal parece ser que ninguno de los dos va a pedirle disculpas al otro, ¿verdad?


–Suena bien por mí – sonrió sarcástico.


Siento como la sangre comienza a hervir así que comienzo a caminar hacia la salida para escapar del aula; pondré la excusa de que necesito ir al sanitario y jamás volveré. Sin embargo, mi gran escape es interrumpido por la voz de aquel chico.


Ella fue mi novia hace mucho tiempo. La amé como a nadie y ahora no está. Podrá parecer patético viniendo de mi pero, soy honesto al decir que me duele mucho hablar sobre ella.


Lonely boy | YeonjunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora