... vuelven los colores

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JEON JUNGKOOK

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Ya frente al portón del gimnasio, Jungkook consideró qué tan estúpido era lo que estaba por hacer. ¿Qué hacía un chico en silla de ruedas en un entrenamiento convencional de baloncesto? Peor, con el mismo equipo en el que jugaba antes del accidente... ¿Qué clase de mal chiste era ese? ¿Y por qué se lo había hecho a sí mismo? ¿Acaso buscaba maltratarse inconscientemente?

Sólo contemplaba la entrada como si de una bestia se tratase. No podía acercarse. No sabía si podía enfrentar eso solo. No podía siquiera empujar la barrera que lo mantenía fuera. Era de esas pequeñas cosas que parecían increiblemente sencillas en teoría, pero en la práctica sería más fácil saltar de un octavo piso y caer bien. La cantidad de recuerdos que le llegaban y la lejanía que sentía con el chico activo que era antes era abrumadora. Aún con toda la ayuda del mundo, Jungkook dudaba ser capaz de sentirse completo de nuevo.

-- No podrás vencerle.

Jungkook se sobresaltó ante la voz detrás de él. Había salido de la nada.

-- ¡¿E-eh?! ¿qué?

-- Te juro que las puertas no pierden peleas de miradas, JK -- bromeó Han entrando en su campo de visión.

Jungkook rio por lo bajo, con el nerviosismo palpitando en su pecho y la extraña sensación de que lo habían descubierto haciendo algo indebido. Antes de que su hyung pudiera decir algo más, cambió de tema.

-- ¿No estás algo tarde para ser el capitán?

-- Nah -- dijo el mayor con un gesto de mano en el aire -- La realeza no llega tarde. Los demás aparecen muy temprano.

-- Ajá -- respondió Jungkook divertido.

-- Ya fuera de joda, quien sí tiene esa preferencia es Yoongi. -- dijo Han pasando por la puerta y dejándola abierta para que Jungkook lo siguiera.

...tan simple. Jungkook se aferró a la tranquilidad de Han para mantener a raya su miedo. Agradecía la conversación.

-- ¿De verdad?

-- ¡Sí! El cabrón llega cuando se le canta y el entrenador no le dice nada porque se cansó de echarle bronca en vano -- bufó.

Jungkook soltó una ligera carcajada. -- Al parecer ya se rindió.

Las cosas no habían cambiado tanto. Todos se desenvolvían con naturalidad alrededor. Las reglas seguían siendo las mismas. Las personas que conocía también. Pronto se acercaron Jeong-In y  Jiho a saludarlo. Se sentaron en las gradería a platicar en lo que llegaba el resto. Hablaron de la temporada que les venía encima. El plan era pasar las regionales sin problemas y sacar sus mejores cartas para las eliminatorias a nivel nacional. Jungkook se sabía la historia y la estrategia. Por tanto se vio libre de opinar y charlar con ellos como si siguiera siendo parte de la ecuación.

Al rato, llegaron los de danza y Hobi, que se movía en todos los círculos sociales posibles, se unió a ellos en la charla. Parecía que trataba de pasarle sus buenas energías a Jungkook. Él lo agradecía, pues aunque sus nervios seguían arremolinándose en su pecho, había llegado a olvidar su situación por un buen rato. Aunque no hablara mucho, se sentía cómodo.

Y, mientras tanto, pienso en ti  [Yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora