XXIII

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Abrí mis ojos.
El cielo nocturno, esta vez, carece de estrellas. Hay muy pocas en aquella capa oscura que tengo sobre mi.
Ya no me siento cansada.
Suspiré. Pero, así como no me siento cansada, la opresión en el pecho, indicándome que algo anda mal, no me deja en paz.

Algo malo sucedió o está a punto de suceder.
Me siento para ver mi alrededor. Así que Edgeshot me trajo al techo de un edificio alejado de la guarida de la Liga para que no me pudieran atrapar.

Mi tranquilidad se vio perturbada a los pocos segundos porque un aura oscura me envolvió completamente.

— Qué idiota — murmuré —. Me va a llevar directamente a él.

No tuve que forcejear, esa cosa me llevó a quedar frente a él.
Por desgracia, llegué en el momento menos oportuno.

All Might está peleando contra AFO y me encuentro en medio de la batalla.

— ¡Maldito! — exclamé molesta, dándome media vuelta para ver a AFO.

— ¡Yagami, llévate a Bakugo! — ordenó All Might que se acercaba a mi dirección.

Acaté su orden y me alejé corriendo antes que las ondas de sus golpes me logren atrapar.
Pero fue demasiado tarde, la gran ventisca golpeó mi cuerpo y salí volando llevándome de paso a otra persona hasta que ambos nos estrellamos en los escombros.

— ¡Bakugo! — exclamé, aún con la cabeza dándome vueltas.

— ¡Hey, hey, ¿a dónde vas?! — sujetó mis antebrazos con fuerza.

— Suel... — me giré para verlo a la cara. En sus ojos aviva una llamarada que sólo con verme se enciende — ¡Dabi, déjame!

Le di un rodillazo en el abdomen. Sólo así me soltó porque logré sofocarlo.
Los villanos había rodeado a Bakugo, así que me lancé a ellos.

Llegué a darle una patada en la espalda a Twice y una estela a la chica rubia que se ve que es peligrosa.

— ¡Dabi, mata a esta hija de perra! — exclamó Shigaraki más molesto que antes.

— ¡Los voy a llevar al infierno, bastado! — exclamé y una onda salió de mis pies.

A juzgar por la mirada de asombro de Dabi me da a entender que mi Quirk se está saliendo de control, como la última vez que eso sucedió. Yo era una niña y estaba con Touya...

No me importa si vuelve a pasar. Haré lo que sea para que la sociedad, los alumnos incluido All Might, no sigan siendo dañados por los villanos.

Le di una patada a Shigaraki en el costado seguido de un puñetazo en la cara a punto de tirarle la mano que lleva en su rostro. Le di otro envuelto en Soul para lanzarlo lejos.
El otro sujeto, el de la máscara, disparó un pequeño rayo a mi dirección el cual evadí al moverme a mi costado, sentí el calor detrás de mi, fuego. Giré sobre mis talones para cubrirme del fuego de Dabi.

Una explosión se escuchó detrás de mí. Ese fue Bakugo que me cubrió la espalda.

— No te voy a dejar sola en esto — dijo, lo miré sobre mi hombro —. Encárgate del sujeto de las grapas.

— Déjame también a Twice y al de la máscara de allá — apunté con mi cabeza —. Ve y salda cuentas con Shigaraki.

— No tienes qué decírmelo dos veces.

Me dirigí a Dabi que me esperaba con las manos envueltas en llamas. Me cubrí con un escudo escarlata de Soul. Al deshacerlo, ya me encontraba frente a él y deposité una patada en su mandíbula. Cayó de sentón, iba a darle una patada en el rostro pero Twice me logró dar un puñetazo en el rostro. Rodé en el suelo e inmediatamente me puse de pie, tomé impulso con las puntas de mi pie para lanzarme a su dirección y acertar un puñetazo en el medio de sus ojos, lo cual, cayó al suelo y con una gran ráfaga de Soul, lo mandé a volar lejos de mi presencia.

Bad Romance; Hawks x OC x DabiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora