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Corrí a la habitación una vez que ví que Kento se alejaba y me metí en la cama para fingir estar durmiendo.

Segundos después, Sunghoon entró guardando aquel sobre en su abrigo y se acercó a la camilla en silencio.

— ¿Estás dormida? — preguntó en un susurro.

Seguí tratando de fingir estar dormida hasta oír su interesante pregunta.

— ¿Quieres ir a comer una hamburguesa? — preguntó con una sonrisa al notar mi mala actuación.

Abrí mis ojos y sonreí para sentarme con su ayuda.

— Aún no tengo un auto como los demás chicos pero prometo que cuando lo tenga, te llevaré a dónde quieras ir. — respondió colocando los zapatos a Tn.

Reí ante eso y mientras veía como ataba los cordones de mis zapatos, decidí acariciar su suave cabello con lentitud.

Pisé el suelo y tomé mi abrigo para salir del hospital y encontrar un taxi.

— Primero vayamos a una farmacia a comprar las vitaminas...

Cuando llegamos a la farmacia, le dije al taxista que esperara por lo que me dirigí junto a Sunghoon al pasillo de vitaminas y empecé a consultar a uno de los trabajadores del lugar.

Aquella mujer me recomendó 3 diferentes frascos de vitaminas y luego caminando hacia la fila, Sunghoon se acercó a los paquetes de preservativo.

— ¿No tienes? — pregunté.

— No pero tampoco sabía que habían diferentes, quiero decir, mira este preservativo con sabor a fresa.

Sunghoon me miró confundido y eché a reír por aquel invento estúpido, miré otras cajas de preservativo y le tiré uno a Sunghoon para comenzar a pagar las cosas.

— Compraste la caja de 12, había una más pequeña. — contestó Sunghoon abriendo la puerta.

— ¿Y que tiene? Tendremos que aprovechar.

Sunghoon echó una pequeña risa arrogante por lo bajo y luego nos dirigimos hacia la playa donde comenzamos a caminar cerca de los puestos de comida que abrían hasta tarde.

Allí pedimos unas hamburguesas, con papas y dos botella de coca cola.

Nos sentamos en la arena con la comida y comenzamos a disfrutar.

— ¿Realmente podrás comerte todo eso? — pregunté con curiosidad. — Incluso tu boca sabrá y olerá a cebolla.

— Habló la que pidió que hicieran a mickey mouse.

— Él solo pidió, imagina que es la primera vez que oígo algo así, además mira tu hamburguesa. — contesté.

 — contesté

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𝐏𝐨𝐥𝐚𝐫𝐨𝐢𝐝 𝐋𝐨𝐯𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora