Ingobernable [Peter Pan] ✓

Especial Navidad #5

Los cuatro que faltan los publico mañana.
¡Feliz noche buena!

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Chica contra chicos

Peter Pan

La mañana estaba fresca y tranquila hasta que los niños decidieron retar a Hazel a mostrar sus destrezas como niña perdida.

Qué tontería. Ella era fantástica en cualquier cosa que hiciese.

-Prueba tiro de arco -uno de los niños se acercó a ella con un arco y una sola flecha.

Hazel se encogió de hombros y tomó el arco. Se preparó, colocó la flecha y tensó el arco.

-Si yo gano... -se mantuvo quieta en su lugar apuntando a una manzana que estaba en una rama de un árbol a varios metros de distancia.

-Ya sabemos, estaremos a tu servicio haciendo lo que digas -Flash se adelantó asumiendo que eso diría Hazel.

-No necesito ganar para que hagan lo que quiero -rió tensando más el arco preparándose para lanzar la flecha-. Si yo gano cada una de las pruebas... Ustedes me cantarán una canción.

Y lanzó la flecha. Quisiera decir que había fallado, pero no, podría jurar que la flecha había atravesado exactamente la mitad de la manzana, ni un centímetro más ni un centímetro menos.

Los niños dejaron salir un gran "ohhhh".

-Ahora... -Jack buscaba algo más difícil-, lucharás contra Félix.

-¡Hey! ¿Por qué yo? -se puso frente a Jack para quejarse, después de todo, Hazel ya lo había vencido.

-Sin armas -elevó sus manos con intenciones de hacer ver a la situación como algo fácil.

-Por mí está bien -aceptó la de ojos azules tan preciosos que solo podían mirarme a mí.

-Por mí también -mi mano derecha tragó grueso, no fingía muy bien.

-Pues adelante -habló el chiquillo travieso que encabezaba el reto.

-¿Ya? -abrió los ojos inspeccionando el rostro de Jack.

-Eh, si, Félix -lo miró como si fuera estúpido.

Los niños rodearon a Hazel y a Félix. El último se colocó una máscara fría, esa que casi siempre llevaba. Daban vueltas en círculos hasta que Hazel decidió dar el primer golpe, uno que Félix esquivó con agilidad.

Mi mano derecha lanzó un golpe al rostro de Hazel, sin embargo, ella giró su cabeza y con sus manos tomó el brazo del rubio para pasar por un costado provocando que su brazo quedase en su espalda. Félix se quejó, y la chica de ojos azules aprovechó para patear sus piernas y hacerlo caer sobre sus rodillas. Él atrajo su cuerpo y la hizo caer justo delante de él. Ambos se pusieron de pie al instante y esperaban el próximo golpe del otro. Félix decidió ser el primero, quiso tirarla al suelo, pero ella utilizó su pie para tirarlo a él. Cuando Félix estuvo en el suelo, Hazel colocó su pie en su pecho para evitar que se levantase.

-Creo que aquí termina -quitó su pie y le ofreció una mano al rubio, obviamente él aceptó-. ¿Alguna otra prueba en la que deba vencerlos?

-Hay una más, pero no aquí...

[...]

-¿Competencia de nado? ¿Es en serio? -mi bella chica fruncía su ceño, se veía tan adorable.

-¿Qué? ¿Tienes miedo de perder? -Jack hablaba desafiante.

-Espero que sepas cantar muy bien, Jack -sonrió traviesa preparándose para saltar al río.

-Estás contra Nick y Jasper -anunció, los nombrados quisieron quejarse-. ¿Acaso quieren cantar? -ellos negaron-. Pues entonces lo harán.

-Qué manipulador -me crucé de brazos, todos me miraron atentos.

No habia hecho notar mi presencia. Después de todo me resultaba un poco tonto lo que hacían.

-Eh, gracias -dijo dudoso, mirando a todos y luego a mí-. Bueno, prepárense, el que llega a la laguna primero, gana -los niños y Hazel se prepararon para saltar-, ¿listos? -los tres se miraron amenazantes-. ¡Ya!

Saltaron los tres al río. Los niños los seguían por tierra, yo los seguía desde arriba. Nick llevaba la delantera, no por nada lo llamaban Flash. Jasper iba detrás de Hazel, pero de un segundo a otro, Jasper y Nick nadaban solos. Hazel no había sacado la cabeza del agua. Continuaron así un poco más y Hazel no aparecía, ya me estaba preocupando. Al llegar a la laguna, nos encontramos con Hazel sentada en la orilla.

-¿Cómo lo hiciste? No valía desaparecer -se quejó Jack acercándose a ella.

-No desaparecí, se te olvidó que soy una sirena, duh -se burló mostrándole la lengua.

-Pero, no...

-Perdimos, Jack -aceptó Félix dándole palmadas en la espalda.

-Bueno, ¿qué canción prefiero?... -fingió pensar un momento-, ¿villancicos o la antigua canción de cuna de las hadas?

-La de las hadas se escucha buena -dijo Rowan mientras se rascaba el cuello.

Jack le propinó un golpe en la cabeza.

-Ninguna, idiota, Pan no permitirá esto, ¿verdad? -me miró suplicándome con la mirada.

-Lo siento, chicos, pero perdieron -me excusé intentando ocultar mi sonrisa.

Todos comenzaron a quejarse. Hazel reía a carcajadas. Y yo solo la observaba maravillado.