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— Ven. — contestó Sunghoon sentandose en el sofá.

Me senté a su lado y apoyé mi cabeza en su regazo mientras miraba su barbilla y sus lindas pestañas desde abajo.

— ¿Que pasa?

— ¿Consideras que somos novios?

— bueno... No es algo que yo esperaba pero no puedo quejarme. — contesté. — después de todo, nos gustamos, ¿Correcto?

— Si... — Murmuró sin ver a Tn.

Está nervioso.

¿Porque?

— Hoy conocí a tus padres. — Murmuró.

— Sunghoon, no entiendo que está pasando. — contesté sentandome a su lado y lo miré preocupada.

— Yo... Quiero contarte de mi familia...

— Y hazlo, ¿Porque te preocupa?

Sunghoon desvió la mirada y echó una risa mientras negaba con la cabeza.

— Mis papás no viven aquí. — contestó soltando un suspiro con una sonrisa.

— Soy hijo único y conozco a Keiser desde que bueno, lo adopté.

¿Que? Me siento confundida.

— Si fuí a campeonatos y lo dejé únicamente porque papá y mamá ya no podían pagarlos y bueno, aveces temo de los ruidos fuertes porque de niño se cayó un espejo. — comenzó a reír — y salí corriendo.

— pero...

— No tengo una vida interesante, es solo eso. — contestó.

— ¿Porque me cuentas esto? Sunghoon...

— Solo quiero asegurarme de que sabes quién soy. — contestó despeinado el cabello de Tn.

Alze mis cejas aún sin comprender y sonreí con falsedad por el movimiento de su mano.

— Ya sé quién eres, no te preocupes. — contesté dejando un corto beso en sus labios.

Me senté en sus piernas aún pensando y acaricié su cabello.

— ¿Porque te preocupas tanto en que sepa tu vida normal? — pregunté.

— Es que... — ríe — Bueno, pensé que debía decirlo. — contestó Sunghoon acariciando el muslo de Tn.

Mentira.

Volví a sonreírle y apoyé mi cabeza en su pecho mientras miraba un punto fijo.

¿Porque la necesidad de mentir?
¿Porque no quiere decirme?

Primero, me dijo que Keiser era de alguien más y ahora

Salí de mis pensamientos al sentir las caricias de las manos de Sunghoon en mi espalda.

— ¿En qué piensas? — preguntó Sunghoon bajando su mano al trasero de Tn.

— En nada.

— ¿Nada? — preguntó Sunghoon.

— Solo que...

Sunghoon me obligó a mirarlo y pasó su dedo lentamente por mi pierna...

Así logrando distraerme en cuestión de segundos.

— ¿Solo que? — preguntó serio.

— ¿Estás nerviosa? — preguntó primero.

Reí junto con un sentimiento de nervios y confusión mientras me enderezaba.

𝐏𝐨𝐥𝐚𝐫𝐨𝐢𝐝 𝐋𝐨𝐯𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora