Capítulo 20

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Camila O'kelli

Realmente me siento en las nubes.

No consigo entender muchas cosas pero.... Deseo seguir sintiendo esta felicidad, este cariño tan verdadero de parte de la familia Paul y de Dylan

Él es mi consuelo.

Amo estar al lado de él y de los niños. El día de hoy iremos de paseo, parecemos una familia feliz, siendo yo su verdadera madre, aunque no lo sea

—¿A dónde vamos papá? — él sonríe de medio lado, eso me mata. Si no estuvieran los niños, le quito esa ropa estorbante de encima y hacemos tantas cosas indebidas hasta quedar satisfechos.

Dylan me está a mirando divertido desde hace un buen rato.

—Sea lo que sea que te estés imaginando, si, ya sabes donde encontrarme y... Vamos a disfrutar en familia al carrusel.

Iríamos al muelle de Orsay, habían puesto unos lindos juegos, la ruleta, el carrusel con unos caballos de mar, muy tiernos

Nos habíamos estacionado, y los niños salen corriendo, yo fui tras de ellos mientras Dylan traía las cosas.. Al llegar a este, los niños se subieron a todos los juegos. Nos subimos a los carros chocones, niñas vs niños, ganando las niñas, al carrusel reímos juntos, Dylan  y yo nos mirábamos complacidos. Jugamos en las tazas giratorias, diparamos a las bombas, cogi los pescados, ganamos varios premios, la mayoría eran comida, cosa que los niños disfrutaban. De último nos subimos a la ruleta mágica, así le llama Ema, ya estando muy arriba, los fuegos artificiales se dieron a conocer.

—Ésto es bellísimo, muy mágico.

—Una noche perfecta.

—Con las personas perfectas. —ambos nos miramos enamorados, los niños gritaban con alegría

—Camila, te quedarás para siempre con nosotros ¿Verdad?, es el mayor deseo de nosotros, que seas nuestra nueva madre.

—Niños, yo...

—Canila, Mira — Dylan llama mi atención, las luces que se veían más allá de aquel mar, es hermoso, las luces, los colores, la magia, todo, estoy enamorada de esta vida, no puedo evitar llorar.

Dylan se acerca y me abraza — Shh.. No era para que te pusieras así. —se preocupa, niego.

—Es solo que yo... No quiero que esto acabe, quiero todo con ustedes, pero tengo mucho miedo que esto me sea arrebatado de las manos, tanta alegría no es grata.

Sentí los brazos de los niños, ellos también se habían unido al abrazo, les sonreí con cariño y agradecí por cada momento vivido con ellos.

Quiero guardar en mi memoria cada momento que viva con ellos y llevarlos a la tumba para morir feliz por esta nueva vida que he conocido.

.....

Fin de semana, no he visto a Dylan. No he visto a los niños. Y mucho menos a los señores.

Pero si a las señoritas y con ellas ando corriendo de un lado a otro. Probándome vestidos, maquillaje y algunos peinados que vimos y ahora me están haciendo uno.

Quiero algo natural, pero ella se quiere exceder, "lucir mi belleza sobrenatural más allá de lo inimaginable", pero es absurdo, solo es un baile, me siento cuando mi madre se excedía para que su única hija se viera mejor que sus primas. Todo era una competencia, ¡quien es mejor que quien! Pongo mis ojos en blanco.

Aunque ella siempre fueron mejores que yo

—Admito que todo es muy lindo, y ustedes quieren lo mejor, pero... — Kristel pone su mano en mis labios.

Una niñera para mis Hijos © ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora