El corazón insiste.

19. El gran regreso

Doce años después.

La vida de Kara no había sido precisamente feliz, se había esmerado, claro, pero no lo había conseguido. Habían muchas cosas que le molestaban de la forma de ser de Mike y lo único por lo que seguía adelante era por Alexa.

Alexa era una chica hermosa cuyos ojos sorpresivamente para Mike habían terminado siendo verdes, ese hecho no le dio mucho gusto, pero Kara estaba encantada. Su hija era el más grande motivo de su vida, pero se daba cuenta que Alexa iba creciendo y dándose cuenta de la mala relación con Mike.

—Lo he estado pensando, Mike. Creo que es tiempo de darnos cuenta de que esto no está funcionando y que cada uno debe tomar su propio camino.

—Sé que hemos tenido algunas diferencias, pero no es suficiente para que terminemos el matrimonio. Alexa merece ver a sus dos padres juntos.

—Alexa ya no es una bebé, Mike. Se da cuenta de que discutimos y que no nos hacemos bien. Es una chica muy inteligente y no quiero que siga creciendo en un ambiente tóxico como este.

—Me parece que estás exagerando, Kara.

—Ni siquiera creo que me ames, Mike, parece que sólo te encaprichaste por mantenerme a tu lado.

—No, Kara. Me puedes reclamar muchas cosas, pero no sobre mi amor. Te he amado cada día, esperando el día en que tú sientas lo mismo por mí.

—Pues ese día no llegará, Mike. No te amé ni te amaré nunca. Ya no puedo con esto.

—Intenta una vez más, Kara. No me casé contigo para divorciarme unos cuantos años después.

—No han sido unos cuantos, doce para ser exactos y no pienso desperdiciar un día más a tu lado.

—Necesitamos ir a terapia de pareja, sé que encontraremos la forma de seguir juntos. Tenemos una maravillosa familia pese a todo.

—Ya dije mi última palabra.

—No tienes ninguna oportunidad con Lena.

—¿Por qué siempre la metes en nuestras conversaciones? Lena no tiene nada que ver con mi decisión.

—Porque la sigues amando después de todos estos años, su recuerdo nunca nos permitió ser felices.

—Su recuerdo no me hizo decepcionarme de ti como persona.

—Kara, yo he cometido errores, pero en verdad te amo a ti y a Alexa, sé que con su ayuda puedo ser una mejor persona.

—Pues hubieras intentado cambiar antes y no ahora que estoy por dejarte. Ya es muy tarde.

Kara dejó a Mike hablando solo y siguió avanzando. A veces pensaba que Mike estaba más obsesionado con Lena que ella. Kara no había logrado olvidarla, pero creía que ese era su karma por haber lastimado tanto a una persona que la había amado de una forma tan bonita como Lena.

Podía vivir con el dolor de haber tenido a Lena y luego perderla, pero no tenía porque seguir soportando un matrimonio sin amor con Mike. Estaba segura que Alexa entendería la decisión y la apoyaría.

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Después de lo que había vivido con Ian, decidí empezar una nueva vida en otra ciudad y para mi gran fortuna, Sam me siguió. Ambas estábamos  hartas de vivir de recuerdos.

Yo amaba a mi hermosa hija y también Sam, ambas nos encargarmos de que a Lorena nunca le hiciera falta amor ni sintiera demasiado la ausencia de su padre. En cuanto tuvo la madurez suficiente para entender, yo le conté a Lorena sobre Ian Connor O'Brien.