¹⁴

1.8K 187 45
                                    

Me levanté del sofá y caminé hacia el baño de Sunghoon donde lavé mi rostro y enjuague mi boca.

— estoy tan mal... Dios, se sintió real. — me Susurré.

Me aleje soltando un último suspiro y regresé a la sala donde me senté en el sofá acariciando a Keiser.

— ¿Te molestaría si me doy una ducha rápida?

— No, claro que no. — respondí. — Ya me iba de todas formas.

— ¿No irás a la escuela? — preguntó Sunghoon.

— Si, iré. — Murmuré.

Sunghoon se despidió y se metió al baño pero justo cuando estaba a punto de irme, logré ver un cuadro de un niño.

Una linda fotografía de Sunghoon.

La a miré con ternura y noté que atrás de éste estaba escrito el año

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La a miré con ternura y noté que atrás de éste estaba escrito el año.

— Sunghoon en sus 9 años patinando por primera vez. — Susurré leyendo.

Volví a sonreír con ternura y dejé la fotografía en su lugar para notar que dentro de ese marco había otra imagen.

Miré al pasillo asegurando de que Sunghoon siguiera duchandose para abrir el marco y tomar aquella foto escondida.

" Sunghoon a sus 11 años después de ganar su primer medalla de rugby "

Miré ambas fotos comparando los años y sus expresiones faciales para guardar todo con pena.

Podía llegar a pensar que Sunghoon sufrió presión por aquel campeonato fallido desde sus 11 años.

Si notaba la esperanza e ilusión que tenía Sunghoon al jugar, podía ver qué realmente le gustaba y lo disfrutaba pero con la diferencia de que no había presión por parte de sus padres aún desconocidos.

Me despedí de Keiser con un pequeño beso y volví a mi departamento.

Para cuándo llegué, mis papás estaban desayunando y esperando mi llegada con unas deliciosas tortas.

𝐏𝐨𝐥𝐚𝐫𝐨𝐢𝐝 𝐋𝐨𝐯𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora