Destino de Sangre🧛❤️🧛💜💚(TaeKook).

Capítulo 12: Pérdida.

Aquella noche había sido bastante intranquila, Taehyung soñó varias pesadillas que lo mantuvieron despertando regularmente. Sin embargo el mortal estaba acostumbrado a dormir de esa manera. Por su lado Jungkook se había quedado toda la noche fuera de la ventana de V, después de hablar con su padre para que les diera la mejor opción de matar, se había ido para allá. Estuvo afuera de su cuarto pensando en lo que debía hacer, miraba la daga de oro que Seokjin les había dado a cada uno. Los vampiros no querían escuchar los gritos de dolor de aquellos mortales, y lo mejor que podía hacer era enterrar esa daga en el corazón del humano o en su yugular. Aquellos pensamientos tuvieron a Jungkook con la mente perdida hasta el amanecer.

El sol apenas comenzaba a salir, Jk decidió regresar al interior del castillo. Si Taehyung se despertaba y lo veía ahí, seguramente tendría problemas. Entró por otra ventana a su dormitorio. Se dio un baño antes de ir a desayunar, no quiso bajar a las termas pues tenía el presentimiento que Taehyung iba a estar ahí.

Mientras que los mortales también comenzaban su día, cada uno de ellos pensado en lo que podía ser un ataque de los inmortales por la noche. Taehyung se sentía con algo de sueño, después de todo las pesadillas no lo habían dejado descansar bien. Salió de la habitación y bajó para ir a las termas, no sabía porque lo hacía, pero por dentro deseaba ver a Jungkook. Caminó entonces por el pasillo hacia el baño del fondo, al entrar vio una silueta dentro del agua. Se acercó un poco viendo que no era su vampiro.

—¿Yoongi?— le dijo Tae entrando al lugar—. ¿Qué haces tan temprano aquí?.

—Cuando entres al agua te lo diré— dijo el chico con rostro serio.

Taehyung frunció el ceño algo extrañado por el tono que usó su primo, seguramente algo estaba pasando. Se sacó las prendas y luego fue al agua. Al entrar se puso frente a Yoongi.

—¿Se puede saber en qué estás pensando?— le preguntó Yoongi con rostro serio.

—¿A qué te refieres exactamente?— le dijo Tae.

—Te vi besando al mortal.

Kim sintió que el estómago se le subía a la boca y sus oídos pitaban un poco, le dio una taquicardia de los puros nervios. ¿Qué le podía decir?, fue claro entonces que la noche anterior fue él quien los vio.

—Yo— Taehyung estaba en blanco—. No lo sé. No sé porque lo hice, no tengo una explicación coherente a mí comportamiento, es primera vez que me pasa esto.

—Es primera vez que te veo interesado en un vampiro— le dijo Yoongi, Tae le iba a responder pero no alcanzó a hablar—. Y no te culpo, ellos no tienen esa mirada de asesinos, se ven limpios— hizo una pequeña sonrisa al recordar el rostro de Jimin—. Pero debemos matarlos si ellos vienen por nosotros.

Tae miró a Yoongi, el chico vio esos ojos que sabían que no quería hacerlo.

—No me veas así— le dijo Yoongi—. Son las órdenes de tú padre.

—¿Y si nos vamos a medianoche?— dijo Taehyung.

—¿Escaparnos dices?. ¿Crees qué funcione?.

—No lo sé, pero papá también quiere evitar una pelea porque sabe que son fuertes— le dijo Tae.

Yoongi lo pensó un momento.

—Bien, tal vez podríamos hablarlo y cambiar de planes.

Tae asintió, terminaron de bañarse y luego salieron de las termas, Yoongi trataría de hablarlo con su hermano y Taehyung con su padre.

Mientras que los inmortales se encontraban en la cocina preparando el desayuno para los hombres. Jungkook miraba a Jimin que se veía igual de disperso que él, seguramente su hermano estaba pensando en lo mismo. Esa era la noche que debían matar a los mortales, Seokjin les había dicho que las Buran junto a otros aliados estaban muy cerca de encontrar la manera de entrar al Bosque de las Tormentas, por lo que debían darse prisa para poder huir.

En un momento el mayor los dejó solos, Jungkook se acercó a Jimin.

—¿Qué tan de cierto es lo de las Buran?. Papá siempre dice que ellas vendrán y no es así— le dijo Jk a su hermano—. Tampoco sabemos si con esas espadas volveremos a nuestro mundo, nuestras tierras debieron caer en manos enemigas. Llevamos más de un siglo aquí.

Jimin tomó al menor de un brazo y lo miró a los ojos.

—El Reino de Antíope no ha caído— le dijo molesto—. Nuestro padre volverá a ser el Rey, la sangre valeriana no se ha terminado. Aún tenemos aliados que cuidan nuestras fronteras, y las espadas de Estia nos ayudarán a ganar.

Jungkook asintió sin decir nada, después de todo su hermano tenía razón en lo que decía y él como príncipe menor debía hacer caso. Terminaron de hacer el desayuno y fueron al comedor, ahí estaban los mortales.

—Buenos días— les saludaron los hermanos vampiros.

—Buenos días— le respondieron los otros.

Jungkook no pudo evitar mirar a Taehyung, éste lo estaba observando desde que había entrado. Los vampiros dejaron el desayuno y se sentaron para beber de sus copas. En eso aparecía Seokjin, saludó a todos y se sentó.

—Al fin terminaremos hoy— le dijo Namjoon al vampiro mayor.

—Sí, quedan pocos animales extraviados seguramente están cerca— dijo Jin.

Jimin miró a Suga un par de veces, éste también le devolvía las miradas.

Terminaron de desayunar, Namjoon siguió a Seokjin a las cercas mientras los chicos iban nuevamente por los andaluz. Se dividieron en los mismos equipos que la vez anterior, Yoongi le dio una mirada a su primo antes de irse.

Taehyung se subió al caballo con Jungkook y se afirmó firme de sus caderas. Se alejaron del resto hacia otro camino que no habían recorrido anteriormente.

—No te vi en las termas— le dijo Tae provocando que el vampiro se pusiera nervioso.

—Estaba en mi cuarto meditando, así que me bañé ahí— le contestó Jungkook.

—¿Meditas?.

—¿Acaso no puedo?— le dijo Jk.

—Claro que puedes— dijo Taehyung—. Sólo que no es usual verlo en los vampiros.

—He vivido por largos años V, necesito alguna forma de calmar mi mente y poder seguir viviendo sin volverme loco— le dijo Jungkook.

—¿Has pasado por mucho?— le preguntó curioso Taehyung.

Jungkook se quedó callado pensado en algo.

—Lo más doloroso de ser un inmortal es cuando pierdes a la persona que amas— la voz de Jk se escuchó triste—. Tuve una novia por más de un siglo, pero cuando atacaron nuestras tierras la mataron. Desde esa vez nunca más volví a enamorarme.

Tae guardo silencio por un momento, luego miró al vampiro desde atrás.

—¿Cómo se llamaba?.

—Iu— le respondió Jk—. Incluso nos íbamos a casar.

—De verdad lo lamento— le dijo el mortal.

Jungkook lo miró de reojos.

—¿Tú nunca te enamoraste V?.

—No, yo sólo nací para luchar, jamás tuve tiempo de tener una mujer fija. Siempre fueron simples aventuras— le dijo Taehyung sin darse cuenta de lo que decía.

Las palabras del mortal hicieron eco en los oídos de Jk. ¿Nacido sólo para luchar?, ¿no se supone qué eran sólo granjeros?. Comprendió entonces que su padre tenía razón y que debían matar a esos hombres, pero por alguna razón le seguía dando pesar tener que deshacerse de ellos.
Continuaron su camino en busca de los animales que quedaban, sin sospechar que esa noche sería determinante para todos.

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