THE FINAL EPISODE

4.8K 580 656
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



THE FINAL EPISODE
UNTOLD NAMES



Lo poco que podía recordar de aquella soleada mañana antes de que todo se volviera oscuro y despertara en un hospital, era Shibuya. El cruce siempre lleno de personas, gente yendo a sus trabajos o estudiantes volviendo de clases. Podía recordar salir de la universidad cansado, cruzar por la facultad de Matemáticas y Física y allí tropezarse con una profesora que murmuraba airada algo sobre la tesis de una estudiante. Después, estaba completamente preparado para simplemente dar un paseo por Tokyo antes de empezar sus rondas semanales en el Hospital Universitario de Tokyo en el que tendría que fingir que esos niños no morirían en menos de un año delante de sus padres.

Se sentía... Diferente. Sí, esa podía ser la palabra. Sentía una presión extraña en su pecho, un nombre que era incapaz salir de su boca y la sensación de que había pasado mucho tiempo.

Recordaba también el meteorito caer. Un espectáculo digno de admirar, pero desde lejos. Primero atravesó unos edificios, golpeó por la onda a los de alrededor y después cayeron trozos más pequeños. Aún si ninguno de ellos le había dado, los doctores aseguraron que fue suficiente para que le provocara una parada cardíaca y fuera atravesado por un escombro. Le habían salvado a duras penas, pero aseguraban que había sido realmente afortunado en comparación a las más de 2.000 personas fallecidas. Todo Japón estaba volcado en ayudar a la mayor cantidad de personas posible, e incluso otros países estaban enviando ayudas y representantes.

La habitación del hospital era silenciosa. Tan solo su respiración, pensamientos y el pitido de dos máquinas que median sus constantes. Por privacidad, una enorme cortina blanca le separaba de una chica que estaba también ingresada. Más grave, pero se encontraba ya bien. O eso decían la doctora y la enfermera encantada de atender a todos con una sonrisa.

— Oye... —su voz era arrastrada. Era la primera vez que la escuchaba hablar, y tenía un extraño acento que no reconocía—. ¿Tienes agua por ahí?

— No, lo siento — negó. Podía ver los mechones marrones de su compañera de habitación—. He oído que tu corazón también se detuvo un minuto.

𝗣𝗛𝗢𝗕𝗜𝗔 ━ 𝘈𝘭𝘪𝘤𝘦 𝘐𝘯 𝘉𝘰𝘳𝘥𝘦𝘳𝘭𝘢𝘯𝘥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora