Tuve la peor crisis de mi corta vida ese día. Todo se había juntado, mi padre me había gritado por alguna tontería. Mi madre estaba frustrada porque había vuelto a subir de peso y se desquitaba conmigo. Mi abuelo nos había dado un susto y estaba en el hospital. Me había ido mal en un examen de Química y tenía la regla. Todo se había juntado. Pero tu madre estaba ahí.
–He preparado cupcakes de vainilla esta mañana. Con chispas de chocolate y crema pastelera ¿Quieres uno, Luisiana?
–Estaría...estaría bien, sí.
Ese día probé el mejor cupcake de mi vida. Acompañado de tu madre que durante esos años fue la mejor figura materna que pude tener. Me ayudaba en los deberes, me decía lo bonita que me veía, me daba consejos para la vida y me ayudaba en mis peores momentos, me dio ese diagnóstico que tanto necesitaba y esas charlas cada dos semanas que durante dos años me ayudaron a seguir. Tu madre fue la mía también. Y ella, al igual que tu, cambió mi vida.
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Lúan
Romance¿Puede una historia de amor jamás tener final? ¿Cuál es el límite? Esta es la historia de Lu, la chica que deseaba ser querida. Y de Lúan, el chico que la quiso, aunque quizás no de la manera correcta. Porque en la vida, siempre hay personas que te...