ENTRE TUS CADENAS

★CAPÍTULO TREINTA SEIS★

LIAM

Después de la llamada de Adam me dirigí ala habitacion donde me había despertado para buscar que ponerme. Zeus me mira como si no supiera que estoy haciendo y yo me limitó a darle una palmadita en la cabeza.

Empiezo a sacar una camiseta blanca con unos jeans azules y una chaqueta de cuadros blanca con negro.

Entro al baño donde me doy una ducha de unos cuantos minutos para luego salir luego salir y ponerme la ropa que había elegido, me tomé menos de una en alistarme completamente.

Me acerco ala cama donde veo como una pequeña luz ilumina las sábanas.

Al ver más de cerca puedo ver mi teléfono con cientos de mensajes de lisa esteban y uno de Anna. Ingreso al chat de esteb para responder pero un ruido en la puerta me distrae.

- Vamonos. - Adam me mira con el mismo traje azul oscuro para darse la vuelta e irse.

Yo lo persigo hasta llegar al pasillo donde me despido de zeus y Adam me mira de reojo.

Llegamos al ascensor donde ninguno de los dos dijo ni una sola palabra hasta llegar abajo donde una recepcionista lo saluda a el pero este la ignora.

Ya Afueras habíamos Llegamos a un auto. mis ojos lo analizan un momento y puedo darme cuenta que es un Mercedes Benz. Un chico me abre la puerta del copiloto y yo asiento en forma de Gracias. En cambio Adam se da la vuelta para sentarse al volante y empezar a encender el auto.

Mi teléfono empiezo a sonar y los primero que veo es el apodo de Esteb.

Amor ❤️

- ¿Si?

- ¿Cariño,estas bien? ¿Ese idiota te a hecho algo?

Miro hacia Adam que parece haber escuchado lo que acaba de decir Esteb.

-tranquilo Esteb estoy bien.

-Esteb, hace tiempo no me decias así.

- Oh pense que te gustaba.

-estas con el ¿cierto?.

- Mi Amor...

- Dime - Su tono de voz habia cambiado a ¿enojado?

- Si, pero eso no importa ahora cariño solo quiero verte abrazarte y...

- También estoy contando las horas para estar dentro de ti.

Me sonrojo por el comentario.

- Me tengo que ir.

- Adiós amor.

Cuelgo la llamada con mis mejillas encendidas.

Miro hacia Adam que se veía completamente enojado. las venas en sus manos por apretar el volante son bastante notorias.

Trato de decir algo pero las palabras no me salen de la boca así que mejor decido mantenerme en silencio.

«De verdad amas a Esteban?» La voz en mi cabeza habla sin pensarlo y decido ignorarla convenciendo me que de verdad,lo amo.

El pensamiento no vuelve a pasar por mi cabeza en ningún momento y me alegro mucho por eso.

Los minutos pasan y llegamos a un restaurante lujoso Adam se estaciona y me ayuda a bajar abriendome la puerta. Le dedico una sonrisa de boca cerrada pero este no me corresponde. Entramos al restaurante y un mesero nos guia a una mesa con la mejor vista hacia el mar.

Adam empieza a ver el menú y yo hago lo mismo.

- ¿Que vas a pedir? - Me mira cómo si es estuviera tensó.