Taehyung había logrado escabullirse por los pasillos sin ser visto. Llegó al piso de las habitaciones, pero antes de ir a la suya fue con Namjoon. Golpeó la puerta esperando que respondiera.—¡Quién!— se escuchó desde adentro.
—¡Tae!— le gritó el joven, pues la puerta y paredes eran gruesas.
Entonces vio como la puerta se abría rápidamente para dejarlo entrar.
—¿Te escapaste?— le preguntó Namjoon—. Creo que fui claro al decir que no se movieran hasta que les avisara.
—No puedo estar tan tranquilo como tú papá— le dijo Taehyung sentándose en un sillón—. Necesito saber la verdad acerca de estas espadas— mostró la suya.
—¿A qué te refieres exactamente?. Sabes que fueron herencia de nuestros antepasados para liquidar a los vampiros— le respondió Nam con el ceño fruncido.
—¿Y quién te contó esa historia?. ¿Tú padre?, o su padre antes que él?— le cuestionó Tae.
Namjoon miró a su hijo, sabía que aquellas preguntas no iban lanzadas porque sí.
—¿Alguien te ha dicho algo?— le preguntó Nam con curiosidad.
—Vagando por el castillo me encontré con el salón que alberga a la Oráculo de los vampiros— comenzó a decirle Taehyung, su padre abrió los ojos como plato—. Ella me llamó Caballero Licano, guardián de Estia. Dijo que las espadas fueron creadas con sangre de Licántropos y que nuestro linaje debían proteger a la realeza de los inmortales. Pero la historia fue cambiada por violencia y muerte.
—¡Lo qué ella te ha dicho es mentira!. Mí padre, abuelo y bisabuelo siempre fueron honestos, la verdad de los Kim es ser los Cazadores de Vampiros, no sus salvadores— le dijo Namjoon.
Taehyung miró a su padre, comprendió entonces que no lo haría cambiar de opinión, al menos él no.
—Yo no creeré todos esos cuentos— el chico se levantó del sillón y se dirigió a la salida—. Tal vez nuestro linaje fue corrompido en algún punto, porque en los inicios tenían un pacto que respetaban— abrió la puerta y salió, cerró tras de si.
Miró a ambos lados del pasillo, quería ir con Yoongi pero la hora de la cena se acercaba y debía ir a la habitación. Decidió regresar al dormitorio, después de todo su hermoso vampiro le llevaría la comida y luego le daría el postre. Se lamió los labios al recordar a ese inmortal de ojos oscuros.
—Maldita sea, ¿cómo puede ser tan lindo?. Es como si estuviera hechizado por él— se dijo Tae mientras abría su dormitorio.
Cerró sin seguro. Caminó al interior, se sacó algunas ropas y fue al baño, dentro había una bañera grande en medio del lugar, además del inodoro y el lavamos de cristal.
—Bien, me daré un baño mientras llega la cena.
Entró y comenzó a sacarse el resto de las ropas, las dejó sobre una pequeña silla que ahí había. Fue hasta la bañera y la llenó, puso su espada a un lado y se recostó dentro en las tibias aguas. Cerró los ojos pensando en lo que fueron las palabras de la Oráculo, y el porqué su padre seguía negando la verdad. Aunque si era sincero tal vez realmente Namjoon no supiera nada y sólo trataba de honrar la memoria de su familia.
—Ser hijo único es un problema— cerró los ojos tratando de ordenar un poco su mente.
Estaba entrando en un estado de relajación cuando de pronto escuchó la puerta del baño abrirse.
—Deberías ser más cauto la próxima vez y cerrar con seguro— le dijo Jungkook mientras entraba al lugar.
—Lo dejé sin seguro porque sabía que vendrías— sonrió Taehyung para luego abrir los ojos y ver a ese hermoso vampiro—. Supongo que cerraste con seguro.
—Por supuesto— le dijo Jk viendo ese atractivo rostro. Sus orbes bajaron por el cuerpo del mortal disfrutando de la vista, hizo un sonrisa ladina.
—Podríamos tener el postre antes de la cena— le dijo Tae con esa mirada lujuriosa.
Jungkook no dijo nada, y en silencio comenzó a sacarse las ropas mientras se perdía nuevamente en la mirada de Taehyung, el mortal se mordió suavemente el labio inferior absorto en esa hermosa imagen.
—¿Qué te gusta de mí?— le preguntó con un deje de coquetería el vampiro terminando de desnudarse.
—Todo, me tienes embrujado Jungkook— le respondió Tae con voz de deseo.
Para el inmortal fue suficiente esa respuesta, después de todo no se conocían en lo absoluto, además que eran supuestos enemigos. Sin embargo las cosas hace rato habían tomado otro rumbo, al menos para ellos dos que estaban en su burbuja de fantasía. Jk caminó a la bañera y se metió dentro, abrió las piernas y se acomodó sobre el regazo de Tae, subió sus brazos al cuello de éste. El mortal lo rodeó por las caderas apretándole las nalgas.
—Sabes que no deberíamos estar haciendo esto— le susurró Jungkook sobre sus labios, le dio un suave beso para luego verlo a los ojos.
—El deseo de tenernos es lo que nos mantiene unidos y nos atrae como imanes, por mí parte no quiero alejarme de ti— le dijo Taehyung subiendo su mano por la espalda del vampiro—. No sé que quieras tú.
Jungkook miró esos profundos ojos y luego bajó a los labios del mortal.
—Yo sólo quiero estar contigo— le dijo el inmortal besándolo.
Taehyung cerró los ojos perdiéndose en un profundo y lujurioso beso, sus lenguas se entrelazaban probando cada centímetro de la boca ajena. Las manos de Tae viajaban por esa húmeda piel mientras su miembro comenzaba a endurecer. Jungkook movía sus caderas rozando con sus nalgas el sexo del mortal, sus cuerpos pedían a gritos el contacto ajeno.
Jk elevó un poco sus caderas y con la ayuda de Tae bajó sobre el falo de éste. El mortal sintió las cálidas paredes apretar su sexo.
—Ah— un gemido salió de los labios del vampiro cortando el beso, sus miradas chocaron con intensidad—. Ahh.
Taehyung lo tomó con fuerza mientras Jk movía sus caderas, el mortal besó con desesperación el pecho del vampiro dejando notorias marcas de mordidas en la piel. Los gemidos de Jungkook salían como una hermosa melodía, su cuerpo estaba entregado a los movimientos de placer que le daba Tae.
El mortal sentía que perdía su alma en un abismo sin fondo, pero lejos de eso también podía sentir que su corazón ardía de pasión. Estaba dispuesto a pasar el infierno que se desataría, y todo por estar con el príncipe de Antíope.
—¡Ahh!— las caderas de Jungkook se movieron más rápido al sentir su punto sensible ser duramente embestido—. ¡Hah!. ¡Ah!.
Entre los movimientos el agua caía por el borde de la bañera mojando el piso, a ninguno le importaba nada más que disfrutar del otro como si fuera la última vez. Vivir bajo la incertidumbre de estar ocultos y en constantes controversias los mantenía en una alerta constante, más ahora que estaban en medio de un amor prohibido.
Taehyung tomó firme de las caderas al vampiro mientras lo besaba con desesperación, se sentía como si respirar dependiera de él. Jungkook por su parte no era ajeno a esos fuertes sentimientos que comenzaban a despertar en él, su cuerpo y mente reaccionaban a cada caricia del mortal.
—Jungkookie— susurró Tae sobre los labios rojizos mientras le jalaba el cabello hacia atrás y lo embestía con fuerza.
—¡Tete!— alcanzó a gritar Jk eyaculando, sintió su interior cálido con el líquido de Taehyung.
El mortal lo atrajo más a su cuerpo sintiendo ese rico aroma a naturaleza, Jungkook no dijo nada y también lo abrazó con fuerza. Se quedaron así por un tiempo hasta que decidieron salir del agua.
Después de secarse y vestirse, Jk acompañó a Tae a cenar. Como le había dicho se quedaría con él esa noche. Además que tenían pendiente hablar con respecto a lo que le dijo la Oráculo.
GRACIAS POR LEER💜😘
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Destino de Sangre🧛❤️🧛💜💚(TaeKook).
FanfictionEn el siglo XIX las leyendas de los inmortales se escuchaba por cada rincón de la tierra. Los nacidos del legado de Cazadores debían salir en busca de aquellas criaturas que vivían de la sangre humana. Cada noche de luna llena los vampiros recorrían...