En el upside down, Nancy, Robin y Steve aprovecharon cuando Vecna se distrajo con Rachel, -aunque ellos no lo sabían-, para lograr salir del agarre de las enredaderas.
—Vamos—dijo Steve y por mero instinto, estiró su mano y agarro la de Robin. Nadie dijo nada. Pero Nancy miró el gesto con detenimiento.—Creo que esta funcionado, él esta concentrado en Max—dijo Robin, tratando de encontrar la respuesta lógica del porqué los dejó ir.
Caminaron lo más rápido que podían, sin intenciones de hacer mucho ruido, y con mucho cuidado de no pisar una enredadera.
Llegaron al ático, se detuvieron en las escaleras, podían escuchar los corazones los unos a los otros, estaban asustados y nerviosos. De esto dependía qué Max siguiera viva y también podía costarles la vida. No tenían idea de como iba a ser el regreso al tráiler y de sí podían matarlo. Estaban dando un tiro a ciegas pero iban a confiar en eso.
Nancy exhaló y asintió. Giró a mirar a los otros dos detrás de ella.
—Podemos con esto. Vamos a matar a ese monstruo.—afirmó. Steve miró a Robin detrás de él, y los ojos azules de ésta se clavaron en él con intensidad. Dio un respiro hondo y asintió, confiando en que podían hacerlo.
—Yo voy primero—habló Steve, y Nancy se hizo a un costado para que él pasara. Sí había algo ahí arriba, pensaban qué así podían ganarle, tenían que reaccionar rápido.—Cualquier cosa, corran de vuelta al tráiler, ¿okay?
Las otras dos lo miraron, y agacharon la cabeza levemente, sin querer mirarlo a la cara, pero asintieron levemente, fue casi inexistente, pero entendían él punto.
Steve inhaló y exhaló por la nariz, preparándose para poder estar alerta, y en su caso, tener que pelear. Los tres tenían el peor escenario en sus cabezas, en el qué no salían de ahí ninguno de ellos, y con ello, vendrían las muertes de todos los demás. Tenían que detenerlo.
Subieron las escaleras con delicadeza, para hacer el menor ruido posible. Y en cuánto Steve logró subir, les hizo señas de que continuarán y él siguió caminando, acercándose a aquel gran monstruo qué los seguía atormentando.
Nancy y Robin subieron detrás de él, preparadas para cualquier cosa. Se acercaron a Steve, todos a lado del otro, con la Wheeler en medio de ambos. El plan era ese.
Nancy miró a la derecha, hacia Steve y asintió, giró a la izquierda y le asintió a Robin. Ambos tomaron sus botellas llenas de gasolina, y las encendieron con un encendedor. Casi al mismo tiempo.
Y en cuánto el calcetín qué salía de la boca de las botellas se prendió en fuego totalmente, las aventaron hacia él, que estaba de espaldas, levitando un poco, con los ojos cerrados, dentro de la mente de Max Mayfield.
Vecna se encendió en fuego, y eso lo hizo salir de la mente de Max, las enredaderas qué lo unían a la casa y lo elevaban del suelo, se quemaron completamente. Cayó al piso y se puso de pie de inmediato, mirándolos fijamente.
Robin tomó otro botella, y la encendió de la misma forma, aventandola con fuerza hacia él, causando una pequeña explosión en su cuerpo y haciéndolo caer en el proceso.
Pero Vecna jamás iba a caer así de fácil.
Nancy se acercó, con la escopeta en las manos, lista para disparar. Dio otro paso al frente y apuntó. Un segundo después, la bala salió de la boca de la escopeta, con mucho más fuerza de la qué lo haría normalmente, debido a las modificaciones ilegales qué entre ella y Rachel habían hecho. Le dió en el hombro.
Dio otro paso más cerca y Vecna lo retrocedió por el impacto de la bala en él. La Wheeler no le dio tiempo de que se recuperará, volvió a disparar, dándole en el otro hombro.
Vecna volvió a retroceder, quedando muy cerca de la ventana del ático. Nancy se acercó más, dispuesta a dispararle cien veces si era necesario.
Apuntó una vez más, recordando algo que Rachel había dicho como broma antes de que cruzaran el portal, y se atrevió a decirlo en voz alta;—Los monstruos sólo mueren cuando les disparas en la cabeza.
Hizo contacto visual con Vecna por un segundo, pero ambos sabían lo que era eso. Vecna sabía que Nancy tenía la voluntad de matarlo, y lo peor era qué ella podría hacerlo. La Wheeler apuntó más arriba, subiendo de su estómago hacia la cabeza. Ahí era donde tenía que dirigirse el último disparo.
Y disparó, sin pensarselo mucho. Creía que por alguna razón había recordado aquello qué la segunda Buckley había dicho, y aunque fuera coincidencia, todos lo querían muerto.
Vecna cayó por la ventana, rompiendola en el proceso, y luego escucharon el estruendo en el piso. Se acercó a mirar para abajo, observando su cuerpo en el asfalto, mirando hacia arriba.
—Disparale de nuevo—ordenó Robin, y los otros dos la miraron confundidos. Ya estaba muerto.—Disparale de nuevo, hay que asegurarnos qué éste maldito no se levanté.
Nancy lo miró, y volvió a apuntar, se agachó tanto como pudo, para estar lo más cerca que podía. La desventaja de la escopeta era ese, y Jason se lo había dicho bien.
Disparó, una última vez, observa el cuerpo moverse por el impacto, pero solamente había sido la reacción normal del cuerpo, de un cuerpo de alguien que ya estaba muerto.
Lo miraron un segundo, y entonces se dirigieron corriendo hacía las escaleras, bajando lo más rápido que podían.
Salieron de la casa y aún lo vieron ahí, tirado, con un maldito agujero en la cabeza. Se acercaron al cuerpo.
Robin no era la mayor fan de Vecna, en realidad, le daba mucho miedo, pero aún así, le dio una patada al cuerpo tratando de ver si reaccionaba. Steve frunció el ceño mientras la miraba pero después, decidió qué no era lo más raro de hacer, así que simplemente se unió a ella y le dio otra patada en el torso, con todo la preocupación qué le había hecho pasar convertido en odio.
—Parece que ya esta muerto.—dijo Nancy.—¿Nos vamos?
—Sí, no estaba seguro de dejar su cuerpo aquí pero, ¿Qué deberíamos hacer?
—Tenemos que regresar con todos, no sabemos sí los murciélagos vendrán por nosotros—opinó Robin, y los otros dos estuvieron de acuerdo
Nancy se acercó al cuerpo de Vecna, aquel cuerpo inactivo y sin aparente respiración. Parecía que definitivamente estaba muerto. La Wheeler lo miró a la cara, inexpresiva.
—Te dije que iba a matarte.—lo dijo firme, odiando cada maldito centímetro del cuerpo de Vecna frente a ella. La había hecho sufrir desde hace mucho tiempo, desde que había matado a Barb, y ahora, que la amenazaba con matar a todo Hawkins, a toda su familia. Aquella promesa de matarlo se la había hecho a sí misma, y no había poder en la tierra qué la iba a detener de cumplirla. Y ya lo había hecho.
ESTÁS LEYENDO
Rachel Buckley.
FanfictionCuando la hermana mayor de Robin, Rachel Buckley, regresa a Hawkins, y Billy Hargrove queda irremediablemente atraído por ella. Pero no era el único en sentirse de esa forma. -Contenido sexual y explícito. -Traumas. -Violencia.